Con cámaras y múltiples opciones de pago: así serán los nuevos colectivos que circularán en CABA
Jorge Macri presentó al cambio que se implementará el 1° de enero de 2025. Incluye más medidas de seguridad vial con Inteligencia Artificial, mejor habitabilidad y diferentes formas de pagar, más allá de la tarjeta SUBE.
Jorge Macri como cabeza visible del gobierno porteño avanza con la modernización de los colectivos después del traspaso acordado con Nación. El nuevo plan presentado esta mañana en CABA contempla que no podrán circular por las calles unidades con antigüedad mayor a 10 años, todas deberán instalar cámaras de seguridad y sistemas de seguridad vial y aceptarán cualquier medio de pago. En un futuro también podrían incorporar WiFi gratuito en el futuro.
En CABA, las 31 líneas de colectivo que tienen su recorrido íntegramente dentro de la ciudad realizan 3,6 millones de viajes diarios en transporte público. Los colectivos son el medio más utilizado con el 43% del total, más del doble de trenes y subtes sumados.
Según informó el Diario Clarín, el de los colectivos será un proceso similar al que ya atravesó la Ciudad cuando el Ejecutivo nacional le traspasó le subte y la Policía. Ahora, además de hacerse cargo de los costos por la cobertura los subsidios, que representan unos $ 7.500.000.000, la Ciudad también comienza a tomar decisiones operativas, como las que anunciará este miércoles el Jefe de Gobierno, Jorge Macri, y también sobre los recorridos, que están en estudio, por lo que las novedades se conocerán más adelante.
Cómo serán los nuevos colectivos en CABA
Desde el primer día de 2025, todos los colectivos que estén en la calle tendrán que tener como mucho 10 años de antigüedad. Es lo que establece el código de tránsito y transporte, por lo que la primera renovación abarca a 241 vehículos que son modelo 2013 o anteriores. Hoy, la antigüedad promedio de la flota actual es de 6,5 años. Y el objetivo es bajarla a 4,5.
«Mas sustentabilidad. En sintonía con lo que se esta haciendo en el mundo y donde nuestra ciudad todavía tiene una deuda importante vamos a implementar buses 100% eléctricos en la línea nueva que estamos implementando desde plaza San Martín hasta Parque Lezama, probablemente después se extienda ese servicio hasta la boca», indicó Macri en la presentación.
«Hace dos meses estábamos discutiendo se transfieren o no las líneas. Queremos hacernos cargo de una mayor autonomía, hacernos cargo de las cosas para mejorarlas. Como hemos hecho con policía, con bomberos», aseguró el jefe de gobierno porteño.
Luego hizo referencia a cambios en la seguridad de las líneas que transitan por la Ciudad. «En los próximos 3 meses los colectivos tendrán cámara de seguridad en su interior. Esas cámaras están conectadas con nuestro centro de monitoreo porteño», detalló.
Otro de los puntos contemplados en el plan es dotar a los colectivos de sensores avanzados que, junto con la inteligencia artificial, le alerten al conductor sobre riesgos e interferencias a través de alertas sonoras, por ejemplo, si hay una persona cruzando la calle. Pero también podrían sumar la opción de frenado automático que ya tienen vehículos particulares.
Otro punto fundamental es que se incrementarán los controles de alcoholemia y narcotest por sorpresa a los choferes en las estaciones cabeceras de cada línea.
«Los vecinos van a poder viajar en el colectivo no solo con la SUBE, sino también con el celular, TC, tarjeta de debito. Es una manera de facilitarle la vida a la gente, al turista, al que viene del interior, al que no es usuario recurrente del sistema», dijo Macri, qui8en el año pasado, durante la campaña electoral por la Ciudad, ya había presentado un plan para que la SUBE no sea el único medio de pago posible en el transporte porteño.
Según aseguró Macri, a partir de enero solamente van a circular «líneas de colectivos que tengan un máximo de hasta 10 años». Y explicó que esto «va a obligar a la renovación de 241 vehículos de la flota de alrededor de 1.800 que tienen estas 31 líneas».
En cuanto a las tarifas, seguirán siendo las mismas que fija el Gobierno nacional, aunque por el acuerdo firmado por la Ciudad, en un futuro que por ahora no parece tan cercano, el Ejecutivo porteño podrá fijar precios propios.
Al primer golpe de vista, el otro gran cambio cambio será el color. Todas las unidades tendrán los laterales pintados de azul, mientras que conservarán los colores de cada línea en el frente y la parte trasera. Además, sumarán intervenciones hechas a partir del arte del fileteado, que es un sello porteño y Patrimonio Intangible de la Humanidad, según la Unesco.
Hacé tu comentario