Clausuraron un cuartel de bomberos trucho que funcionaba desde 2015 en Barracas

Clausuraron un cuartel de bomberos que funcionaba de manera ilegal en Barracas, Capital Federal, y cuatro personas fueron condenadas este martes a un año y medio de prisión en suspenso por ser los responsables del lugar. Tomando como base el cartel de la entrada a la sede, el destacamento fue fundado el 29 de junio de 2015.

Según se dio a conocer, la investigación se inició a partir de una denuncia de la Dirección General de Defensa Civil advirtiendo la existencia de una organización de personas que bajo la denominación de «Bomberos Voluntarios Metropolitanos de Barracas» operaba sin ningún tipo de autorización ni control gubernamental.

Alberto Fernández se reunió con intendentes del GBA para definir estrategias tras las PASO

Tras esa presentación, personal del Departamento de Narcocriminalidad de la Policía de la Ciudad realizó un allanamiento en el inmueble ubicado en Suárez 2500 y detuvo a cuatro personas que firmaron un «acuerdo de avenimiento» mediante el que se las condenó a un año y medio de prisión en suspenso. Esa sentencia fue homologada por el Juzgado Penal Contravencional y de Faltas, a cargo de Rodolfo Ariza Clérici.

Del operativo participaron representantes de la Dirección General de Defensa Civil, ratificando que el cuartel no se encontraba autorizado a funcionar según la Ley 1.240. También estuvieron integrantes de la Dirección General de Guardia de Auxilio y Emergencias para analizar las estructuras. Y agentes de la Oficina de Siniestros del Cuerpo de Bomberos de la Ciudad y del Cuerpo de Investigaciones Judiciales del Ministerio Público Fiscal.

Además, operarios de Edesur constataron dos fases ilegales que ingresaban a la propiedad sin un medidor. Y la Dirección General de Fiscalización y Control (DGFyC) intimó a los cuatro responsables por falta de habilitación en los registros del Gobierno de la Ciudad y AySA verificó que el llenado de autobombas se realizaba desde una toma hidrante de la vereda, precisó un comunicado del Ministerio de Seguridad porteño.

También se hicieron presentes funcionarios del Ente Nacional de Comunicaciones (ENACOM), que corroboraron la existencia de una antena de comunicaciones y un despliegue con 8 dispositivos y una autobomba con transmisión interna que funcionaban en forma ilegal.

Martiniano Molina explicó por que todavía no recibió la vacuna contra el Covid-19

A raíz de las numerosas irregularidades detectadas, como conexiones clandestinas de electricidad y agua, cableados aéreos antirreglamentarios, cableados expuestos, falta de limitación, existencia de materiales combustibles, se pudo establecer la precariedad en las condiciones generales del cuartel y la falta de autorización para funcionar como tal.

Con todos los resultados, la fiscalía dispuso la detención de cuatro personas responsables por infracción al Artículo 247 del Código Penal, por Usurpación de Títulos y Honores, usurpación del predio, falta de habilitación y, al jefe de bomberos, además, por desobediencia, según detalló el Ministerio Público Fiscal de la Ciudad.

“El inquilino del predio explicó que la parte en donde funcionaba ilegalmente el cuartel de bomberos había sido usurpado tiempo atrás por esta misma organización”, dijeron fuentes del caso.

La pelea con los bomberos «de verdad»

El caso saltó a la luz luego de una pelea entre los condenados y efectivos de bomberos de La Boca durante el trabajo para sofocar un incendio en una casa de Barracas que ocurrió en junio. “Esa vez, a estos supuestos bomberos se les indicó que se fueran del lugar porque estaban obstruyendo la labor de los bomberos de la Ciudad. Pero haciendo caso omiso se pusieron a trabajar igual en el incendio”, contó Alberto Carita, director general de Defensa Civil.

Luego, el funcionario continuó explicando en diálogo con TN: “Al enterarme, les mandé una carta documento y les notifiqué que si quieren ser bomberos pueden presentarme la documentación que corresponde y se analizará su autorización”.

Tragedia en Haedo: tiene 8 años y llamó al 911 para avisar que sus padres murieron electrocutados

Sin embargo, al poco tiempo los condenados volvieron a presentarse en un incendio y otra vez tuvieron un conflicto con los bomberos que ya estaban trabajando en el lugar. “No quedó más que hacer una denuncia”, dijo Carita.

El predio donde funcionaba el cuartel tiene un cartel donde comunica que “es de Ferrosur S.A. y se llama ‘Juan Bautista Imperiale’”. También en el cartel, figura “como un Centro de Tradiciones Criollas y Equinoterapias (en formación)”.