Argentino de Quilmes sueña con otro ascenso: el día que subió a Primera en una final contra el clásico de toda su vida
El Mate llegó a la A en 1938 tras ganarle a Quilmes Athletic, pero hizo la peor campaña en la máxima categoría. Llegó a descender hasta la D y ahora busca un lugar en el Nacional. Sus orígenes criollos y el esfuerzo para diferenciarse del vecino poderoso.
Argentino de Quilmes y Quilmes Atlético Club son los dueños del clásico más antiguo del fútbol argentino. El municipio situado en el sur del Conurbano bonaerense cuenta con este dato estadístico particular, aunque la longevidad de esta rivalidad no se corresponde con la cifra de partidos disputados entre sí. Ahora, el Mate persigue el sueño del ascenso a la segunda categoría del fútbol argentino.
Argentino de Quilmes y el nacimiento de la rivalidad
Los antecedentes de este clásico se remontan a una lucha de nacionalidades y clases sociales. El histórico Quilmes Cricket Club, fundado en noviembre de 1887, surgió como una institución destinada íntegramente a familias británicas y a sus descendientes. Con el transcurrir de los años fue incorporando diversas actividades, entre las que se encontraba el fútbol.
Paralelamente, aquellos argentinos que deseaban jugar al fútbol y no podían hacerlo en una institución elitista se terminaron agrupando para crear, en diciembre de 1899, el Club Argentino de Quilmes. Para no perder popularidad, el Quilmes Atlético Club decidió aceptar argentinos entre sus filas y adoptó definitivamente su nombre en castellano.
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Argentino se diferenció de su rival desde las costumbres. Quilmes, en concordancia con su prosapia británica, solía agasajar a los visitantes con té y masitas. Su vecino decidió ofrecer mate cocido y bizcochitos de grasa, lo que derivó en un legendario apodo: el Mate.
Mucha historia, pocos partidos
El primer cruce en el clásico quilmeño fue en 1906, con victoria 3-1 para el Cervecero. Para encontrar la primera victoria del Mate hay que ir hasta el quinto partido: un 5-1 que, a su vez, es la máxima goleada de Argentino (por Copas Nacionales, Quilmes se impuso 9-1).
En Primera División acumularon 16 partidos, todos durante la época del amateurismo. El historial quedó 7-6, favorable al Mate, con tres empates. El reencuentro fue en 1938, tras el tercer descenso de Quilmes. En la segunda categoría llegaron a jugar en 35 oportunidades. El último ocurrió en 1981, pero los más trascendentales se produjeron al comienzo.
Las finales memorables del Mate
El campeonato de 1938 es uno de los principales orgullos para el hincha de Argentino de Quilmes. Los dos equipos de la ciudad pelearon cabeza a cabeza el título y el Cervecero le sacó una ventaja en la primera fase, cuando venció en condición de visitante. El Mate tuvo un gran ataque (convirtió 89 goles), mientras que Quilmes contó con la valla menos vencida (43).
A dos fechas del cierre, Argentino estaba dos unidades abajo: goleó 5-0 a Banfield y su clásico perdió 3-1 con Temperley, por lo que llegaron a la definición con los mismos puntos. Se enfrentaron en cancha del Atlético Club por la última fecha, igualaron y concluyeron igualados en 40 unidades, una por encima de All Boys. Hubo que desempatar con dos finales.
La primera se jugó el 3 de diciembre en Villa Crespo, en la vieja cancha de Chacarita: haciendo de local, el Mate se impuso 1-0 con gol de Pedro Agostini. Para la revancha, Quilmes tuvo su localía en el estadio de San Lorenzo. Alejo Fuertes le dio un nuevo 1-0 a Argentino y, también, el primer campeonato de su historia.
La peor temporada, los vaivenes y la esperanza
Argentino de Quilmes no hizo pie en el campeonato de 1939. De los 34 partidos disputados, rescató apenas cuatro empates (Rosario Central, Tigre, Gimnasia y Platense) y perdió el resto. Convirtió 35 goles y sufrió 134. Esa fue su única temporada de Primera en épocas de profesionalismo. A partir de allí, entre ascensos y descensos, tuvo 16 cambios de categoría, cuatro de los cuales incluyeron títulos.
Argentino tocó fondo en 2006, cuando descendió al quinto escalón del fútbol argentino. En la Primera D estuvo siete temporadas hasta que fue campeón. Seis años después se coronó en la Primera C.
En este 2023 quedó tercero en la tabla anual y, tras derrotar por penales a Acassuso, enfrentará a Los Andes a doble partido (define en Quilmes) en una de las semifinales. Del otro lado de la llave se cruzan Deportivo Armenio y San Miguel. De ascender, sería su debut absoluto en el Nacional y, tal vez, la reedición de viejos duelos con su rival después de más de cuatro décadas.
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