Como en Berlín, pero contra un insecto: la historia del muro que se levantó en Lomas de Zamora

Lomas de Zamora. Historias de mi barrio
·
12 de junio de 2021

En 1897 las “saltonas”, como se les decía entonces a las langostas, invadieron todo el distrito. Se comían los cultivos, los árboles y hasta la ropa. Hartos, los vecinos de la zona se unieron y encontraron una original solución para combatirlas.

Pasó hace mucho tiempo, pero el recuerdo de la pesadilla vivida en aquellos días se fue transmitiendo de generación en generación, y así es que no son pocas las personas del distrito que alguna vez escucharon hablar del hecho. Hace 124 años las “saltonas”, como se les decía entonces a las langostas, invadieron todo Lomas de Zamora, comiéndose los cultivos y generando muchas molestias. Y para terminar con la plaga fue necesario que todos los vecinos se unieran y encontraran una solución muy original.

Fue a fines del Siglo XIX, exactamente en 1897, cuando un número enorme de langostas comenzó a amenazar con la extinción completa de los cultivos de los terrenos en toda la región. Los insectos arrasaban con las cosechas y la preocupación entre los vecinos era cada vez mayor, porque para muchos de ellos era un medio de subsistencia fundamental.

Durante esos años, en la región la agricultura tenía un rol cada vez más predominante, desplazando a la ganadería. Los animales que quedaban ya se utilizaban para optimizar este trabajo en las chacras y solo cruzaban las zanjas que limitaban las tierras para alimentarse de las plantaciones vecinas.

Por eso el ataque de esta plaga fue una muy mala noticia. Además, las langostas también desovaban en esos terrenos, y no solo se reproducían cada vez más, sino que se afianzaban en el lugar.

El chico de Banfield que creó un dispositivo que usan las clínicas para casos de Covid-19

Para colmo, los odiados insectos también la emprendían contra los árboles e incluso la ropa que estaba colgada en las sogas de las casas secándose. La situación ya se iba tornando insostenible, lo que llevó a que todos los vecinos del distrito se reunieran para encontrar una salida. No se sabe si lo hicieron inspirándose en algún ejemplo extranjero, pero en el sur del Gran Buenos Aires se decidió finalmente fabricar un muro que resultó muy efectivo.

El armado del muro de Lomas de Zamora

La medida para terminar con lo que era un verdadero ejército aéreo surgió luego de que los vecinos establecieran, primero, una comisión para estudiar los movimientos de las langostas. Así, se formó en Lomas de Zamora la primera (y claro, la única en toda la historia) Comisión Popular de Defensa contra la Langosta.

En un comienzo, la idea que se les ocurrió fue preparar montículos de pasto húmedo, virutas y trapos viejos, salpicarlos con alquitrán y prenderlos fuego, para que el humo espantara a las “saltonas”. Y si bien dio resultado, también generó muchos incendios.  

La idea original fue quemar unos montículos de pasto húmedo, pero se generaron peligrosos incendios.
La idea original fue quemar unos montículos de pasto húmedo, pero se generaron peligrosos incendios.

Por eso, y luego de analizar la manera en la que se comportaba el ejército enemigo, se decidió avanzar en la construcción de una barrera de chapas de zinc para impedir que las langostas siguieran invadiendo el partido, especialmente en lo que actualmente son las zonas céntricas de Temperley, Banfield y Lomas. En esos puntos era donde las langostas centraban su ofensiva.

Además, se implementó otra estrategia: la construcción, al costado del muro, de una zanja, con el objetivo de que los insectos saltaran dentro de la misma y terminaran “enterrados” allí.

De Lomas de Zamora a Latinoamérica: la historia de los muralistas que ahora decoran las escuelas

Como explicó Norberto Candaosa -miembro del Instituto Histórico Municipal de Lomas de Zamora- al referirse a este inolvidable suceso, el muro se levantó pensando especialmente en las crías, ya que las langostas adultas podían sobrepasar volando las chapas, que tenían entre 50 y 60 centímetros de alto. “Pero se empezó por combatir las larvas, a las que les costaba volar y tampoco podían saltar tanto. Por lo tanto, no podían llegar a las plantaciones”, explicó el historiador.

Así, se fueron eliminando fácilmente a estas crías que quedaban en las zanjas y, por lo tanto, no llegaban a desarrollarse ni mucho menos a reproducirse. Paralelamente, se trataba de ir combatiendo a las langostas adultas.

El muro sirvió como protección durante todo el verano y, con la llegada del frío, finalmente el enemigo se batió en retirada y abandonó el sur del Conurbano. La pesadilla había terminado.

Temas relacionados
Suscribite a nuestro newsletter
Te puede interesar
parrilla El Tano, Wilde
Avellaneda. Historias de mi barrio

La increíble historia de la parrilla El Tano, el ícono que empezó con unos chorizos en el piso y tiene un nuevo local en Wilde

Jaime Niederer, el DJ especialista en vinilos de Lomas de Zamora, necesita una operación urgente por un raro síndrome.
Lomas de Zamora. Sociedad

La lucha del DJ que es furor con sus fiestas retro en Lomas de Zamora: sufre una rara enfermedad y necesita ayuda para operarse

Temperley, Jazz, Música en el Balcón
Lomas de Zamora. Sociedad

El balcón de los conciertos de Temperley: la historia detrás de los músicos de jazz que brindan shows gratuitos para los vecinos

Se harán todo tipo de trabajos de mejoras en el túnel de Temperley, que mejorará la conectividad entre Lomas de Zamora y el distrito de Quilmes.
Lomas de Zamora. Sociedad

Arrancó la reconstrucción del túnel de Temperley en el tren Roca: cuáles son los cortes de tránsito y los desvíos previstos