La historia solidaria de Mario Vallejos, el hombre que pelea por su vida tras ser noqueado en una pizzería de San Justo
El empleado de la Cruz Roja volvía a su casa luego del trabajo. Quiso ir al baño del local, pero se encontró con un empleado que se lo negó: discutieron y recibió una trompada que lo hizo caer y golpear su cabeza contra el suelo.
Mario Vallejos junto a uno de sus hijos, en una foto que difundió la familia del hombre que está internado en grave estado.
La terrible historia de Mario Vallejos (62) se viralizó en las últimas horas por la violencia con la que fue golpeado en una pelea callejera. Hoy, el hombre lucha por su vida luego de haber recibido una trompada en la puerta de una pizzería de San Justo, en La Matanza, a la que había intentado entrar para ir al baño.
El agresor, Walter Villaverde (57), empleado del local, está siendo investigado ya que toda la secuencia fue captada por una cámara de seguridad del lugar.
El viernes pasado, Vallejos regresaba de su trabajo en la filial Morón de la Cruz Roja Argentina cuando bajó del colectivo 96, a metros de la esquina de Paraguay y Arrieta, en San Justo. Entró tranquilo a la pizzería «La Doménica» con la idea de ir al baño, pero se topó con Villaverde.
Mario quería pasar un minuto a hacer sus necesidades antes de seguir viaje hasta su casa pero Villaverde le negó el paso argumentando que era «exclusivo para clientes». Según lo declarado por el propio Villaverde, tuvieron un entredicho dentro del comercio.
En las imágenes filmadas por las cámaras de seguridad se lo ve a Vallejos salir tranquilamente del local. Detrás suyo fue Villaverde. En un instante, ya fuera del local, el empleado de maestranza de la Cruz Roja se da vuelta y Villaverde le da una trompada en la cara. La víctima cae hacia atrás y se golpea la nuca contra la vereda.
Debido a ese impacto, Vallejos sufrió una lesión en la cabeza y tuvieron que operarlo. Primero lo atendieron en el Policlínico San Justo y más tarde fue derivado a otro centro de salud en la Ciudad de Buenos Aires. Su cerebro, según el parte médico, sigue sangrando, y esperan que se desinflame antes de someterlo a una nueva cirugía para descomprimirlo.
«Le pegué un golpe de puño porque me insultó y, al caer, golpeó contra el cordón de la vereda», declaró el empleado del comercio. Según Primer Plano, un encargado del comercio dijo: «Es una persona que fuma mucho (por Villaverde) de dos a tres atados por día. Y está intentando dejar el cigarrillo. Eso genera mucha irritabilidad y actuó impulsivamente, sin justificarlo».
Los dichos de Villaverde ante la Justicia concuerdan con las imágenes de las cámaras de seguridad que registraron el hecho.
Mario Vallejos y su historia solidaria en la Cruz Roja
Mario Vallejos tiene dos hijos, que le dieron dos nietos cada uno. Para todos los que lo conocen es una persona «súper amorosa que nunca tuvo problemas de esta índole con nadie». Todos descartan que haya hecho algo para incitar a una pelea.
El hombre es viudo, trabaja hace más de 40 años para la Cruz Roja y cuida a sus nietos para que su hija Cecilia pueda estudiar.
La situación del agresor actualmente es complicada, ya que dependerá de lo que pase con la salud de Vallejos. «Fue aprehendido, las lesiones son hasta el momento califican como lesiones leves, lo que amerita que no quedara detenido», confirmaron fuentes de la investigación.
La investigación está en manos del fiscal Gastón Bianchi, de la fiscalía N° 3 de La Matanza. Al agresor lo indagaron por lesiones leves y posteriormente fue liberado porque el delito por el que se lo acusa es excarcelable. La pizzería continúa funcionando normalmente aunque, según dijeron, Villaverde ya no está trabajando.
«Estamos esperando a ver cómo evoluciona mi papá. La tomografía dio que tiene un sangrado, un coágulo en su cabeza por el golpe. Estamos muy preocupados, cuando lo veo me pregunta mi nombre o qué día es. Lo vemos desorientado», se preocupa Cecilia.
«Lo único que queremos es justicia para mi papá, que este hombre pague por lo que hizo y que se termine esta violencia, no podemos vivir así», cierra la mujer.
