El plan macabro para descuartizar a un obrero en Pontevedra: tres detenidos y se busca saber qué rol tuvo cada uno
La Policía bonaerense atrapó este miércoles a un hombre de 34 años que, se cree, habría actuado junto a las dos mujeres, tía y sobrina, aparentemente implicadas en el brutal homicidio de Harold Canelo Crespín.
Un hombre de 34 años fue atrapado por la Policía este miércoles tras haber sido acusado de participar del crimen de Harold Canelo Crespín. Se cree que él y Norma (41) y Eliana González (26), las dos mujeres ya detenidas, asesinaron y descuartizaron al ciudadano peruano con el aparente propósito de quedarse con la vivienda que el obrero de la construcción tenía en Pontevedra, partido de Merlo.
El operativo para dar con el sospechoso identificado como Víctor David Luján, alías «Daviducho», fue llevado adelante por efectivos de la comisaría 5ta. de Merlo y de la Delegación de Investigaciones de Morón en una vivienda situado en Charlones y Soldado Molinas, en la localidad de Villa Magdalena, también partido de Merlo.
El nuevo detenido fue capturado cuando llegaba a su propiedad por orden del titular de la Unidad Funcional de Instrucción 6 de Morón, Sergio Dileo, quien lo indagará como cómplice del brutal homicidio que fue descubierto el jueves pasado, cuando chicos que jugaban al fútbol en un descampado encontraron parte del cuerpo en una bolsa.
El fiscal busca determinar los roles que habrían desempeñado Luján y las dos mujeres ya detenidas, una de ellas pareja de la víctima, en el brutal asesinato del vecino de Pontevedra. Sobre el móvil del crimen, los investigadores creen que los agresores buscaban quedarse con la casa de Canelo Crespín.
Las mujeres detenidas, que son tía y sobrina, ya estuvieron frente a frente con el fiscal. Norma, la mayor de ellas y tía de la otra acusada, dijo que «es inocente» y que «no sabía nada de lo que había hecho su sobrina», a la vez que aseguró que «solo la trasladó a varios lugares». En tanto, Eliana, la otra detenida, se negó a responder las consultas de Dileo.
Ambas mujeres quedaron detenidas e imputadas en el homicidio de Canelo Crespín, cuyo cuerpo con las extremidades amputadas fue encontrado la tarde del jueves último en un descampado, luego de ser atacado en su vivienda de la calle Espejo 1245 de Pontevedra.
Cómo fue el brutal crimen del obrero de Pontevedra
Del resultado de la autopsia surgió que el hombre fue asesinado de, al menos, tres puñaladas en el cuello y que presentaba múltiples heridas de arma blanca en la cabeza, tórax y espalda, además de haber recibido distintos golpes.
El médico legista que revisó el cuerpo en el lugar del hallazgo había constatado previamente que tenía hundimiento de cráneo a raíz de un posible golpe con un objeto contundente, además de contar con las extremidades amputadas, las superiores a la altura de los codos y las inferiores, por debajo de las rodillas.
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Las fuentes consultadas agregaron que Canelo Crespín también estaba amordazado con cinta de embalar en la boca. El hallazgo del cuerpo se produjo cuando unos niños que jugaban a la pelota en un terreno baldío ubicado en Espejo, cercano al cruce con Victorino de la Plaza, en Pontevedra, lograron divisar el contenido de una bolsa negra semiabierta, por lo que dieron aviso a un adulto, quien constató que se trataba de un cadáver y llamó al 911.
También se halló en el lugar un bolso deportivo negro que contenía dos cuchillos, una hoja de sierra blanca, una frazada verde estampada, una sábana blanca con vivos rojos, una camisa a rayas y un jean con cinto negro, todas las prendas con manchas de sangre.
Al inicio de la investigación, y cuando todavía no se sabía quién era la víctima, los pesquisas pensaron que podía tratarse de un crimen mafioso o un ajuste de cuentas ligado al narcotráfico. El torso encontrado no tenía ningún tipo de identificación, por lo que buscaron en la bolsa si había algún DNI, tarjeta o algo por el estilo, pero no se encontró nada.
Canelo Crespín había llegado de Perú hacía casi 10 años y trabajaba como obrero de la construcción. No tenía familiares en el país y, según se detalló, había comenzado una relación amorosa con la menor de las detenidas.