De la facultad a los medios: el trabajo práctico sobre un heladero de Monte Grande que se hizo viral

Todo empezó como un simple trabajo práctico para la facultad. Pero la combinación de ciertos factores, como la nostalgia y el sentido de pertenencia, lograron que el documental que realizó Moira Caamaño para su carrera de Diseño de Imagen y Sonido en la Universidad de Buenos Aires (UBA), sobre la historia de Oscar Rodríguez, el famoso heladero ambulante de Monte Grande, se viralizara muy rápidamente.

Moira, que tiene 21 años, recibió un día la consigna para la tarea que tenía que realizar para Proyecto Audiovisual II. “Es la materia principal de la carrera, porque implementamos todo lo que aprendemos en el resto de las asignaturas. Y en este segundo nivel vemos todo el año lo que es documental”, explicó en la charla con Zonales.  

El trabajo práctico consistía, precisamente, en crear un documental bajo el formato “video-minuto”. Y la primera traba que debió superar -y sin dudas que lo hizo con creces- fue la de encontrar un buen tema para contar. “Mi hermana me sugirió que hablara sobre Oscar y me dijo que nuestro papá tenía su número de teléfono. Me encantó la idea y enseguida lo llamé”, contó la alumna de la Facultad de Arquitectura, Diseño y Urbanismo de la UBA.

El heladero ambulante accedió sin problemas a contar su vida. Y, durante todo un fin de semana, Moira siguió de cerca a Oscar y a su característica camioneta de helados, que recorre -a paso lento- las calles de Monte Grande, y también de Luis Guillón, desde hace 41 años.

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“Creo que la suya es una historia de las más características de mi barrio. Todo el mundo lo conoce en Monte Grande. Y quienes le compran saben que es una muy buena persona y que siempre transmite su alegría”, aseguró Moira.

Una vez terminado, el documental titulado “9 sabores” fue publicado en las redes sociales de la alumna. Y en solo cuestión de horas ya se había viralizado. “Nunca pensé que iba a trascender tanto -admitió-. Y la verdad es que me quedé con ganas de hacer algo más con la vida de Oscar”.

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Moira narró la historia de Oscar de una manera tan simple, como emotiva. En los 60 segundos con los que contaba para hacerlo pudo plasmar, por ejemplo, el testimonio de una chica del barrio, que recordó que desde que ella nació siempre vio pasar al heladero ambulante, y que su familia le compraba todos los fines de semana.

También, claro, está el testimonio del protagonista principal, quien admitió ser una persona muy querida por los vecinos: “Nunca imaginé con un carrito llegar tan profundo en la vida de tantas personas”. Y también recordó los nueve gustos de helado con los que empezó a trabajar, cuando todavía se movilizaba a caballo.

Además de la repercusión que obtuvo con su documental, Moira se enteró ayer por la noche que aprobó el trabajo práctico. “Me saqué un 8,5. Fue una muy buena nota. Y me hicieron algunas correcciones, como por ejemplo que les hubiera gustado que hable más de la historia de los sabores. Ya iré mejorando y captando mejor los ritmos. Es cuestión de experimentar y aprender en la práctica”, dijo.

Pero no sólo recibió una muy buena calificación, sino que también obtuvo el primer premio del Festival en el que participó con su documental. “Es algo que organizaron los mismos profesores, y lo hicieron para que los proyectos se puedan conocer por medio de las redes sociales”, contó Moira.

Y aunque aclaró que el ganador “se determinaba a partir de las reproducciones y los likes que recibiera cada trabajo, es decir que no está relacionado a lo académico”, sabe que todo lo que desencadenó la historia de Oscar contada por ella le puede servir mucho en su futuro profesional: “Me empezó a seguir en Instagram mucha gente en general, y también sitios de Producción o profesionales que yo admiro. Así que siento que es el inicio de algo muy bueno en mi vida laboral”.

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Todavía asombrada por la repercusión de su documental, y sobre todo muy feliz, aseguró que “más allá del certamen, gané un montón de cosas. El apoyo y el amor que recibí de todo Monte Grande ya es más que suficiente para mí. No tengo palabras para agradecerles a los vecinos”. Y explicó que en el certamen hubo “muchos trabajos que me gustaron. Y sería lindo que todos quienes me apoyaron a mí también los vean”.