El colegio denunciado por discriminación en Pilar cierra definitivamente sus puertas: qué explicaron sus dueños
Se trata del Colegio Magno, que había decidido no renovar la matrícula de ocho chicos con discapacidad y fue obligado a reincorporarlos. En un comunicado, avisó que luego de terminado el ciclo lectivo 2022 dejará de funcionar.
Después de ser denunciado por discriminación, el Colegio Magno de Pilar anunció que cerrará sus puertas. Había quedado en el medio de la polémica cuando semanas atrás les informó a las familias de ocho chicos que no iban a renovarles las matrículas porque, de acuerdo a lo que los padres dijeron haber recibido como argumentación, les «bajaban la vara académica».
La controversia había quedado expuesta tras la denuncias realizadas por familiares de los chicos afectados, todos con algún grado de discapacidad. Ellos habían puesto expresiones cuestionables en boca del dueño de la institución, Santiago Boix Mansilla, en una reciente reunión.
Pablo Basz es papá de Emanuel, un nene de 10 años con síndrome de Hunter, enfermedad que produce discapacidades físicas y mentales), había revelado que entre los argumentos esgrimidos por el directivo aparecieron que «hijos como el suyo bajan la vara académica», que «ninguna escuela los hubiese aceptado», o que «el día de mañana ninguna empresa iba a contratar a mi hijo».
Según los mismos padres, Boix Mansilla comparó la educación de sus hijos con el alquiler de una vivienda y que, como propietario, podía «decidir año a año si renueva o no el contrato con el inquilino».
Golpeadas emocionalmente, las familias iniciaron una denuncia contra la institución en distintas áreas estatales como el Instituto Nacional contra la Discriminación, Xenofobia y Racismo (INADI), la Defensoría del Pueblo de la Provincia de Buenos Aires y la Secretaría de Educación de Pilar. Finalmente, una delegación del Ministerio de Educación bonaerense se presentó en el establecimiento y ratificó que la decisión incumple la Ley de Educación Provincial 13.688 y lo intimó a volver a admitir a los chicos.
Cierra el Colegio Magno de Pilar y expuso sus razones
Pese a todo, en las últimas horas la escuela difundió un comunicado en el que avisó que una vez que culmine el ciclo lectivo 2022 no volverá a abrir sus puertas. En el documento, manifestó que la decisión es «muy dolorosa» y concluyó que el motivo «determinante de la solicitud de baja de la matrícula» fue «la inviabilidad de este proyecto frente a la reiterada interferencia de las autoridades de la Dirección General de Cultura y Educación».
Y si bien agregaron haber siempre respetado las instrucciones de la Provincia, sentenciaron: «Nunca hemos aceptado que se nos impida hacer lo que la ley no prohíbe ni se nos obligue a hacer lo que la ley no manda. Como intentamos trasladar a nuestra propuesta educativa esa firmeza en la defensa de todos los ámbitos de libertad, mal podríamos, nosotros mismos, dejar de ser consecuentes con esta convicción».
Argumentaron que «la comunicación adjunta fue enviada a la Dirección General de Cultura y Educación en respuesta al inicio de un sumario de investigación por tres razones: la modalidad de dictado de clases presenciales durante el período 2021, cuando el colegio había presentado un plan particular que a nuestro juicio permitía el cumplimiento del protocolo establecido por la normativa vigente en ese momento, y beneficiaba a los alumnos y sus familias».
«Las mismas autoridades que activaron el sumario por el supuesto incumplimiento de una pauta genérica, jamás se tomaron el trabajo de responder la propuesta de un plan específico, ajustado a nuestra realidad y la de nuestros alumnos. También por la denuncia de falta de rampa en un escenario recientemente adquirido por el colegio; y por la no matriculación de 8 niños, dando por hecho que todos ellos tenían una discapacidad declarada, y presumiendo intención discriminatoria», ampliaron
Justamente, respecto a la polémica que se generó por la exclusión de los chicos con discapacidad, la institución del norte del Conurbano describió: «Nunca hubo ninguna intención, ni ningún acto de discriminación. Las decisiones de no rematriculación de los ocho niños fueron evaluadas y adoptadas en función de la conveniencia de su continuidad en la Institución, tanto para los propios alumnos como para el resto de sus compañeros, teniendo en cuenta no solo la integridad psíquica sino también física de ellos y de sus compañeros».
En esa línea, continuó: «Como se habló de ‘bajar o subir varas’, resulta importante aclarar que jamás un niño con un PPI (Proyecto Pedagógico Individual) especial diagramado de acuerdo con sus capacidades podría disminuir o aumentar la vara de sus compañeros por la simple razón de tratarse de varas distintas. En ese sentido, al tratarse de grupos con exigencias y evaluaciones diferentes unos nunca podrían alterar el aprendizaje de otros. La existencia de algún audio maliciosamente editado nunca debería haber producido mella en la historia que el colegio fue construyendo a lo largo de todos sus años de existencia».
El documento remarcó el sufrimiento de las autoridades por las cartas de repudio recibidas hasta de entes oficiales por conductas discriminatorias «que nunca hemos tenido». Y aclaró: «Hoy vemos con pesar que la sumatoria de las acciones de todos estos entes configura una imagen que en nada representa la esencia de Magno College».
Por último, apuntó contra la Dirección General de Cultura y Educación por «no querer acompañar nuestro plan» y la acusó de «amenazar con causas penales al personal por haber presentado un plan de doble escolaridad en el 2021 (cuando en la Ciudad de Buenos Aires estaba autorizado) dispuso ahora una medida cautelar que avasalla la decisión del Colegio, y en sus fundamentos refiere a la conveniencia de impedir nuevas matriculaciones».
Y cerró: «Resulta más que claro que el Magno College no es bienvenido en el sistema educativo de la Provincia de Buenos Aires, y es por ello y no por ninguna otra razón que consideramos inviable su continuidad».