Ante la suba de robos a jubilados, Lanús entrega botones antipánico a los vecinos mayores de 65 años
Desde la Comuna del sur del Conurbano detallaron que el 80% de las cerca de 200 entraderas que se registraron en lo que va del año en el distrito tuvo como víctimas a adultos mayores. Ya repartieron 2.000 equipos.
El Municipio de Lanús sigue con la implementación de la campaña que apunta a poder repartir botones antipánico al 100% de los vecinos del distrito que sean mayores de 65 años. La medida, según se consignó, se basa en que el 80% de los cerca de 200 robos a viviendas que se registraron en lo que va del año en el distrito tuvo como víctimas a adultos mayores.
«No se puede vivir así. Hace meses que tenemos una entradera por día a una casa donde viven adultos mayores. Los metemos presos, los liberan y vuelven a asaltar. El daño es irreparable», publicó recientemente en su cuenta de Twitter Diego Kravetz, jefe de Gobierno y secretario de Seguridad de la Comuna ubicada en el sur del Conurbano.
De acuerdo con la información dada a conocer por la Municipalidad de Lanús, de los 9 mil botones antipánico que ya repartieron entre los vecinos de los distintos barrios, alrededor de 2 mil fueron distribuidos entre jubilados.
«Esta es una manera de estar cerca del pueblo. Cuando uno vive una situación así lo que más necesita es que haya alguien que lo contenga, lo acompañe y lo ayude. Y ese es el rol que queremos adoptar», declaró Néstor Grindetti, intendente de Lanús, durante un encuentro con jubilados en el que presentó la iniciativa que puso en marcha la Comuna que comanda.
Por otra parte, Kravetz adelantó que tienen pensado presentar un proyecto de ley en el Congreso Nacional para solicitar que sea modificado el código penal y que los delitos cometidos contra mayores de 65 años consideren esa condición como un agravante.
Luego, agregó: “Este año en Lanús estamos sufriendo más que nunca las entraderas pero también las estamos combatiendo con nuevos esquemas de patrullaje, más guardias de vigilancia nocturna. Los abuelos son los más apuntados porque muchos están solos e indefensos. Por eso, los estamos acompañando y ayudando. Ahora necesitamos que sea el Congreso el que modifique el código penal y la Justicia la que haga cumplir las penas».
Los jubilados que residan en Lanús y quieran obtener su botón antipánico se pueden comunicar al 4357-5100 (interno 7720/7721), enviar un mail a solicitud.antipanicos.lanus@gmail.com o acercarse al Centro de Monitoreo de Lanús, ubicado en Hipólito Yrigoyen 3863, Lanús Oeste.
Desde el Municipio detallaron que para el correcto funcionamiento de la aplicación, se realizan capacitaciones y en el caso de que sea necesario se asiste a los usuarios para que puedan descargarla en su dispositivo móvil.
El caso del jubilado de Lanús que murió infartado en una entradera
Norberto Veracruz, un jubilado de 75 años, murió de un infarto luego de que cuatro delincuentes ingresaran a robar a su casa de Lanús Oeste, en una entradera que duró una hora y en la que los ladrones escaparon con 300 dólares y algunas armas de fuego.
El hecho tuvo lugar en una vivienda ubicada en Mendoza. La esposa de la víctima, una mujer de 70 años, fue quien contó luego a la Policía que todo comenzó cuando ella escuchó un ruido en la puerta y al abrir, fue empujada hacia adentro por los asaltantes que tenían cubiertos sus rostros con pasamontañas.
Los ladrones redujeron tanto a ella como a su marido, los ataron y bajo amenazas verbales les exigieron la entrega de dinero, especialmente les pedían “dólares”, y cualquier objeto de valor. La víctima relató que luego de una hora en la que recorrieron y revolvieron todos los ambientes de la casa, los asaltantes escaparon con 300 dólares y algunas armas de fuego, cuya cantidad exacta y características la mujer no pudo precisar.
Cuando los ladrones se fueron de la casa, la mujer pudo desatarse y en el momento en el que ayudaba a su marido con las ataduras, el hombre se descompensó y cayó al piso. Al lugar llegó una ambulancia del SAME, cuyo personal médico constató que Veracruz había muerto de un aparente infarto del que no pudieron reanimarlo.