Doble crimen de Vicente López: la dramática carta que dejó la amante de Martín Del Río cuando intentó suicidarse
Paola es una mujer que en la causa se vincula sentimentalmente con el principal acusado del asesinato de sus padres en su casa de Vicente López. Antes de tomar pastillas, les escribió un texto a sus hijos de puño y letra.
El hijo de la pareja de jubilados asesinados está detenido en la sede de la DDI de San Isidro.
La investigación por el doble crimen de Vicente López tuvo un giro radical en los últimos días, cuando la Justicia liberó a la empleada doméstica acusada de asesinar a José Enrique Del Río (74) y María Mercedes Alonso (72) en su casa de la calle Melo al 1100 y detuvo al hijo de la pareja, Martín Del Río (47).
Alrededor del nuevo acusado empezaron a surgir hechos y pistas que, de acuerdo a los investigadores, llevan a reforzar la hipótesis del presunto doble parricidio. Algunas fueron aportadas por una mujer, de nombre Paola, a la que se indica como la amante de Martín Del Río. Su declaración testimonial, pero sobre todo una carta que les dejó a sus hijos cuando intentó suicidarse, resultaron relevantes en el curso de la causa.
Su aparición incluso fue clave para que María «Nina» Aquino (63), la mujer que llevaba 12 años realizando labores domésticas para la pareja asesinada, quedara en libertad (pero todavía bajo investigación) después de haber estado dos semanas detenida. La empleada había encontrado los cuerpos de sus empleadores dentro de su auto Mercedes Benz E350, en el garaje del domicilio; y como se detectó un robo millonario, se creía que ella podría haber sido cómplice de una banda delictiva.
Fue en ese momento también cuando las sospechas viraron hacia el hijo de las víctimas, que fue detenido el miércoles en la noche cuando estaba por entrar a su casa en el barrio privado Nordelta, en Tigre. En las tres ocasiones en que le había tocado declarar como testigo, Martín Del Río intentó incriminar a Nina Aquino. Sin embargo, una declaración de su hermano mayor, Diego, sumada a contradicciones propias y la carta de su presunta amante, dejaron al hijo menor de los jubilados asesinados en una posición incómoda. Además, luego fue descubierto en imágenes de cámaras de seguridad cerca de la casa de sus padres en la misma hora en que se cometió el doble crimen.
La carta que cambió la investigación del crimen de Vicente López
Paola, una mujer que está señalada como la presunta amante de Martín del Río, fue quien lo incriminó al identificarlo como quien salía de la casa de sus padres en los registros de las cámaras de seguridad. Se supo que ella quiso suicidarse este jueves, tras el allanamiento que sufrió la noche previa en el marco del caso y luego de aportar su declaración ante la Justicia.
De acuerdo al expediente, le dijo a su hija que fuera a comprarle unas pastillas ansiolíticas a la farmacia e ingirió algunas. La menor no pudo hacer el mandado porque en el comercio no las vendían sin receta, pero igualmente notó que su madre estaba «ida y con la presión baja» y llamó a la Policía. La terminaron llevando de urgencia a un centro de salud de Vicente López, donde se confirmó que había tomado otras pastillas que tenía en su casa. Luego, la mujer comentó que «sólo quería dormir».
Con todo, en su domicilio encontraron una carta que ella dejó y que reforzó las sospechas sobre el actual detenido. «Necesito descansar. Me siento devastada con lo que pasó. Lamento profundamente no haberme dado cuenta a tiempo de la persona que es Martín realmente. Me sirve que ustedes, que son lo más importante que tengo en la vida, hayan quedado excluidos de este escándalo», decía un pasaje del escrito de puño y letra.
La nota también agregaba: «Aunque siempre me esforcé por ser una buena madre, me doy cuenta de que les fallé. Primero eligiendo un hombre que como padre nunca será ni existe; después eligiéndolo a Martín, quien me deslumbró (…) y terminó siendo un psicópata. No quiero que sientan vergüenza de mí, por eso lo mejor para ustedes es que sigan adelante sin mí».
Finalmente, el texto cerraba: «Les pido por favor que estén más unidos que nunca. Por favor siempre apóyense los unos a los otros. Les pido perdón por no tener más fuerzas. Los amo profundamente, son el mejor regalo que la vida me dio, y me siento muy orgullosa de los cuatro. Siempre voy a estar acompañándolos, sean felices. Mamá».
La causa ahora sigue investigada por un equipo de fiscales compuesto por Martín Gómez, Alejandro Musso y Marcela Semería. Martín del Río, que declaró que es inocente y que él no es el hombre que se ve en las cámaras de seguridad, continuará detenido por decisión del Juzgado de Garantías N°1 de San Isidro, a cargo de Ricardo Costa. Aún se intenta determinar el móvil del doble crimen, cuya principal hipótesis es que se trató de un homicidio «criminis causa», para encubrir otro delito, que en este caso sería el robo de dinero, oro y joyas.
