El drama de una madre de San Fernando: su hija de 6 años lleva un mes y medio internada sin diagnóstico
La nena se llama Abbygail y desde el 26 de diciembre está en el Hospital Militar de la Ciudad de Buenos Aires. Su madre pide ayuda para trasladarla a otro centro asistencial. «Nadie da una respuesta», asegura.
La nena internada se llama Abbygail y tiene 6 años. Recibe oxígeno, tiene tos y vómitos y aún no está claro su cuadro.
Desde hace un mes y medio, Lis Benítez, una vecina de San Fernando, vive un verdadero calvario por el estado de salud de su hija de 6 años de edad, Abbygail. Denunció que la nena está internada en el Hospital Militar y no recibe la atención necesaria, al punto de aún no tener diagnóstico sobre su estado de salud.
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La situación que dio origen a esta realidad tuvo lugar el 16 de diciembre pasado. Abbygail no se sentía bien y la mujer salió con ella de su casa en el barrio Aviación para llevarla al Hospital Materno Infantil de Tigre, en el norte del Conurbano. De allí la derivaron al Hospital Español, donde estuvo internada hasta el viernes 24 por una neumonía. Le dieron el alta pero al día siguiente volvió a tener mucha tos y la madre nuevamente se alarmó.
«Volví a llevarla a la guardia en Tigre. A la medianoche la trasladaron al Hospital Militar y desde ese día está internada», dijo Lis Benítez al portal San Fernando Nuestro. Y agregó que desde su llegada a ese centro asistencial, «comenzó la pesadilla».
Así lo detalló: «Nos aislaron a las dos por sospecha de Covid-19 y posible tuberculosis. Entre hisopados y PCR nos hicieron cinco tests en total y todos dieron negativos. Le hicieron el estudio para evaluar si es tuberculosis pero el resultado demora 45 días, aunque igualmente se descartó ese diagnóstico porque está recibiendo tratamiento para eso y no está respondiendo».
A un mes y medio, las causas del deterioro en la salud de la nena de San Fernando siguen siendo una incógnita, porque a los dos primeros posibles diagnósticos se la agregaron las especulaciones sobre EPOC pos viral, fibrosis quística y hasta reflujo estomacal. Lis aseguró que pide que un médico le informe el cuadro de situación pero hasta ahora lo único que sucede es que «sólo vienen a traerle la comida y el enfermero la medicación».
El desesperado pedido de la madre de San Fernando
Lis denuncia que su hija prácticamente no recibe atención médica. Sus días los pasa asistiendo a Abbygail en todo lo que puede, como controlarla cuando duerme. «Está con taquicardia porque cuando entra en sueño profundo no puede respirar, empieza a toser y le dan vómitos».
En ese marco, manifestó: «Desde el 26 de diciembre que no me muevo ni un segundo de acá. Un sólo día fui a mi casa a bañarme porque acá no hay agua caliente. No me quiero mover de acá. Imaginate si yo estando acá no recibe atención, ¿qué sería si la dejo sola? El 29 de diciembre la indujeron a un coma: sólo la podía ver en el horario de visitas, a través de un vidrio. El 4 de enero, cuando despertó, empezó a vomitar el tubo y nadie me llamó para avisarme. Sólo me enteré cuando fue el horario de visitas».
Entre las situaciones que acusa la mujer, contó que discutió con personal médico porque pedía que un profesional atendiera a la nena tras varios vómitos producto de la tos. «Un doctor vino una hora después y se la llevó a terapia intensiva. Es increíble la falta de humanidad», lamentó.
Y agregó que en otra situación comenzó a investigar un medicamento que le habían agregado a los 13 que ya ingiere y «en internet vi que se usaba para tratar esquizofrenia. Pedí al enfermero que llame al médico para saber para qué era ese medicamento, me dijo que le había avisado pero nunca vino».
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La madre de San Fernando reveló que su hija, con 6 años, está pesando 14 kilos y está constantemente recibiendo oxígeno. Y cerró con su desesperado pedido: «No veo mejorías en mi hija y ya casi no quiere comer. Necesito que alguien me pueda ayudar a trasladarla a algún hospital pediátrico, el Garrahan, el Gutiérrez o Casa Cuna. Desde la obra social, Elevar Pasteleros, me dicen que no se puede trasladar de una institución privada a un hospital público. Desde acá dicen que no van a pedir un traslado porque ellos están aptos para asistirla».
