Tiene parálisis cerebral, es DJ y tocó para 800 personas: la historia de superación de un joven de Llavallol

Mucho suele hablarse de la fuerza de voluntad y los sueños, como motores de superación. Lautaro Molinares, un joven de 18 años de Llavallol que padece parálisis cerebral e hipoacusia severa, quizás sea un claro ejemplo del efecto que pueden generar las ganas de ir por uno o varios objetivos, sin importar las circunstancias.

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Al chico le tocó, sin dudas, un escenario difícil: sólo escucha con audífonos y puede mover únicamente el lado izquierdo de su cuerpo, dado que el otro lo tiene paralizado. Un hábito ya incorporado a su rutina son las sesiones de kinesiología y terapias del lenguaje para trabajar la forma de comunicarse y su movilidad y poder llevar una vida lo más normal posible, dentro de su contexto, que lo tiene desplazándose en silla de ruedas.

Sin embargo, nada de todo eso lo ha frenado en las metas que se ha propuesto: Lautaro asiste al colegio, va a la cancha a ver al club de sus amores, Arsenal de Sarandí, y hasta juega al fútbol. «Juega los sábados en la Asociación Argentina de Fútbol en Silla de Ruedas a Motor. Es un chico que requiere mucha ayuda por su problema motriz pero cuando algo le apasiona, le busca la vuelta para arreglárselas solo y lograr lo que quiere», reveló Analía Abdo, su mamá, a El Diario Sur.

Y agregó: «Con Lauti íbamos a ver jugar y un día se me ocurrió llamar a la presidenta de la asociación. Comenzó de cero, sin tener conocimientos, pero de a poquito fue aprendiendo y hoy juega muy bien. Le gusta ser arquero».

Y su amor por el fútbol, también lo demuestra cuando va a ver los partidos de Arsenal. «Lo vive con mucha pasión. Siempre lo invitan a ver el partido desde el campo de juego y tiene la oportunidad de saludar a los jugadores y sacarse fotos con ellos», explicó la madre.

La noche soñada para el joven DJ de Llavallol

En paralelo a todas sus actividades, el chico de Llavallol desarrolló un gusto especial por la música y, durante la pandemia del Covid-19, comenzó a aprender por internet a hacer mezclas hasta convertirse en DJ. «Con su plata ahorrada de varios cumpleaños se compró una consola usada, sin saber cómo tocarla. Aprendió sólo, viendo videos. Se abrió sus redes donde muestra un poco de su música y un día nos llegó una propuesta de Auditorio Sur», comentó Analía.

Se trata de un importante boliche ubicado en Temperley en el que se presentan shows de artistas famosos. El Municipio de Lomas de Zamora organiza allí, una vez al mes, una matiné inclusiva para jóvenes con capacidades diferentes que quieran ir a bailar. Fue así como el domingo 1º de mayo, Lautaro fue el invitado especial para tocar como DJ.

«Fue el día más feliz para él. Le dijeron que tenía que tocar 15 minutos pero se quedó las dos horas que dura la matiné. El estaba muy nervioso porque, debido a su condición, realiza movimientos muy bruscos de manera involuntaria y no quería arruinar nada. Le dije que es una noche para que él disfrute y salió algo maravilloso. Se lo vio tan pleno, estaba donde él tenía que estar», recordó orgullosa su mamá.

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Como DJ emergente y juvenil, Lautaro tiene como ídolo a Fer Palacio, a quien pudo tener cara a cara y en varias oportunidades. «Se conocieron en un festival en Escobar donde Fer Palacio era DJ invitado. Lo hicimos faltar a Lauti a fútbol un sábado y lo llevamos sin decirle dónde íbamos. Cuando lo vio tocar no lo podía creer y se le fue el enojo de faltar a fútbol», contó Analía.

Y cerró: «Nos quedamos todo el show y cuando terminó nos acercamos para que nos firme una remera pero Palacio nos invitó a pasar con él y pudo tener una conversación y sacarse una foto con Lauti. Otras veces vino para Lomas de Zamora y cuando íbamos a verlo, lo reconoció a Lauti y lo saludó. Mi hijo está contento porque ya lo trata como un amigo».