La emotiva historia de una pizzería icónica de Quilmes que cerró y fue recuperada por un vecino de la cuadra
Se trata de El Rosal, un emblemático local cercano al centro de la estación quilmeña que había cerrado sus puertas durante la pandemia de coronavirus. Cómo hizo una familia de la zona para reabrir el comercio fundado en 1956.
Los vecinos de Quilmes van a poder disfrutar nuevamente de un lugar mítico del distrito. Se trata de la Pizzería El Rosal, ubicada en la esquina de las calles Carlos Pellegrini y Aristóbulo del Valle en el barrio La Colonia, a tan solo metros de la estación de la ciudad cabecera del distrito.
El icónico establecimiento gastronómico funcionó ininterrumpidamente hasta el año 2020, momento en el que cerró sus puertas a raíz de la pandemia de coronavirus. Había sido una dura noticia para muchos de los vecinos del barrio que crecieron alrededor de la pizzería fundada el 18 de diciembre de 1956 y que siempre funcionó en esa esquina del distrito de zona sur.
Ahora, El Rosal fue recuperada por una familia de la misma cuadra que siempre tuvo un gran arraigo a la pizzería y ahora podrá continuar su legado. «El sabor de tus mejores recuerdos, juntadas con amigos, esquina y barrio. Van a poder disfrutar de la mejor pizza al molde como cuando venías con tus papás y abuelos», publicaron en las redes sociales del lugar.
Cómo recuperaron El Rosal, la icónica pizzería de Quilmes
Apenas vi el cartel de que se alquilaba no dudé un segundo», relató a Info Quilmes Marina, una de las nuevas socias del lugar, y agregó: «Lo estamos haciendo para devolverle la alegría y la familia al barrio. Es una esquina histórica y queremos que vuelva a ser el punto de encuentro para las familias. No queremos adueñarnos de la historia del lugar, sino que la idea es hacerles un homenaje a sus fundadores (Roberto, Juan y Manolo) por la historia que crearon acá».
Por otro lado, la mujer explicó que para toda su familia, la pizzería es una parte «importantísima» de su vida. «Mi abuelo fue el que nos metió en este mundo. Fue cliente toda la vida y nos dejó un cariño enorme por el lugar», detalló. En tanto, el abuelo de los nuevos propietarios de El Rosal falleció poco tiempo después de que el lugar cerrara en 2020.
Exactamente tres años después, mientras Marina se encontraba en la Plaza Aristóbulo del Valle, vio el cartel de alquiler en la esquina. «Él siempre hubiese querido que el Rosal siga abierto así que me mandé, llamé a la inmobiliaria y ya había varios interesados. Por suerte logré que me lo alquilen y después fue todo magia», explicó
«Estos dos meses de trabajo fueron hermosos e hizo que se vuelva a reunir la familia. Estamos todos juntos otra vez trabajando en este proyecto, que es un poco para la alegría del barrio y un poco en honor a nuestro abuelo que sentía a la pizzería como su casa». Además, indicó que el sector de mesas que se encontrará en la vereda llevará el nombre de «Angelito» en su memoria».
Esta semana, la intendenta de Quilmes, Mayra Mendoza, entregó la habilitación del lugar en un emotivo encuentro con los nuevos dueños de la pizzería.
Los vecinos que festejaron la vuelta de El Rosal
Con una gran cantidad de clientes históricos que lamentaban el cierre de la pizzería, la reapertura de El Rosal fue pura alegría para todos los vecinos del lugar que recordaron pizzas, anécdotas y noches en el histórico establecimiento.
Ya estoy recordando tantas noches en esas veredas con los aromas de las pizzas y de las cervezas servidas en la mesa con la mezcla del murmullo y el pasar de autos y colectivos… ¡Cuántos recuerdos! comentó Martín, un cliente asiduo del lugar.
Todos los clientes ya pueden volver a disfrutar de la pizza al molde de El Rosa con moscato y fainá, las mesas en las calles y hasta la nueva fachada, que aunque respetó la original terminó por darle un nuevo encanto a la pizzería.
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