Nueva autopsia de Agustina Casco, la policía que murió en la escuela Juan Vucetich: por qué la familia sospecha de un homicidio
Tenía 21 años y estuvo internada en una clínica de Merlo por fuertes dolores después de un día de prácticas de esposamiento en la institución de Berazategui. Qué arrojaron los nuevos resultados que tiene la Justicia.
Revelaciones en el caso Agustina Casco: qué dice la última autopsia de la investigación.
El dolor en el entorno de Agustina Casco no cesa. Es que la investigación por la muerte de la oficial de 21 años que falleció en el curso de ingreso de la Escuela de Policía Juan Vucetich sigue sin resolverse, amén de que hay nuevas revelaciones en la causa que hacen que la familia crea que el hecho se trató de un homicidio.
Las nuevas hipótesis surgieron a raíz de una nueva autopsia solicitada por la familia de la víctima, que indicó que Casco falleció “por un mecanismo no violento y a consecuencia final de un paro cardio-respiratorio no traumático”. No obstante, los allegados de la joven de 21 años aseguran que todo empezó con un golpe que la mujer recibió durante el entrenamiento.
La familia sostiene dicha hipótesis en el hecho de que, tras las primeras pericias, corroboraron que Casco tenía cuatro litros de sangre acumulados en la cavidad abdominal, no siendo atendida por personal médico tras el golpe que habría desencadenado la tragedia.
De todas maneras, el nuevo informe publicado no es final y advirtieron que quedó “ad referendum” de los resultados de algunas pericias que se realizaron en la primera autopsia. Ese primer estudio indicaba que Agustina había fallecido por “un paro cardio-respiratorio no traumático por un shock hipovolémico por un quiste en el ovario que provocó una hemorragia”.
Qué dice la familia de Agustina Casco contra la Justicia
Otra de las controversias de la causa tiene que ver con el trámite de la investigación en la Unidad Funcional de Instrucción Nº4 del Departamento Judicial de Morón. Es que Es que Paula Salevsky, titular de la fiscalía en cuestión, decidió declararse incompetente en razón de territorio y la causa va a volver al Departamento Judicial de Quilmes.
“La fiscal entiende que el hecho ocurrió en Quilmes y mandó la investigación allá. Si no creyera que el hecho existió, tramitaría la causa en Morón porque ella murió en Merlo y no habría delito o hubiera imputado al personal de la clínica”, explicó ante TN Rodrigo Tripolone, abogado de la familia de Casco.
En ese sentido, desde la familia de la joven policía entienden que si la muerte de Agostina hubiera sido en condiciones normales la causa se continuaría instruyendo en la fiscalía de Morón, ya que -en caso de que hubieran tenido alguna responsabilidad- los médicos que atendieron a la joven eran de una clínica de Merlo, partido este último que corresponde al Departamento Judicial de Morón.
Asimismo, apuntan contra los instructores Carlos Daniel Perín y Melina Alejandra Nieva Ribanera por haber incumplido el protocolo aplicado al caso, ya que la joven no fue atendida inmediatamente por el Cuerpo Médico a pesar de la lesión que recibió.
Ahora, la causa debería tramitar en Quilmes. Lo que teme tanto la familia de Agostina como su defensa es que se decline la competencia nuevamente, lo que implicaría que deba resolver el Tribunal de Casación y se siga demorando la investigación. «Esto lo único que hace es patear la pelota para adelante. Están buscando que se olvide. Eso es lo que buscan, impunidad, y el tiempo siempre logra impunidad”, remarcaron.
Cómo fue la muerte de Agustina Casco
Con sólo 21 años, Agustina Casco era alumna del curso de ingreso de sub escalafón comando del Área Pereyra de la Escuela de Policía Juan Vucetich y permanecía allí en la modalidad de internado. El pasado viernes 17 de noviembre, en su día de franco, la joven había dejado la institución cerca de las 18 en dirección a su domicilio, ubicado en el partido de Ituzaingó, en el oeste bonaerense.
La madre de la joven detalló que, al llegar a su casa, Agustina le contó que había sufrido un fuerte golpe en la cintura y en la zona del abdomen durante las prácticas de esposamiento que habían realizado esa semana. Los días pasaron y el dolor en el área comprometida aumentaban. Tanto fue así, que el domingo 19 decidió llamar a un médico y fue trasladada al Hospital de Ituzaingó.
Una vez en el centro de salud, la cadete fue derivada a la Clínica Provincial de Merlo gracias a la obra social del personal policial. Allí fue ingresada de urgencia a la Unidad de Terapia Intensiva, con un diagnóstico de “abdomen agudo, anemia aguda” y la existencia de “líquido en la cavidad abdominal”, según constataron fuentes del caso.
A raíz de este cuadro, el equipo de salud que la atendió decidió practicarle una cirugía abierta de abdomen (conocida como “laparotomía exploratoria”) y, de este modo, se constató un “shock hipovolémico con lóbulo ovárico hemorrágico; afección de origen clínico, no traumático”, de acuerdo a lo informado en el parte médico.
Cabe señalar que, al principio, los médicos que la atendieron en el Hospital de Merlo creyeron que se trataba de una apendicitis aguda, pero finalmente la terminaron operando “por un folículo ovárico hemorrágico”, según señalaron. Luego de cuatro días internada, la joven cadete de la escuela Juan Vucetich falleció tras sufrir tres paros consecutivos.
Hacé tu comentario