Hurlingham: motochorros asesinaron a un policía de la Ciudad en un violento tiroteo
Oscar Fernando Méndez Bautista (45) recibió un disparo en el pecho y murió en el acto. En el enfrentamiento, el oficial mató a uno de los asaltantes e hirió al otro, un joven de 18 años que fue detenido al ser trasladado al hospital.
Un policía de la Ciudad de Buenos Aires fue asesinado en un violento tiroteo que ocurrió en Hurlingham, en el oeste del Gran Buenos Aires, cuando dos motochorros quisieron robarle la motocicleta en la que circulaba. Como consecuencia del enfrentamiento también murió uno de los asaltantes.
El hecho ocurrió en las últimas horas de este domingo, alrededor de las 23.30, en la calle Ernesto Plass al 4300, entre Mar del Plata y Tigre, donde el oficial mayor Oscar Fernando Méndez Bautista (45) fue abordado por los ladrones en la puerta de su casa, donde a punta de pistola le exigieron que entregara su moto.
La víctima, que era numerario de la División Disposiciones Protectivas de la Policía de la Ciudad, intentó defenderse y comenzó a disparar con su pistola reglamentaria. En el intercambio de disparos hirió de gravedad a uno de los agresores, quien finalmente murió a los pocos metros, cuando intentaba escapar. Pero en el tiroteo el efectivo recibió un disparo en el pecho que le ocasionó la muerte en el instante.
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Méndez Bautista estaba vestido de civil y circulaba con su moto Rousser 200 color negra. Mientras que los ladrones se movilizaban en una moto roja de 110cc. Durante el ataque, alcanzaron a robarle la mochila al efectivo cuando ya estaba desvanecido en el suelo, antes de escapar del lugar.
Al escuchar los disturbios, los vecinos del lugar dieron aviso al 911 y a los pocos minutos llegaron agentes de la Policía Bonaerense a la escena del crimen. Pero para ese momento los delincuentes ya habían logrado escapar.
Sin embargo, sobre la calla paralela al crimen (Guayra a 4200, entre Oyhanarte y Bonorino) uno de los atacantes cayó muerto y, antes de desvanecerse, arrojó la mochila robada al efectivo dentro de una vivienda. Este joven, cuya identidad no trascendió, ya había fallecido cuando llegó una ambulancia al lugar.
El segundo delincuente, en tanto, fue trasladado un momento más tarde por sus familiares al hospital San Bernardino de Hurlingham, y las autoridades del centro de salud dieron aviso de inmediato a la Policía, de acuerdo a lo que indica el protocolo en casos de heridos de bala.
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Así pudo saberse que se trataba de Nahuel Castaño (18), quien fue derivado al hospital Guemes, de Haedo, donde ingresó directamente al quirófano. Luego de ser intervenido quirúrgicamente, quedó detenido.
En trabajos posteriores, los efectivos de la Policía Bonaerense lograron incautar en la casa de Castaño la motocicleta con la que habían cometido el ataque a Méndez Bautista.
Motochorros: la indignación de los vecinos
Uno de los vecinos del lugar, identificado como Fernando, declaró a la prensa que “estamos cansados de estos hechos, necesitamos que alguien haga algo. Estábamos en la vereda y comenzamos a escuchar los tiros. Fueron más de 10 disparos los que se escucharon, fue un susto muy grande”.
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Además, en lo que definió como “una lluvia de balazos”, contó que “uno de los disparos pegó en la pared de mi casa. Todavía está clavado ahí”. Y lamentó la muerte del policía: “Era un vecino muy bueno. Todos lo conocíamos y queríamos”.
Por último, remarcó la inseguridad que se viven en el barrio, al recordar que hace solo unos días “otros ladrones entraron a una casa de la calle Rolland y robaron más de 10.000 dólares y pesos en efectivo”.