Almirante Brown: es fanático del colectivo 160 y celebró los 7 años con una singular fiesta temática
Román Díaz es un nene del barrio Don Orione. La familia le organizó el festejo en torno a la línea de transporte que pasa por la puerta de su casa: conoce las marcas de todas las unidades, los recorridos y las paradas.
Román Díaz es un nene de 7 años que vive en Almirante Brown, zona sur del Conurbano, y pudo tener un festejo de cumpleaños muy particular: su familia le organizó una fiesta temática, pero no hubo imágenes de Mickey, Toy Story, Monsters Inc., Ben 10 u otros personajes o producciones infantiles. La decoración se diseñó en torno a la línea de colectivos 160, cuyas unidades pasan por la puerta de su casa y por la que el chico tiene una particular admiración.
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Carolina Schvemler, su madrina, publicó fotos de la fiesta en sus redes sociales y señaló que el nene «es fanático y colectivero de alma, posta». Su padre era conductor de colectivos pero falleció cuando él era bebé. Oriundo del barrio Don Orione, ve pasar las unidades de la línea 160 por la puerta de su casa; con el tiempo le empezaron a gustar los «bondis» y en particular los de esa línea.
Hoy, su familia cuenta que se conoce los recorridos y las paradas, y que también fue aprendiendo las calles y las marcas de las unidades, aunque también tiene inquietud sobre marcas de autos.
«Está tan loco por el colectivo, que hasta los choferes lo conocen ya», contó Schevemler a El Diario Sur. Y agregó: «Le conté a todo el mundo que íbamos a festejar el cumpleaños con esta temática. Es un nene muy especial y dulce y estoy muy orgullosa de él».
Un vestuario especial para un cumpleaños especial
La familia reveló que el nene sueña con ser chofer de la línea 160, que está administrada por la empresa MOSUR y une Don Orione, en Almirante Brown, con Ciudad Universitaria, en Capital Federal. En su paso, atraviesa los barrios porteños de Almagro, Parque Patricios, Pompeya, Boedo y Palermo y los distritos de Lanús y Lomas de Zamora en el sur del Gran Buenos Aires.
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Acorde a su fanatismo, su madrina y su mamá consiguieron una camisa similar a la de un colectivero con el talle apropiado para él y le bordaron el número 160 para que el nene pudiera lucirse como un chofer. Sin embargo, faltaba la corbata con la inscripción de la empresa, algo que finalmente la madre obtuvo gracias al regalo de uno de los conductores de la mencionada línea.
«El no sabía que le íbamos a poner una camisa bordada con el número 160 y una corbata que le regaló un chofer. Román aprendió a leer con los carteles del colectivo y como es una línea que se suele tomar para ir a la casa de su abuela, se sienta adelante y va hablando con los colectiveros», cerró Carolina.
Otro cumpleaños con la decoración de un colectivo en Bernal
En septiembre de 2019, trascendió otra fiesta de cumpleaños llamativa como la de Román: fue en Bernal, en el partido de Quilmes, donde un nene llamado Julián cumplió 6 años y su casa tuvo una decoración inspirada en la línea 247, de la que era fanático.
Según su mamá, «cuando de chico no se podía dormir lo llevábamos a la terminal que queda a tres cuadras de nuestra casa, en Bernal. Íbamos a la entrada, de noche, se ven súper lindos con las luces y él se volvía loco».
Compartió las imágenes del cumpleaños en redes sociales y la cuenta de Facebook de la empresa las replicó, aunque rápidamente aparecieron comentarios negativos de usuarios sobre el estado de las unidades y la frecuencia. La situación, obligó a la madre a aclarar que ningún familiar de Julián trabajaba en la línea de colectivos.
«No viajamos nunca en el 247 porque al jardín vamos en otra línea. Igualmente, los tres ramales pasan por casa. Entiendo a la gente porque conozco la línea y sé lo que es, pero él no entiende nada de eso, no lo sabe, lo ve como si fuese un cinco estrellas espectacular, le encanta. La gente es así, deben odiar cuando no viene, a mí me ha pasado. Pero es la inocencia de un nene», había remarcado.