Músico y fana de Boca: quién era Leandro Isak, el joven de Lomas de Zamora asesinado cuando fue a comprar una moto en Santa Fe
Tenía 21 años. Había viajado a la capital santafesina para cerrar una operación que había iniciado en las redes sociales. Alli fue emboscado y le dieron un tiro en la cabeza. Pasó varias horas internado con muerte cerebral.
Leandro Lautaro Isak, joven de 21 años de Lomas de Zamora, no resistió más. Había sido baleado en la cabeza el último domingo cuando se disponía a comprar una moto en la ciudad de Santa Fe y el daño de sus graves heridas eran irreversibles. Internado en el hospital Cullen de la capital provincial, terminó falleciendo en las últimas horas.
Leonardo, su padre, había comentado este lunes que el chico se encontraba en terapia intensiva y que el panorama era desolador: tenía muerte cerebral. «Los médicos me dijeron que no hay mucho para hacer y le destrozaron la cabeza. No podemos hacer otra cosa que esperar», había manifestado a la prensa.
Lo cierto es que su hermana, Florencia, dio a conocer la triste noticia en las redes sociales: «Mi hermano falleció». Y luego, publicó un video junto a él con un conmovedor mensaje: «Por Dios, hermanito, cómo voy a extrañar reírme así con vos. Eso eras, pura risa para todo. Volá alto amor de la hermana, brillá e iluminanos para poder soportar semejante dolor».
Leandro, oriundo de la localidad de Villa Fiorito, en el sur del Conurbano, era fanático de Boca y componía y cantaba canciones de rap. De hecho, su padre contó que esta semana debía llevarlo a SADAIC a registrar los temas que había creado. Tenía intenciones de comprarse una moto Honda Tornado 250cc que había pactado previamente con un hombre por Facebook. «Hace como 15 días que quería ir, le insistíamos con la mamá que no lo hiciera. El viaje se pospuso hasta que, lamentablemente, se concretó», lamentó el hombre.
Cómo fue el brutal ataque al joven de Lomas de Zamora
El sangriento episodio tuvo lugar el domingo, alrededor de las 16, en calle Larrea al 1600, en el barrio Coronel Dorrego de la ciudad de Santa Fe. Leandro Isak, que había juntado con esfuerzo el dinero para cerrar la operación y llevaba una consola de videojuegos Playstation como parte de pago, llegó al lugar en un Chevrolet Astra en compañía de un hermano y una pareja amiga.
Lorenzo, hermano y testigo del ataque, reconstruyó el terrible momento: «Cuando nos citaron yo le dije a Leandro que pasemos para ver más o menos el panorama. Él se bajó, reconoció a quienes habían negociado con él y empezó a charlar. «Después de hablar un rato, mi hermano me dijo que querían ir a probar la PlayStation a una casa. Yo ahí le dije que al auto no iban a subir. Tras ese cruce de palabras, él gritó: ‘Corran’. Y yo aceleré. Mi hermano le sacó como media cuadra y, cuando escucho los disparos, veo que cae desplomado por el espejo retrovisor», reveló. Y cuando quiso ir a ayudarlo, comenzaron a dispararle a él también.
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Personal de la Agencia de Investigación Criminal inspeccionó el auto con el que los vecinos de Lomas de Zamora habían viajado hacia Santa Fe y se constató que tenía dos orificios de bala en el alerón trasero. Además, se incautó un teléfono celular que sería propiedad de la víctima.
El sospechoso del ataque fue apresado mientras intentaba ingresar en el pasillo lateral de una vivienda de ese mismo barrio, luego de que los vecinos lo expusieran ante la Policía y quedó implicado por el delito de «tentativa de homicidio».