El desgarrador pedido del ex marido de Verónica Ultra, la ciclista que murió por un conductor borracho
Facundo de Arma encabezó este jueves una movilización en San Antonio de Padua para pedir que se recaratule la causa que investiga la muerte de Verónica Ultra, la deportista de 50 años atropellada en la colectora de la Autopista del Oeste.
Verónica Ultra (50) era ciclista, se dedicaba a competir en triatlón y tenía tres hijos de 12, 15 y 18 años. El 27 de marzo pasado fue atropellada y asesinada por el conductor de un Audi A5 que, según el control de alcoholemia posterior, manejaba borracho.
Este jueves, familiares de la vecina de San Antonio de Padua se concentraron frente a la estación de trenes de esa localidad para pedir que la causa que investiga el crimen de mujer que falleció mientras circulaba por la banquina de la Autopista del Oeste, a la altura del partido de Moreno, sea caratulada como «homicidio con dolo eventual».
La consigna del encuentro fue: «El alcohol al volante mata». «Solamente pedimos justicia, nada más que eso», aseguró este jueves Facundo de Arma, el ex marido de la víctima. «El homicidio no es culposo porque el 2.9 de alcohol en sangre nos tiene que hacer ver a todos la responsabilidad», señaló el hombre.
«A partir de ahora se tiene que sentar un precedente. Hay muchas familias que han sufrido a consecuencia del alcohol y de no ser responsables de las acciones que uno comete», continuó.
Verónica Ultra se preparaba para participar de una competencia cuando fue embestida por Mariano Giménez, de 25 años, quien conducía un Audi A5 blanco, mientras ella circulaba en bicicleta en la salida de la Ruta 23. Con carteles con fotos de Verónica y la frase «El triatlón está de luto», decenas de integrantes del Club Atlético Argentino de Merlo y de los equipos deportivos Triforrest y Squadra Triatlón, con los que entrenaba la mujer, se unieron al reclamo de Ultra.
«La Justicia lo que tiene que hacer es lo que le corresponde: dictar la prisión preventiva. La jueza tiene las pruebas suficientes para dictaminar y dejar un precedente claro a la sociedad de que este delito tiene que ser carcelable y la que la persona no puede salir hasta que cumpla su pena», aseguró Facundo, abrazado a su hijo menor y desde la concentración en San Antonio de Padua.
Qué pasó con el conductor acusado por el crimen Verónica Ultra
El conductor está detenido por la carátula de «homicidio culposo agravado por conducción imprudente», por lo que la familia de la ciclista pide que no quede en libertad. «Hoy necesitamos una demostración de la Justicia de que no va a quedar en la nada», remarcó el ex marido de Verónica.
En la investigación intervino el fiscal Gabriel López de la UFI N° 8 de Moreno, quien pidió a la jueza Celina Ardohain, del Juzgado de Garantías Nº 3 de Moreno que la carátula sea «homicidio simple», una imputación más grave que el «culposo», y que prevé una pena de entre 8 y 25 años de prisión.
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La ciclista de 50 años trabajaba como administrativa en la empresa de turismo de la familia de su ex marido y además vendía indumentaria en un local de ropa de su barrio, en Merlo. Era, además, una apasionada por el deporte y se dedicaba al triatlón, por lo que solía frecuentar la zona para entrenar arriba de su bicicleta y ponerse a punto para sus próximas competencias.
Verónica Ultra falleció a la mañana del 27 de marzo pasado a la altura donde la Autopista del Oeste cruza con la Ruta Provincial 23, cuando mientras iba en su bicicleta fue embestida por un Audi A5 blanco conducido por Mariano Giménez, quien iba junto a un acompañante que también estaba alcoholizado.
Un día después del crimen de la ciclista, el conductor se sentó frente al fiscal López y simplemente declaró: “No la vi”. Después, no dijo nada más, ni siquiera quiso responder preguntas sobre lo borracho que estaba. Desde ese momento, está preso a la espera de la resolución de la Justicia.