La Plata: se burlan de la clausura y reabren la hamburguesería donde atacaron a una inspectora
En el local Otilia, del centro de la capital bonaerense, fue agredida Verónica Bustos, empleada municipal que en la madrugada del domingo clausuró el comercio. Los dueños sacaron las fajas 24 horas después: los volvieron a cerrar.
La inspectora Verónica Bustos y las huellas de la agresión que sufrió.
El brutal ataque a una inspectora municipal de La Plata derivó en la clausura del local Otilia, una hamburguesería situada en pleno centro de la capital bonaerense. Pero a los dueños del comercio poco les importó la existencia de una faja que prohibía la actividad en el lugar: el domingo por la noche decidieron reabrirlo, por lo que fueron nuevamente sancionados por la comuna platense.
«No les importó que hayamos puesto la faja y la rompieron. Al mediodía ya estaba abierto nuevamente», contó Verónica Bustos, la víctima de la feroz golpiza que ocurrió el sábado en el comercio ubicado en la esquina de 4 y 53. Desde el Municipio informaron que, una vez que supieron de la reapertura, asistieron al local para clausurarlo nuevamente, además de haberes aplicado una segunda acta de infracción.
El caso tomará estado judicial no sólo por las acciones de la Municipalidad de La Plata, sino también porque los propietarios del comercio radicaron una denuncia en la que ofrecen una versión diferente a la que fue difundida oficialmente desde la Comuna, habida cuenta de que la agredida es una trabajadora del cuerpo de inspectores; de hecho, acusan a los municipales de haber iniciado la gresca.
Versiones cruzadas por la inspectora de La Plata agredida
Más allá de la existencia de un video en el que se observa el momento del ataque contra la inspectora, la propia mujer dio su versión del episodio, que ocurrió cuando se estaban retirando del local junto con el resto de los municipales. «A mí la que me pegó y lastimó fue la madre del dueño», sostuvo la damnificada.
El hecho ocurrió alrededor de las 4 del domingo, cuando los inspectores acudieron al local Otilia Burgers al responder a una denuncia por una presunta fiesta clandestina en el lugar. Allí, se constató que en la terraza había unas 80 personas bailando y el supervisor de turno, Adrián Campanino, les informó a los dueños que la habilitación del comercio no correspondía con la actividad que se desarrollaba.
Desde el Municipio platense indicaron que los titulares del lugar advirtieron que se trataba de una fiesta privada y se negaron a dar por terminado el evento, lo que derivó en el cruce que se ve en el video, con golpes y las agresiones que quedaron grabados.
La hamburguesería de la discordia
Situado en pleno La Plata Soho, los comerciantes fueron denunciados por la agresión que sufrió la agente que participaba del operativo realizado por una denuncia vecinal por ruidos molestos y en el que, de acuerdo con las autoridades locales, se terminó constatando el desarrollo de una fiesta clandestina en el lugar.
Según indicó el portal 0221.com.ar, el encargado del local, Mauricio Tiravantty, dijo que no se trató de una fiesta clandestina sino que en la hamburguesería estaba festejando su cumpleaños junto a su familia y amigos. Y afirmó que el conflicto comenzó cuando los inspectores entraron «de manera ilegal», golpearon a su mamá y a su hermano y le arrojaron gas pimienta en los ojos.
Tiravantty también sostuvo que al momento del conflicto el local estaba vacío, denunció que el personal de la Comuna le pegó a un menor de edad y aseguró incluso que todo quedó registrado en las cámaras de seguridad del local.
Además, apuntó que al llegar los dos primeros inspectores ya no había gente en el local salvo quienes se habían quedado limpiando, que ya habían bajado el volumen de la música y que el altercado se dio 40 minutos más tarde, cuando “cayeron cuatro inspectores más diciendo que había que clausurar, abrieron la puerta del local cuando ya estaba cerrado, y eso es un allanamiento ilegal», sostuvo.
La Plata: quién era la estudiante que se equivocó de colectivo y murió al intentar bajarse
Fue entonces cuando sobrevino la agresión contra la inspectora municipal que terminó lastimada: la mamá de Mauricio salió a defenderlo, se trenzó con la mujer y también la atacó a golpes. «Mi vieja salió a defenderme y se peleó con la señora que salió en los medios lastimada, pero mi mamá está golpeada también. El inspector también golpeó a mi hermano que es menor de edad y me tiró gas pimienta en la cara», cerró el hombre.
