Video: impactante persecución de un auto que iba a toda velocidad y en contramano por San Miguel
Según se puede ver en una filmación con ribetes cinematográficos, el conductor circuló también por Ituzaingó, Hurlingham y José C. Paz, donde más de 10 patrulleros lograron detenerlo sobre una vereda.
Una diferencia circunstancial entre la vida real y la que se cuenta en la pantalla grande es que muchas veces lo que está permitido en la ficción y hasta causa interés y admiración, no lo es tan así cuando el episodio puede terminar con muertos de carne y hueso. Algo de esto pasó recientemente en San Miguel, donde una persecución «de película» de milagro no terminó en una tragedia.
De acuerdo con lo que se informó y también se pudo ver a través de las cámaras de seguridad del municipio ubicado en el oeste del Conurbano, el episodio fue protagonizado por un conductor fugitivo que circulaba proveniente de Ituzaingó en un Chevrolet Cruze blanco a alta velocidad, evadiendo distintos controles policiales e incluso tomando distintas calles en contramano.
El hombre, según se consignó en Clarín, tampoco había podido ser detenido por las autoridades locales en Hurlingham. Cuando los operadores del Centro de Monitoreo de San Miguel lo divisaron, dieron aviso a la Policía Municipal, que comenzó una persecución que contó con el apoyo de los móviles del Comando de Patrullas.
Las imágenes difundidas por el Municipio de San Miguel muestran cómo el conductor nunca dejó de acelerar, ni siquiera al llegar a las bocacalles, y mucho menos cuando los policías ya lo perseguían desde distintos móviles.
El video que se dio a conocer dura cerca de dos minutos y, utilizando el recurso cinematográfico de «montaje alterno» que muestra dos acciones simultáneas en lugares distintos, permite ver también cómo desde el Centro de Monitoreo informan a las patrullas hacia dónde se dirigía el fugado, mientras brindaban datos como el número de patente y solicitaban ayuda a otras unidades.
Las diferentes maniobras del Chevrolet fueron relatadas además sobre las imágenes y la persecución, por momentos, aparecía mostrada desde las cámaras internas de los autos de la Policía. «Acá viene de frente, acá viene de frente», decía un oficial al divisar al vehículo delante suyo, mientras se agarraba de la manija ubicada sobre la ventanilla.
De la maniobra «de película» en San Miguel a la detención
En un momento, todo parecía resuelto a la altura de Blasco Ibáñez y Arricau, donde los efectivos lograron detener al auto en cuestión. Pero, en cuestión de segundos, el sospechoso realizó una peligrosa maniobra y, dando marcha atrás, chocó a los patrulleros que lo tenían rodeado e inició una nueva fuga.
«¡Mirá lo que hace! ¡No!», exclamó la operadora del Centro de Monitoreo, señalando la pantalla a través de la cual seguía en detalle las acciones que luego dieron un salto en el tiempo hasta lo que todo indicaría iba a ser el verdadero final de la historia.
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Una cámara de seguridad ubicada en la vía pública, mostraría en la imagen siguiente cómo el perseguido quedó atrapado sobre otra vereda, entre las viviendas, los postes de luz, árboles y patrulleros que nuevamente logran arrinconarlo.
Un grupo nutrido de oficiales se bajó rápidamente y apuntó sus armas contra el objetivo, que levantó las manos y finalmente se rindió. «Detenido, base, detenido», informa un policía, para que el Centro de Monitoreo estallara en aplausos.
Ese último acto de la película tuvo lugar en la esquina de Blasco Ibáñez, entre Chile y Cacique Coliqueo, en José C. Paz, donde fue arrestado y luego trasladado a la Comisaría 1ra de San Miguel, con la intervención de la UFI 22 de Malvinas Argentinas.