Mayra Mendoza retuvo el control en el Concejo en Quilmes y ya empieza a hablar de reelección
El triunfo en las elecciones del último domingo contra la lista de Martiniano Molina le permite a la intendenta camporista tener mayoría y quórum propio en el ámbito legislativo local, que quedó completamente polarizado. Sus planes para 2023.
Mayra Mendoza sonríe. Su triunfo electoral en Quilmes no sólo dio vuelta el riesgoso resultado de las PASO sino que la avala para profundizar políticas de cara a los dos años que le quedan al frente del Municipio. Y como consecuencia del golpe de efecto que consiguió este domingo, ya sembró el germen de su reelección en 2023.
La victoria en las elecciones domingo le permite al Frente de Todos obtener siete bancas contra las cinco que ganó Juntos, y así el oficialismo tendrá 13 representantes en el Concejo Deliberante mientras que el sector opositor contará con 11. El recinto quedó completamente polarizado: la única tercera fuerza hasta ahora era el partido GEN (socialdemocracia de Margarita Stolbizer) que tenía una legisladora como Gabriela Fernández, que muchas veces fue clave para dirimir quórum y definir votaciones dependiendo su alineación con los dos espacios mayoritarios.
El Frente de Todos renovó las bancas de Eva Stolzing, Fábio Báez y Federico D’Angelo mientras que a partir de diciembre entran Cecilia Soler, Evelin Giancristóforo, Sebastián Majo y Florencia Esteche. Por Juntos, Ignacio Chiodo, cabeza de lista, permanecerá como edil y quienes ingresarán serán Patricia Capparelli, Walter Fernández, Patricia Ballesteros y Fernando Pérez
Fuerte Apache: el desesperante traslado de la Policía a un chofer municipal baleado en un tiroteo
De haberse repetido el resultado de las PASO, el escenario en el Concejo iba a ser favorable a la oposición y eso no sólo iba a demorar distintas iniciativas del Frente de Todos, sino que también iba a poner a la intendenta frente a la necesidad de acordar y dialogar. Y Mayra, con su estilo, buscó siempre diferenciarse de la gestión precedente de Juntos por el Cambio, la que incluso criticó tras emitir su voto en un colegio de Ezpeleta.
Consumado el triunfo, en el búnker de Quilmes Oeste, la intendenta se dejó llevar entre cánticos como «un minuto de silencio…» y «te querés matar…» dirigidos al máximo referente opositor local y diputado provincial electo, Martiniano Molina. Y ante su nutrida militancia dijo que «este triunfo lo construimos entre todos y todas y eso nos hace invencibles. Logramos revertir esta elección, si el peronismo se mantiene unido, si la militancia deja todo como lo dejamos en esta elección, la derecha no vuelve nunca más”. En el acto también estuvo Máximo Kirchner, su «padrino» en la organización política que conduce y de la que la mandataria quilmeña es referente, La Cámpora.
En medio de la algarabía y la euforia de la noche del domingo, acompañada de Cecilia Soler, concejal electa y la cabeza de la lista oficialista, Mayra Mendoza remarcó sus intenciones hacia 2023: «Hay que redoblar los esfuerzos en la organización territorial, en la militancia que demostró que fue parte fundamental para construir esta victoria. No nos van a alcanzar cuatro años, necesitamos muchas gestiones de gobiernos peronistas para lograr lo que queremos lograr en Quilmes, que todos los habitantes vivan con la misma dignidad que todos y todas nos merecemos».
Tras la derrota, un referente opositor criticó a Mayra Mendoza
En una jornada electoral caliente por la denuncia de micros municipales llevando gente a votar en el barrio La Paz «con intencionalidad electoral» y el reclamo por falta de boletas, Juntos tenía prevista una conferencia de prensa en su búnker del centro de Quilmes que terminó suspendiendo cuando se conocieron los resultados.
La derrota golpeó al frente opositor, que aunque sumó más de 6000 votos terminó cayendo casi 3 puntos porcentuales respecto de las PASO, que había dejado la expectativa de obtener la mayoría en el Concejo Deliberante. Tanto afectó la caída que, de hecho, ni el primer candidato a concejal Ignacio Chiodo, ni el propio Martiniano Molina, que tenían acordado dar declaraciones, se expresaron públicamente desde el domingo.
General Rodríguez tiene su «Netflix»: lanzan una plataforma con contenidos locales
El único que se manifestó fue el ex funcionario molinista, dirigente radical y referente local de Juntos, Ariel Domene, quien apuntó contra Mayra Mendoza por sus exultantes festejos: «Nada que festejar en una elección donde más del 60% de los vecinos de Quilmes eligieron opciones muy distantes del populismo clientelar del gobierno de Mayra. Ahora nos toca seguir trabajando en la construcción de un frente Juntos Quilmes con más apertura y participación ciudadana para recuperar el gobierno de la ciudad que padece una inseguridad atroz, donde 7 de cada 10 niños son pobres con escuelas cerradas, una asfixia de la clase media y un retroceso en las actividades productivas y comerciales inauditas».
Y cerró: «En una elección intermedia siempre hay mensajes que escuchar pero la ciudadanía sabía que no se elegía un nuevo intendente. Vamos juntos a seguir trabajando para ofrecer la mejor opción de gobierno para administrar esta ciudad con amplitud y responsabilidad».