Luján: la historia de un chico con síndrome de Down que terminó la secundaria y no le permiten estudiar para maestro jardinero
Se llama Martín Buchanan y tiene 19 años. Quiso empezar a cursar la carrera terciaria pero se encontró con la negativa de dos institutos. Las razones que esgrimen y la impotencia de su familia, que difundió el caso para conseguir ayuda.
Desde que terminó el nivel secundario en el Colegio Montessori local en 2021, Martín Buchanan, un joven de 19 años con síndrome de Down y oriundo de Luján, quiere estudiar para convertirse en maestro jardinero. Sin embargo, su sueño se ve frustrado por un asunto burocrático que, para su familia, es una excusa para discriminarlo por su condición.
Es que el joven cuenta con dos instituciones en la ciudad del oeste del Gran Buenos Aires para poder estudiar la carrera terciaria que eligió; pero los directivos de ambas le negaron la posibilidad de cursar allí al no aceptar su solicitud de ingreso.
Ante esta situación, sus padres están haciendo diversas gestiones ante la Justicia para tratar de destrabar el conflicto y obtener un cupo para que el joven con síndrome de Down pueda estudiar, pero aún no han conseguido respuestas favorables.
La razón por la que no permiten estudiar al joven de Luján
En plena desesperación por el hecho de sentirse desoídos por las autoridades, Catalina Buchanan, la hermana mayor del chico con síndrome de Down, publicó un video en redes sociales para visibilizar el caso y terminó viralizándose.
En él, ella se filmó junto a su hermano y contó la situación. Explicó que los institutos educativos de Luján para estudiar la carrera de maestro jardinero no aceptan el ingreso de Martín porque el chico necesita una maestra de apoyo para poder cursar y los directivos no aceptan esta situación.
La joven también relató que sus padres mantuvieron una reunión con la directora general de Escuelas de Mercedes. Allí les explicaron que los niveles inicial, primaria y secundaria son obligatorios pero el terciario no lo es, por lo que los establecimientos no están obligados a aceptar que Martín cuente con una maestra de apoyo, una asistencia esencial para él. La funcionaria también les habría revelado que «no es una cuestión que tenga que ver con la institución, sino con el sistema educativo en general”.
«Mi mamá comentó que mi hermano tiene síndrome de Down en una de las dos escuelas, le respondieron ‘eso es un problema‘. Me parece que hay un poco de esto, de querer evitarse un problema a futuro desde el desconocimiento absoluto de cómo es Martín y cómo se puede desenvolver», apuntó Catalina.
Y resumió: «Hay algo de no confiar en que pueda lograrlo, que no pueda llegar a constituirse como maestro jardinero, que no pueda desplegar esa tarea como corresponde. Me parece que tiene que ver con la falsa inclusión”.
En esa línea, contó que durante su etapa en el secundario, Martín hizo una pasantía como preceptor en un jardín de infantes de Luján. «La experiencia le encantó y en el jardín se quedaron súper contentos y conformes con él. Es una persona autónoma, independiente y se puede desenvolver perfectamente».
Ahora, ante la imposibilidad de poder estudiar, confesó que su hermano «está bastante angustiado, frustrado», porque «es toparse con la injusticia de todos sus compañeros terminaron el secundario, están todos estudiando y él no puede estudiar, pero él es un chico que tiene absoluta resiliencia, encara la vida con optimismo y le pone toda la garra».
Finalmente, la joven se refirió a las repercusiones del video que publicó contando el caso. «Tuvo un impacto positivo y una visibilización tremendos. Aparecieron muchísimas personas que se pusieron a disposición para colaborar. Se abrieron varias puertas que ojalá generen el resultado que estamos buscando, que es que Martín ingrese al instituto con una maestra de apoyo».