Salvaje crimen en Lanús: en un asalto, asesinaron a un policía retirado frente a su esposa

Un policía retirado fue asesinado a sangre fría el miércoles por la noche por dos delincuentes que quisieron robarle el auto en el que se encontraba junto a su esposa, en Remedios de Escalada. La víctima fue identificada como Daniel Alejandro Blanco, de 58 años, quien se había jubilado de la Policía Federal Argentina hacía tres años.

El hecho ocurrió en el cruce de las calles Olegario Andrade y Dr. Arturo Melo, en la localidad del partido de Lanús. Allí, Blanco se encontraba junto a su mujer a bordo de su auto, un Fiat Cronos color gris, cuando ambos fueron sorprendidos por dos ladrones armados que tenían intenciones de llevarse el vehículo.

Fuentes policiales indicaron que, en un primer momento, la víctima se resistió y uno de los asaltantes le efectuó un disparo con su arma de fuego que impactó en el tórax a la altura del corazón.

Rápidamente fue trasladado en ambulancia hasta la Unidad Sanitaria Luis Máspero para la urgente atención pero luego fue derivado al Hospital Evita, donde ingresó en la sala de Shockroom y se le realizaron maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) que no lograron salvarle la vida.

Un video de una cámara de seguridad del Municipio de Lanús captó a los dos delincuentes bajándose de un auto y doblando en una esquina, para luego volver a aparecer corriendo, presuntamente tras efectuar el disparo, y volviendo a escapar en el vehículo que habían dejado. Se cree que quisieron descartar ese automóvil asaltando al policía y llevándose el suyo.

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Un investigador dijo a Agencia Télam que «aparentemente la víctima no estaba armada y los delincuentes tampoco sabían que era policía retirado». Blanco había cumplido funciones en el área de Logística del Ministerio de Seguridad de la Nación hasta su jubilación.

Intervino en el hecho personal policial de la Comisaría 4° a la que corresponde esa jurisdicción, que encontró en el lugar un clima hostil de parte de los vecinos, enojados y conmocionados, producto del hartazgo por la inseguridad y el cuestionamiento al trabajo policial.

Los delincuentes aún se encuentran prófugos. La causa fue caratulada como «homicidio en ocasión de robo» por el fiscal Gastón Fernández de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°7 de Lanús-Avellaneda, que está a cargo de las tareas investigativas que se desarrollan por estas horas y que buscan dar con los autores de este brutal crimen.

En Caseros, otro policía también fue asesinado en ocasión de robo

Hace tres semanas, Rodrigo Guillermo Becker (41) y fue sorprendido por delincuentes cuando sacaba su moto Honda Tornado RX250 en la puerta de su casa de Bolivia al 3000, en Caseros. Era subcomisario de la Policía de la Ciudad de Buenos Aires, pero en ese momento se encontraba vestido de civil y ni siquiera se resistió: no importó, lo mataron de dos tiros en el pecho.

El ataque fue realizado por motochorros que circulaban por la calle Bolivia y habían pasado por el frente de la casa de Becker pero terminaron volviendo y cometiendo el asalto que terminó en tragedia. El policía fue trasladado al Hospital Ramón Carrillo de Ciudadela, donde murió minutos después.

Por el homicidio hay cinco detenidos: son Luis Miguel «Luisito» Escobar (21), Pablo Buera (19), acusados de ser los motochorros que ejecutaron a Becker y robarle su arma reglamentaria; Alberto Esteban Delfrate (24) y Federico García Azrun (19) son acusados de haber vendido la moto robada al policía mediante una plataforma digital por $30.000 sabiendo que su procedencia era ilegal; y Lautaro Caín Nicrosio (24), quien conducía un automóvil con el cual la banda asaltó a una mujer en Villa Sarmiento para robar la moto con la que llegaron los ladrones hasta la casa del subcomisario para cometer el crimen.

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Los primeros cuatro fueron arrestados en el interior de «Fuerte Apache» tras un procedimiento de la Comisaría 4° de Villa Pineral. Los localizaron tras el análisis de distintas filmaciones de cámaras de seguridad de calles aledañas al lugar del crimen. En tanto, dieron con Nicrosio luego de que sus huellas digitales quedaran en la moto robada con la que los delincuentes llegaron hasta la casa de Becker, algo que lo involucra como parte de la banda delictiva y por lo que lo detuvieron en su casa de San Martín.