La emotiva historia con su madre de Carlos Alcaraz, el héroe de Racing: “Cuando mi mamá se muera, yo me voy con ella”
El juvenil futbolista de 19 años, autor del gol con el que la Academia le ganó a Boca el Trofeo de Campeones en San Luis, se emocionó al hablar de Amalia, su mamá. Y reveló la trama de lucha que le permitió llegar a ser profesional.
Alcaraz con Amalia, su mamá.
Carlos Alcaraz vive horas de alivio y felicidad. El juvenil futbolista de 19 años fue el héroe de Racing para ganarle a Boca en San Luis el Trofeo de Campeones, gracias al gol que anotó en el tiempo suplementario. Mientras aún sigue la euforia por el título obtenido, se emocionó al hablar de Amelia, su mamá, a quien el considera artífice de este gran momento personal y profesional.
Con menos de 100 partidos en Primera División, el mediocampista es una de las joyitas surgidas de las inferiores de la Academia. Llegó con 15 años al predio Tita Mattiussi integrando el equipo de la Selección de La Plata, de donde es oriundo, y marcó el único gol en lo que fue derrota contra el combinado de juveniles del club de Avellaneda. Ya había sufrido un golpe al ser rechazado en Gimnasia de La Plata, donde contó que le dijeron que «no tenía físico para jugar al fútbol, que era muy flaquito».
Sin embargo, en el encuentro disputado en el predio de Racing, su performance le llamó la atención a Alejandro Russo, que coordinaba las divisiones inferiores de la institución y decidió ficharlo. Al principio era suplente en el representativo en Liga Metropolitana pero luego pasó a formar parte del que competía en los certámenes de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA). Así se fue abriendo paso hasta convertirse en profesional y llegar al primer equipo.
Hoy es una pieza clave en el conjunto que dirige Fernando Gago. Tiene contrato hasta diciembre de 2026 en la Academia y una cláusula de rescisión de 25 millones de euros. Se llevó todos los flashes con su gol a Boca en San Luis para levantar el Trofeo de Campeones e incluso fue el artífice del final escandaloso que se vio en el Estadio La Pedrera: su festejo, con tono burlón de cara a la popular de Boca, generó la reacción de los jugadores del Xeneize, que lo increparon y hasta agredieron después de la conquista. Carlitos Alcaraz, más allá de toda polémica, no duda en atribuirle gran parte de su buen momento a su mamá.
La emoción de la figura de Carlos Alcaraz al hablar de su mamá
«Mi vieja no quería que juegue al fútbol, quería que tocara la guitarra», comenzó contando Carlos Alcaraz y reveló que, pese a que él eligió un camino distinto al que quería ella para él, no paró de apoyarlo. «Mi vieja me dio todo. Se ha levantado muchas veces para hacerme desayunos y que yo me vaya en tren a entrenar. Siempre estuvo conmigo. Es mi vida. Siempre le dije que cuando mi mamá se vaya no me va a quedar otra cosa que irme con ella. Nací con ella y es la única mujer que voy a amar de acá al día que me muera. El gol que hice fue para ella», expresó tras el título obtenido ante Boca. Una declaración de amor llamativa para un futbolista que después le dedicó también el título a su novia.
Amalia, que se levanta a las 5 de la mañana para ir a trabajar limpiando casas, es una referencia para la joyita de Racing. «Me enseñó hasta a modular a la hora de hablar. Yo no sabía hablar. No podía expresarme con claridad y hasta eso ella me hizo mejorar. Por eso ya le dije que quiero que deje de trabajar. Yo no soy millonario, pero con lo que gano hoy ya nos alcanza para vivir bien y que ella no tenga que trabajar más», manifestó.
El gol que le dio el trofeo a Racing estuvo cargado de polémica, porque fue a festejarlo frente a los hinchas de Boca, pero él explicó la situación: «Cuando hice el gol pensé en festejar. Le pido disculpas a la gente de Boca si se sintió mal, pero no me podía cruzar toda la cancha. Se ve que se lo tomaron mal. Ellos la vez pasada nos cargaron, no dijimos nada y cerramos el orto. Yo estoy contento por mí, por la gente y por el grupo».
Y reveló que fue un gran desahogo el triunfo por las semanas vividas luego de perder el título de la Liga Profesional de Fútbol, que justamente ganó Boca y que motivó el enojo de los hinchas con él y sus compañeros. «Muy mal la pasé. Salí recién al tercer día que tuvimos libre. Por ahí la gente te putea o te burla y no sabe que somos personas además de futbolistas. Que me puteen a mí no tengo problema, pero no me gusta cuando tocan a mi familia».
Finalmente, sobre su futuro, adelantó: «Me voy a tomar unas vacaciones como todos. Estoy muy bien acá. Pero no depende de mi. Si llega una oferta que al club le haga bien y me digan que me tengo que ir, me tendré que ir».
