El misterio de Brisa del Pino en La Matanza: la oscura trama detrás de la chica de 15 años que hace casi 5 meses que no aparece
Desapareció el 2 de diciembre en Moreno, un lugar al que siempre volvía después de que su familia se mudara a Villa Luzuriaga por cuestiones de seguridad. Hay un hombre de 44 años detenido, pero aún no hay rastros.
La búsqueda de Brisa del Pino, la chica de 15 años de La Matanza que lleva casi cinco meses desaparecida, se encuentra en un callejón sin salida. Su paradero está envuelto en un misterio tal que el Gobierno ya puso una recompensa de 5 millones de pesos para quienes aporten información. En el medio, se ha ido conociendo una oscura trama que incluye abuso sexual, prostitución y drogas.
Claudia, la madre de la adolescente, contó que se había mudado en mayo del 2022 a la localidad de Villa Luzuriaga para huir de la inseguridad del barrio Mariló de Moreno, donde anteriormente se encontraban. Sin embargo, reveló que su hija seguía frecuentando esa zona.
«El 2 de diciembre me dijo que se iba para allá, a la casa de una amiga, pese a que yo le había dicho que no. Se llevó sus perfumes, su ropa y no la volví a ver», contó la mamá.
Fue el 12 de diciembre que la mujer hizo la denuncia por la cual comenzó a buscarla la Policía. En el caso interviene la Unidad Funcional de Instrucción y Juicio N°11 del departamento judicial de La Matanza y la investigación tuvo como primera «punta del ovillo» el contacto de un vecino de ese barrio de Moreno, Ismael, quien le dijo que Brisa del Pino solía andar por la «cancha de los paraguayos», un potrero de esa humilde zona donde solían verla con otros adultos y algunas chicas.
La trama detrás de la desaparición de la chica de La Matanza
El otro dato clave en la investigación fueron los mensajes que Claudia recibió a través de redes sociales de un hombre llamado Carlos Altamirano, de 44 años, quien le dijo que Brisa del Pino solía trabajar en su casa haciendo tareas de limpieza y había olvidado algunas prendas de ropa. Le pedía que las fuera a retirar porque estaba teniendo problemas con su pareja. Eso encendió las alarmas de la madre, que aportó la información a la Justicia.
El hombre terminó detenido y confesó que había mantenido una relación con la chica de La Matanza, pero no tenía nada que ver con su desaparición. Ismael, que lógicamente fue allanado en dos oportunidades pero luego fue descartado como sospechoso, indicó que Carlos la había tentado con ese trabajo para luego «ofrecerle plata a cambio de sexo». A su vez, mencionó que también la involucró en el mundo de la droga.
«Ella terminó parando con un tal ‘Churro’, un transa del barrio, que le daba droga y la ponía a vender. También me dijeron que podían haberla captado para trata de personas y llevarla a Paraguay», relató a Telefe el vecino.
Con esta información, Claudia fue hasta la canchita de fútbol del barrio Mariló de Moreno para ver si daba con su hija, pero no logró hallarla. Aunque habló con gente de un pequeño bar con un pool donde le aseguraron que allí «paraba» la adolescente.
Así, la Justicia llegó hasta otra mujer que dijo que la había visto en la calle deambulando y le había dado asilo. «Yo pienso que la vendieron», comentó la testigo. La angustia de Claudia es total. «Yo necesito encontrarla, pero sola no lo voy a hacer», remarcó entre lágrimas quien además tiene otros dos hijos menores. Hoy hay una recompensa vigente de $5 millones que dispuso el Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires para tratar de obtener información, pero Brisa del Pino sigue sin aparecer.
Las autoridades difundieron la información de la descripción física para que quienes la vean puedan reconocerla: Brisa mide aproximadamente 1,45 metros, es de contextura delgada, ojos marrones, cabello a la altura de los hombros, castaño oscuro y flequillo; y posee una cicatriz arriba de su ceja izquierda.