Hurlingham: la autopsia de la nena de 5 años confirmó la peor sospecha contra los padres

Luciana Florencia Villa tenía 5 años y falleció el miércoles en un hospital de Hurlingham, luego de que su padre la llevara diciendo que había sufrido un paro cardiorrespiratorio luego de, supuestamente, haberse “atorado” con comida en su casa. Aunque los médicos lograron reanimarla, finalmente murió a raíz de una hemorragia interna. Eso, sumado a las marcas de violencia que tenía en su cuerpo, despertaron las alertas y sus padres fueron detenidos de inmediato como sospechosos de haberla asesinado. Finalmente la autopsia realizada confirmó lo peor: además de haber muerto a los golpes, la nena era abusada sexualmente.

La fiscal del caso, Marina Rueda, titular de la UFI Nº12 de Morón, fue quien había requerido que se realizaron los exámenes sobre el cuerpo de la menor, para confirmar las presunciones. Y cuando recibió los resultados el informe era espantoso. Según informaron fuentes judiciales, Luciana sufría abusos sexuales de larga data y, además, se concluyó falleció debido a una brutal golpiza.

Quiénes son los padres de la nena de 5 años

Con los resultados en su mano, Rueda llamó a declarar ayer por la tarde a los padres de la menor. Ambos se negaron a hablar y quedaron aprehendidos, a la espera de que el Juzgado de Garantías Nº 3 de Morón convalide la detención. Por el momento, Marcos Leonardo Villa (33) y Marcela Segovia (45) quedaron acusados como coautores del homicidio agravado por el vínculo, que prevé la pena de prisión perpetua. Además, la fiscal imputó al padre de la víctima como presunto autor del abuso sexual, y a la mujer como partícipe necesario de ese delito.

Tras los arrestos, la mamá de la nena dijo que ella era víctima de violencia de género y que había denunciado previamente a su pareja en tres oportunidades. Una fuente del caso aseguró que las denuncias se habían realizado en 2016, pero Segovia tras las acusaciones perdonaba a Villa y “todo continuaba igual”. Por eso, la fiscal entendió que la mujer es coautora del crimen de su propia hija.

Hurlingham: allanamientos en dos casas

Rueda también había ordenado el miércoles un allanamiento en la casa de la familia, ubicada en la calle Guayra, de la localidad de Villa Tesei, donde secuestró ropa interior de la niña, una funda de almohada y sábanas con aparentes machas de sangre y otros fluidos que serán analizados para cotejos de ADN.

La familia alquilaba esa casa hace no más de un mes, y antes vivía en la propiedad de la abuela materna de la menor asesinada, que también fue allanada en las últimas horas por disposición de la fiscal Rueda.

Habrá que ver si en ese domicilio se encuentran nuevas pruebas que aporten a la causa. Por el momento, la situación de los padres ya se comprometió seriamente. Y no quedan dudas sobre la mentira de Villa cuando llegó con su hija en brazos a la Unidad de Pronta Atención (UPA) ubicada en Veragua al 4500, en la localidad de William Morris.

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La pareja tiene otra nena, de ocho años, que actualmente se encuentra bajo la protección de la Justicia. Y se espera que cuando esté en condiciones de hacerlo pueda declarar en Cámara Gesell. Su testimonio también puede ser importante para esclarecer todavía más los hechos.

El hecho que conmocionó desde el primer momento cobró ahora mayor dramatismo, al conocerse los resultados de la autopsia. Y más allá de lo que significa que cada vez haya mayores certezas de que los propios padres fueron los autores de la muerte de la menor, hay otro dato que impacta: la madre es docente. Eso significa que está en contacto permanentemente con otros chicos. Según su cuenta personal de Facebook, desde abril de este año se estaba desempeñando en la EP N° 24 La Esperanza, de Hurlingham.