La beba que murió en Ciudad Evita: acusaron por abuso a los padres y los detuvieron, pero la autopsia desmintió a los médicos
La niña ingresó con muerte cerebral al Hospital Balestrini. Los padres, señalados como sospechosos, dijeron que se había ahogado con la leche. Los médicos que la atendieron afirmaron que había signos de abuso sexual, pero el médico legista los contradice. La familia exige la inmediata liberación de los progenitores.
Más pruebas aparecen y más difícil se vuelve esclarecer el panorama en torno al fallecimiento de Alison Barrientos Rivero, una beba de tan solo 21 días de edad que ingresó por guardia al Hospital Dr. Alberto Balestrini de Ciudad Evita, partido de La Matanza. Tras ser examinada por los médicos, se constató que tenía muerte cerebral y lesiones compatibles con abuso sexual. Al poco tiempo, la menor perdió la vida.
Las hipótesis sobre lo sucedido se contradicen: los padres de la niña, identificados como Layla Melani Rivero, de 24 años, y Omar Barrientos, de 26, afirmaron que Alison se había atragantado con la leche que había ingerido antes de dormir y que la encontraron ahogada en la cama. Pero los médicos que la atendieron sostienen que la menor presentaba golpes y signos de abuso sexual en la zona anal. Por su parte, la autopsia realizada reveló que no existen tales signos, de modo que le dio crédito a lo dicho por los progenitores. Aun así, continúan detenidos bajo la carátula de “homicidio agravado por el vínculo”. Frente a este confuso panorama, la justicia no descarta ninguna hipótesis y continúa recolectando pruebas para esclarecer la causa.
En tanto, los profesionales de la salud que examinaron a la niña prestaron declaración ante la justicia y ratificaron la versión del abuso sexual. “El informe preliminar de autopsia no se condice con las lesiones que decían los médicos que atendieron a la nena en el hospital. Por eso hoy se les recibió declaración a los profesionales que la asistieron, quienes se mantuvieron en sus dichos”, revelaron fuentes judiciales.
Asimismo, los investigadores de la Policía Científica fueron a la casa de la familia, ubicada en el barrio San Alberto en la localidad de Isidro Casanova, partido de La Matanza, y secuestraron una sábana con sangre hallada en la cama matrimonial, lo que se suma a la lista de pruebas a examinar. Además, la pareja tiene otros tres hijos menores, de 8, 7 y 5 años, quienes fueron resguardados por el servicio de protección local.
Ciudad Evita: la familia de la beba fallecida pide que liberen a los padres
Luego de que los resultados de la autopsia desmintieran la versión de los médicos, la familia de Layla y Omar, padres de la Alison, realizó una manifestación ayer por la tarde en la puerta del Hospital Balestrini para reclamar por su inmediata liberación y su inocencia. Ambos todavía se encuentran detenidos: el hombre está alojado en la seccional policial del barrio San Alberto, mientras que su esposa está detenida en la Comisaría de la Mujer de Laferrere.
Camila, hermana de Omar y tía de la beba, aseguró que ambos “son inocentes” y “buenos padres”, al tiempo que habló del momento desesperante por el que atraviesan. “Como familia estamos viviendo un doble drama. Por un lado la muerte de mi sobrina, y por otro, una acusación tremenda contra mi hermano y mi cuñada, que no tienen nada que ver con lo que pasó y bastante carga implica para ellos haber perdido a una hija recién nacida”, sostuvo.
Además, la joven informó que en el nosocomio no les dieron un motivo claro de la muerte de la beba. “En el hospital nunca nos dijeron por qué había fallecido Alison. Yo tenía entendido que la nena se ahogó con la leche y llegó ya ahogada”, agregó.
“Son dos padres ejemplares que dan todo por sus hijos. Estamos pidiendo su liberación inmediata y que limpien sus nombres, porque los escracharon por todos lados cuando no hicieron nada, sino que vivieron una tragedia familiar”, concluyó la tía de la menor fallecida.