Drama para 6 ancianos en Ituzaingó a raíz del incendio de un geriátrico clandestino

Un barrio de la ciudad de Ituzaingó fue escenario de dos dramas concurrentes, con el incendio desatado en una vivienda que funcionaba como un geriátrico clandestino, por el que no se registraron víctimas fatales pero una mujer debió ser internada por las consecuencias de haber inhalado el humo que se generó en el inmueble.

El siniestro se generó poco antes de las seis de la mañana de este viernes en un domicilio del barrio San Alberto. Se trata de una propiedad con parque en la entrada y la construcción en el fondo, sobre la que los vecinos del lugar tenían conocimiento de que allí funcionaba un hogar de ancianos trucho desde hacía más de tres años.

En total, seis adultos mayores de entre 67 y 92 años debieron ser hospitalizados cuando llegó la asistencia de Bomberos Voluntarios y el sistema de emergencia médica del distrito del oeste del Gran Buenos Aires al domicilio de la calle Zárate 2575, en el barrio San Alberto. Una mujer, la menor de los damnificados, se encontraba internada con asistencia respiratoria.

Ituzaingó, los rastros del geriátrico trucho

Cuando las autoridades policiales de la Comisaría 2ª de Ituzaingó llegaron al lugar, se encontraron con que dentro del lugar funcionaba un geriátrico clandestino. Trascendió que se lo conocía como Geriátrico Nazaret.

Del miedo a la emoción: con 58 años y tras dos meses en estado crítico, logró vencer al Covid-19

La encargada del lugar, identificada como Leila Andrea Súarez, de 32 años y con domicilio en Morón, precisó que en sus instalaciones se encontraban seis internos. Todos fueron trasladados al Hospital Bicentenario para ser asistidos. Según trascendió, los abuelos no tenían quemaduras en sus cuerpos; únicamente habían inhalado monóxido de carbono.

En el siniestro intervino la Fiscalía Descentralizada Nº 2 de Ituzaingó. Al mismo tiempo, personal municipal estuvo en el lugar labrando actas de infracción.

Las causas del incendio están siendo investigadas, pero se sospecha que el origen de la combustión pudo haber sido una estufa eléctrica. Dos dotaciones de los bomberos de Ituzaingó intervinieron para rescatar a los adultos mayores, extinguir las llamas y reducir los daños materiales en el inmueble y en viviendas vecinas. Hasta que llegó el auxilio, fueron los propios vecinos los que intentaron sin éxito sofocar el fuego con baldes.

“Esta es una zona tranquila. A las 5.45 escuchamos muchos gritos de mujeres. Nos encontramos con gente que estaba tirando agua en la casa y una chica que estaba pidiendo ayuda a los gritos para que los vecinos se acercaran a ayudar. Eran siete ancianos. Nos dio mucha tristeza. Algunos no podían ni caminar”, contó Rubén, vecino que vive frente al establecimiento clandestino.

Covid-19: comienzan a vacunar a personas de riesgo que tengan entre 18 y 40 años

En declaraciones a Canal 9, sostuvo además que en el barrio se sabía de la existencia de un hogar de ancianos que funcionaba en forma irregular: “Acá sabíamos que había un geriátrico. Llevaba tres años funcionando. Todos creíamos que algo iba a pasar en algún momento”.

«A las 6.17 horas se recibió el llamado cuando había tres componentes de guardia y salieron al lugar del siniestro», informó Ricardo Demonte, bombero del cuartel de Ituzaingó, al medio local Viví el Oeste. «El Incendio fue sofocado rápidamente y no pasó mayores gracias a la intervención relámpago», agregó el socorrista.

La proliferación de geriátricos clandestinos, en pleno auge de la pandemia por el Covid-19, surge porque, al no tener que afrontar los costos de estar en regla, pueden ofrecer el servicio a precios mucho más accesibles. Pero detrás de ello se esconde un enorme riesgo que pone en peligro la vida de muchos adultos mayores.

En tal sentido, a principios de mayo se clausuró un hogar de ancianos que funcionaba en forma ilegal en la localidad de Ezpeleta, en Quilmes, donde se encontraron adultos mayores viviendo en condiciones tan precarias como las que tenían los abuelos que sufrieron el drama en Ituzaingó.