Cuáles son las pruebas que evaluó la Justicia para procesar a Fernando Espinoza en la causa por abuso sexual
El escrito fue firmado por la jueza María Galletti, quien lleva adelante la investigación derivada de la denuncia de Melody Rakauskas contra el jefe comunal, quien dijo que todo se trata de «una mentira armada».
El intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, enfrenta un proceso por abuso sexual simple.
El procesamiento por abuso sexual simple que la jueza María Galletti lleva adelante contra el intendente de La Matanza, Fernando Espinoza, cuenta con muchas pruebas que están siendo evaluadas por la Justicia. La magistrada también dispuso la prohibición de contacto entre Espinoza y la denunciante, Melody Rakauskas, quien realizó la denuncia hace dos años.
De acuerdo a lo publicado por Infobae, que tuvo acceso a la resolución, se estableció que Espinoza es considerado «prima facie» responsable de los delitos de abuso sexual simple en concurso real con desobediencia, en calidad de autor y en perjuicio de Rakauskas. Además, el intendente continuará en libertad provisoria, ya que no se cumplen las condiciones restrictivas para su detención, aunque deberá mantenerse alejado de la denunciante y evitar todo tipo de contacto con él.
Todo ocurrió el 10 de mayo de 2021 en el departamento de la mujer. Poco tiempo antes había ingresado a trabajar a la secretaría privada de Espinoza tras la gestión de su novio de entonces, Gustavo Cilia, a su vez amigo de Espinoza. La mujer le contó que e intendente matancero Espinoza iba a cenar a su casa por cuestiones de trabajo, lo que le parecía extraño y la ponía incómoda. Él le contestaba que era normal porque el intendente era una persona conocida y no podía mostrarse en lugares públicos.
El relato en el expediente detalla un incidente en el cual Espinoza habría comenzado a besar los pechos de la víctima y a tocarla por encima de la ropa, mientras le decía: «Quédate tranquila, siempre te tuve ganas, va a estar todo bien«. Durante el forcejeo, Espinoza intentó bajarle los pantalones y le rompió la camisa, insistiendo en que le practicara sexo oral.
La víctima logró resistirse, y finalmente la situación terminó cuando Espinoza, frustrado por no poder bajarle el pantalón, se vistió y se retiró del lugar, diciendo: «Bueno listo, ya está, se terminó todo, me voy, ya está, no te preocupes».
«Luce más acertado y natural pensar que la damnificada padeció inesperadamente los tocamientos impúdicos sobre su cuerpo sin su consentimiento por parte de quien se trataba su jefe en ese entonces y de una persona pública», reza una frase incluida la resolución de la jueza, de 52 páginas.
El procesamiento -que está bajo revisión de la Cámara del Crimen– tiene algunos puntos centrales: las conclusiones de los peritos psicológicos que atendieron a la víctima, la ubicación de Espinoza en el lugar de los hechos, los audios que aportó Raskaukas y el posterior intento de Espinoza de que la mujer retire la denuncia.
No obstante, Raskaukas hizo la denuncia Oficina de Violencia Doméstica (OVD) de la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Allí, los especialistas calificaron su situación como de «alto riesgo». Sobre su relato, fueron concluyentes: «Tuvo un discurso claro y organizado, con un lenguaje acorde a su nivel de instrucción y contexto sociocultural de pertenencia, que impresionó lúcida durante la entrevista con actitud activa y colaborativa, y que relató los hechos padecidos con una actitud de temor y cierta ansiedad que se visibilizó en su hablar»,
Melody relató que, desde el momento que sufrió el abuso, comenzó a enviar audios cada vez que iba a la Municipalidad “por si no volvía a casa” y reveló cómo fue el primer encuentro con el intendente en persona luego del incidente: “Este cararrota, cuando me citó a su despacho me pregunta ‘¿Qué te pasa, gordita? ¿Estás bien? ¿Contáme qué te pasó algo?’. Yo sentía que estaba hablando con dos personas diferentes. Que tenía a un Fernando Espinoza de la Municipalidad y a un Fernando Espinoza, el abusador, el que estuvo en mi casa, en mi domicilio”.
«Yo decidí denunciar por todos los que viven abusos y no se animan. Quizás no llegan porque quizás de la tristeza, del dolor, se mueren en el camino. Yo decidí hacer un cambio ese día y dije ‘no me importa que tenga que denunciar a un poderoso, no me importa que me maten’, porque obviamente tengo miedo a que me maten», expresó la mujer a LN.
Fernando Espinoza negó la acusación de abuso sexual
Espinoza, quien ejerce por tercera vez la titularidad de la municipalidad más grande de la provincia de Buenos Aires desde 2019, negó las acusaciones. «Es una mentira armada», dijo el jefe comunal en un comunicado. El jefe comunal declaró en el comunicado oficial: «La denuncia es absolutamente falsa. Nunca sucedieron ninguno de los hechos denunciados bajo ningún concepto».
Además, argumentó que la fiscalía había pedido su sobreseimiento en dos ocasiones anteriores, en agosto de 2022 y diciembre de 2023, lo que respaldaría su inocencia, según el texto publicado por la oficina de prensa del municipio de La Matanza. Y destaca que a pesar de la falta de apelación por parte de la denunciante en ninguno de los dos casos, el expediente permaneció abierto.
«En ambas ocasiones y a pesar de que la denunciante no apeló en ninguno de los dos casos, el expediente se mantuvo abierto«, indica el texto.
Oficialmente, el Municipio de La Matanza subraya la confianza de Espinoza en el sistema judicial y la apelación de la decisión del juzgado. «Estamos ante una medida judicial que no está firme», dice el comunicado, «y ahora, sin incorporación de nuevas pruebas ni nuevos testimonios, sorpresivamente se sigue tramitando la causa».
«Para que quede claro: nunca sucedieron ninguno de los hechos denunciados bajo ningún concepto. Se trata de una mentira armada. Dejemos actuar a la Justicia», concluye.
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