Brutal video en Burzaco: un policía le dio un codazo a una chica en la puerta de un boliche y le fracturó la mandíbula
Dos chicas de 23 años fueron golpeadas por agentes en la madrugada del domingo. Terminaron demoradas por disturbios en la vía pública, aseguraron que les robaron sus pertenencias y que no quisieron tomarles la denuncia.
Un nuevo episodio de brutalidad policíaca se registró en Burzaco, en el sur del Conurbano, durante el último fin de semana. Lo sufrieron Johana Ávila y Abril Silvera, dos chicas de 23 años que fueron golpeadas por oficiales a la salida del boliche Cluster Club, de la avenida Hipólito Yrigoyen al 15.500, en la mañana del domingo.
«A mí me sacan del boliche porque estaba ya en un estado de ebriedad que en un momento se me cayó un vaso y bueno la seguridad del boliche determinó que no podía seguí ahí adentro. Cuando me sacan para afuera sale mi amiga conmigo y la patovica me golpeó. Mi amiga le empezó a decir a la Policía que hiciera algo porque me habían golpeado y ahí fue todo en un segundo que la tenían a mi amiga en el piso indefensa siendo golpeada», contó Abril.
La secuencia quedó grabada por el video de un testigo que filmó con su celular y captó el momento en que Johana se encontraba en el suelo, luego de haber sido agredida y reducida por una agente, y otros dos efectivos rodeaban la escena. Cuando Abril quiso acercarse a ayudarla, un policía la apartó de un codazo y la hizo caer al suelo.
Producto de esa caída, la chica sufrió fractura de mandíbula y perdió un diente. «A mi amiga la arrastraron por el piso, ella se sentó al piso para que no pudieran tocarla, pero hombres y mujeres policías la golpearon. Nos golpearon a todos incluyendo a los que querían defendernos. A otra de mis amigas, el jefe de calle de la Comisaría 4ta de Longchamps le arrebata el celular cuando filmaba. A mí me desfiguraron la cara. Me fracturaron un diente. Me hice estudios y tengo un traumatismo encéfalo craneal», relató.
Tras ese brutal maltrato, tanto Johana como Abril fueron llevadas a la Comisaría 2° de Burzaco, donde estuvieron demoradas unas seis horas. Las liberaron a las 11.15 del domingo y les entregaron un acta en la cual se les indica que deben presentarse a la audiencia en el juzgado de paz de Almirante Brown el día 17 de noviembre a las 10.
Además del tiempo que estuvieron tras las rejas, ambas ampliaron la denuncia: «Nos robaron el dinero que teníamos entre nuestras pertenencias, alrededor de $11.000, un reloj, zapatos, entre otras cosas. A otra de mis amigas le sacaron el celular por grabar y se lo llevaron a la comisaría, a otro chico le tiraron el celular también por grabar, por suerte lo pudo recuperar y nos aportó el video”
Las chicas golpeadas por la Policía en Burzaco buscan ayuda legal
Abril y Johana quisieron hacer la denuncia correspondiente una vez que fueron liberadas, pero no les permitieron. «Nos dijeron que no podíamos porque estábamos imputadas por disturbios en la vía pública», indicaron. También les advirtieron que no podrían hacerla en la Comisaría de la Mujer porque «es solamente para casos de violencia familiar y que ellos no pueden denunciar a sus compañeros» y que «de querer hacer la denuncia, debía hacerlo ante Asuntos Internos”.
Además, Abril agregó: «Al vernos golpeadas ni nos enviaron al cuerpo médico de la fuerza para hacer los peritajes. Cuando salí de la comisaría fui a la guardia del Hospital Lucio Meléndez de Adrogué, solamente me tomaron la presión y la temperatura y me mandaron a mi casa a tomar analgésicos». Y contó que se hizo estudios en un centro médico privado.
Con filmaciones, certificados médicos que prueban sus lesiones y esas actas policiales, se acercaron a la Fiscalía N°8 de Lomas de Zamora donde finalmente sí pudieron efectivizarla. Sin embargo, algo le preocupa a la joven. «Ahora en el Juzgado de Lomas de Zamora dicen que no hay rastro alguno de que nosotras hayamos estado detenidas. No informaron sobre nuestra aprehensión. Es como que nunca estuvimos en la comisaría. No hay nada en el sistema. Pero nos tomaron las huellas y todo. No aparece nada. Como si nada hubiera pasado. Me dicen que quizás es porque es una contravención y no un delito, pero nos dijeron que no puede ser que no figure que estuvimos ahí”, relató.
De todas formas, espera que todos los elementos probatorios con los que cuenta sirvan de algo. «Me tomaron radiografías y una panorámica; tengo las recetas de los antibióticos, las placas donde dice ´diagnóstico traumatismo encéfalo craneal´, además de las filmaciones de los testigos. Espero que nos puedan orientar bien para que esto no pase más. Es un momento muy angustiante por el que estamos pasando. Siento impotencia porque no nos merecíamos semejante acto de violencia. Estamos muy angustiadas», concluyó. La Fiscalía ya ordenó que sean peritadas por el cuerpo médico legal y que se extraigan los videos de sus celulares a los fines de esclarecer el hecho.