Cómo jugó el Conurbano en el balotaje: una por una, las grandes sorpresas que logró Javier Milei contra Sergio Massa
Las elecciones que definieron el nuevo presidente dejaron al descubierto un escenario dividido en el peronismo del Gran Buenos Aires. La diferencia que se dio entre las dos secciones electorales.
Javier Milei le sacó más de 11 puntos a Sergio Massa en el balotaje para ser consagrado como el nuevo presidente de la Nación gracias al aluvión de votos que obtuvo en distintos territorios, como Córdoba, Santa Fe y Mendoza. Pero la derrota de Unión por la Patria se explica sobre todo en la pobre performance del oficialismo en la provincia de Buenos Aires, donde apenas pudo sumar 700.000 votos respecto del 22 de octubre, contra los más de 2,2 millones que creció La Libertad Avanza.
En ese escenario de achatamiento en el principal bastión del peronismo se vieron resultados cuanto menos sorpresivos. Los intendentes del Conurbano, que habían sido clave en las generales para empujar la reelección de Axel Kicllof y dejar a Massa a sólo tres puntos de ganar en primera vuelta, no parecen haber tenido en el balotaje el mismo peso. Se lo vio así sobre todo en la Primera Sección Electoral, donde el ministro de Economía no pudo siquiera ganar en Tigre, su pago chico.
En la Tercera Sección Electoral, en cambio, el kirchnerismo no dejó lugar a dudas. Ganó y por amplia diferencia en los distritos más populosos, como La Matanza, Lomas de Zamora, Quilmes y Almirante Brown, en un escrutinio global que le dio a Sergio Massa el 17% de los poco más de 11,5 millones de votos que obtuvo en todo el país.
Pero los cálculos del oficialismo apuntaban a lograr un triunfo más holgado en la provincia de Buenos Aires, donde la diferencia en favor de Massa fue de apenas 142.500 votos (50,7 a 49,3 en términos porcentuales), cuando en otras provincias como Córdoba, Mendoza y Santa Fe perdió por paliza. Así, el territorio peronista por antonomasia no ofreció el balance necesario para equilibrar el resto del país.
La Tercera Sección Electoral ratificó su perfil peronista
Un tuit de un polémico dirigente de fútbol, como lo es el ex barra brava de Boca y presidente de Almirante Brown Maximiliano Levy, le puso palabras a lo que muchos pensaron dentro del peronismo cuando empezaron a conocerse los resultados: “Aprendan a ser leales. Fernando Espinoza conducción”, escribió en la red social X, con la imagen del escrutinio en La Matanza.
En efecto, La Matanza se consolidó en este proceso electoral como la capital nacional del peronismo. En el balotaje sumó 478.833 votos, de acuerdo al recuento provisorio, lo que se traduce en el 61,1% de los votos. La Libertad Avanza, de todos modos, quedó con 303.672, el 39,9%. Así, Espinoza cuidó el territorio, tal como lo dijo Levy.
Algo similar sucedió en Lomas de Zamora, donde el escándalo generado alrededor de Martín Insaurralde volvió a parecer una simple anécdota para la mayoría del electorado. Allí, Unión por la Patria le sacó 17 puntos a La Libertad Avanza: 227.514 (58,5%) a 160.971 (41,5%).
También fue fuerte el caudal de votos que le dio a Massa Almirante Brown, donde el intendente reelecto Mariano Cascallares traccionó para alcanzar 201.239 votos (58,9%) contra los 140.441 (41,1%) de los libertarios. En Quilmes, la diferencia fue también amplia: 204.429 (56,6%) para el peronismo encabezado por Mayra Mendoza -que jugó fuerte en la campaña- y 156.553 (43,7%) para una oposición que con Martiniano Molina se mostró prescindente.
La diferencia más amplia en la Tercera Sección Electoral se vio en Florencio Varela, donde Unión por la Patria llegó al 63,1% (157.084 votos). En Avellaneda llegó al 57,6% (127.060); en Lanús trepó al 56,1% (157.320); en Berazategui alcanzó el 55,7% (118.509); y en Esteban Echeverría, con un intendente como Fernando Gray enfrentado con la conducción partidaria en la provincia de Máximo Kirchner, se posicionó en el 53,1% (96.277).
La Primera Sección Electoral, en la mira del peronismo
Sólo 50.293 votos de diferencia obtuvo Sergio Massa en la Primera Sección Electoral, la menos populosa del Conurbano pero un territorio que el ministro de Economía conoce muy bien porque no sólo es oriundo de allí (nació en San Martín) sino que en Tigre construyó su carrera política como intendente. Massa obtuvo 1.737.238 sufragios en la suma de dichos distritos, mientras que Javier Milei llegó a 1.686.945.
El candidato de Unión por la Patria perdió en siete distritos, incluido Tigre, donde parecía haber alcanzado una tregua con el intendente Julio Zamora que, en virtud de los resultados de este domingo, pareció más una puesta en escena: el oficialismo llegó al 48% (118.382 votos) contra el 52% de La Libertad Avanza (128.526).
Otras derrotas sorpresivas de Massa se dieron en el norte del Conurbano. En Escobar, Milei ganó 52,4% a 47,6% (77.235 a 70.177). Una cifra similar se vio en Pilar, donde el libertario se impuso por 52,1% a 47,9% (108.260 a 99.478). El presidente electo también ganó en Morón, pero por un escasísimo margen (50,5% a 49,5%), del mismo modo que en San Miguel (51% a 49%)
Donde no hubo lugar para sorpresas en favor de Milei fue en distritos que son gobernados por Juntos por el Cambio. En San Isidro llegó al techo del 64,6%, y en Vicente López alcanzó el 62,6%.
Massa, en cambio, se impuso por una amplia diferencia en distritos también de histórica raigambre peronista: Merlo (60%), José C. Paz (59,9%), Moreno (59,5%) y Malvinas Argentinas (56,7%) le aportaron un importante caudal de votos.
Entre los triunfos más ajustados hubo territorios que le son afines, como San Fernando. Juan Andreotti, su intendente, fue el único jefe comunal que acompañó a Massa en el escenario en el que dio su discurso tras la derrota. En ese distrito, hubo un virtual empate: 50,1% a 49,9 para Unión por la Patria.
Igual de ajustada fue la victoria de Massa en Tres de Febrero, donde el intendente Diego Valenzuela, de Juntos por el Cambio, se puso en la vereda de enfrente de Milei. Y se reflejó en las urnas: Unión por la Patria llegó al 50,1%. El oficialismo también ganó pero por menos margen que el esperado en San Martín (52,2% a 47,8%), en Hurlingham (53,6% a 46,4%) y en Ituzaingó (52,3% a 47,7%).
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