Arrancó el juicio en contra de Néstor Ortigoza: de qué lo acusan y qué pena podría recibir
El futbolista emblema de San Lorenzo declaró en los Tribunales de Morón por un hecho que tuvo lugar en 2015. La semana que viene llegará el turno de los alegatos y de la definición de una posible sanción para el jugador.
Néstor Ortigoza, jugador emblema de San Lorenzo, comenzó a ser juzgado en los Tribunales de Morón en el marco de una investigación en la que está acusado por amenazas contra Mauricio Argañaraz, vecino de Ituzaingó y ex encargado del área de Seguridad del club de Boedo. El hecho por el que se lo imputa habría ocurrido a mediados del año 2015.
El futbolista declaró en la primera de las audiencias, que tuvo lugar este lunes, y luego se llevó a cabo una segunda jornada este martes en la que participaron distintos testigos, antes de pasar a un cuarto intermedio hasta la próxima semana, tiempo en que se desarrollarán los alegatos.
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Aunque, previamente Antonio Mele, el juez a cargo del debate, deberá decidir sobre el planteo de la defensa del volante del «Ciclón» que adujo que la acción penal está prescripta. El fiscal del caso que se desarrolla en el Juzgado Correccional N° 2 de Morón es Pablo Galarza.
Durante su alocución, Ortigoza rechazó haber amenazado a Argañaraz, aunque sí aceptó que fue hasta la casa de quien lo acusa para reclamarle que le devolviera el dinero de unas patentes de su vehículo que le había mandado a pagar.
Uno de los puntos que también se deben dilucidar en el juicio es si el futbolista fue estafado o no por el denunciante y si eso derivó en las amenazas en donde, según consta en la causa, hasta se habría dado una intimidación con un arma de fuego.
De acuerdo con lo que relató el jugador de San Lorenzo, cuando él se puso a averiguar la situación dominial de su rodado, que recibió como respuesta que tenía una importante deuda económica por
obligaciones impagas. Es decir, el declara que dio la plata a Argañaraz, pero que el ex empleado de San Lorenzo nunca pagó.
La declaración de Néstor Ortigoza en el Juzgado de Morón
“Una gestora me llamó y me dijo que Argañaraz le ofreció dos lucas (sic) para que te diga que los tickets de ARBA son buenos. Ahí fui a la casa a pedirle que me devuelva los 20 mil pesos, pero lo hice cuando no tuve ninguna duda de que me había estafado”, fue la declaración del futbolista, según informó Primer Plano Online, medio que estuvo presente en el Juzgado de Morón.
También declaró el denunciante y dos testigos aportados por la defensa, que está en manos del
abogado Gustavo Spicuglia. El ex trabajador del club de Boedo ratificó sus dichos que dieron origen a la causa y afirmó que Ortigoza lo amenazó.
“Si mañana no está la guita viene este guachín y te mete un tiro”, le dijo, y luego llegaron los audios
del futbolista con frases intimidatorias que, según sus palabras, lo hicieron entrar en pánico. “A mí me traés la plata como sea porque yo no soy un gil. Conozco tu casa y todo. Hoy te caí; la próxima vez va a haber cachengue”, fue la advertencia que habría manifestado el futbolista.
La jornada de este martes fue clave para el destino del juicio porque declaró Diego Delledonne, el actual gerente de fútbol de San Lorenzo, quien puso en duda la versión de Argañaraz, a quien calificó de “mitómano” y hasta reconoció que no le creyó “cuando dijo que se le había muerto el padre”. Además, explicó que el ex empleado había tenido problemas con varios futbolistas.
Además, antes de pasar a los alegatos, los abogados Carlos Scarabel y Fernando Arias Caamaño, defensores de Ortigoza, pidieron que se revise la calificación de la causa, que llegó a debate con la carátula de «amenazas coactivas agravadas por el uso de armas».
“Si hubiera algún delito es el de coacción simple, y si esto fue en 2015 ya prescribió la acción penal. Se acreditó que no hubo armas y está en duda, porque no hay pruebas, la figura de amenazas, así que eso es lo que tiene que resolver el juez”, explicaron los defensores en diálogo con el mismo medio.
La ley indica que por este delito a Ortigoza le podría caber la pena de 3 a 6 años de prisión. En caso de que reciba una condena de 3 años y un día, el futbolista podría terminar en prisión. «La querella asegura que tiene una probation en otra causa, con lo que de ser declarado culpable, debería ser una pena de cumplimiento efectivo. Veremos qué pasa en el juicio. Y cual es la defensa del futbolista», aclaró el periodista Mauro Szeta a través de una publicación en su cuenta de Twitter.