Los tuits contra la dirigencia de Independiente de Bebote, el ex barra que ahora es comerciante
Lo hizo en medio de la batalla del centro de Avellaneda. Pablo Álvarez asegura que se retiró “de la tribuna”. Como arrepentido, involucró a los Moyano en una causa por asociación ilícita. Hoy tiene un increíble restaurante.
Como arrepentido, Bebote Álvarez involucró a los Moyano en una causa por asociación ilícita.
Pablo Álvarez, alias Bebote, es un personaje tristemente célebre en la liturgia de la tribuna de Independiente. Fue durante años el jefe de la barra brava del club, posición delictiva que le dio enorme exposición cuando enfrentó al entonces presidente Javier Cantero. En la actualidad dice estar retirado “de la tribuna” aunque su presencia en la cotidianeidad del Rojo es ineludible: porque tiene un restaurante justo al lado del estadio Libertadores de América, en la calle Ricardo Enrique Bochini 733, y porque en sus redes sociales no sólo se promociona como posible candidato para las elecciones que habrá en el club a fin de año, sino que además se muestra activo en contra de la actual comisión directiva, encabezada por Hugo y Pablo Moyano.
Este martes, mientras en el centro de Avellaneda se desataba un verdadero infierno entre dos facciones de la barra brava del Rojo, Bebote usaba su cuenta de Twitter como comentarista de lo que estaba sucediendo en las inmediaciones de la sede del club. Y en uno de los posteos le apuntó directamente a Héctor Yoyo Maldonado, el secretario general de la institución, el único directivo que dio la cara después de las escenas de barbarie observadas en las calles de la ciudad.
Es el mismo ex jefe de la barra brava que forma parte de una causa judicial por presunta asociación ilícita contra la actual dirigencia, que incluye como imputados a Pablo Moyano y a Maldonado, que se sustentó mayormente en la declaración como arrepentido de Álvarez; del otro lado, los dirigentes de Independiente vinculan a Bebote con el macrismo, ya que la investigación avanzó a partir de 2016, con Cambiemos en el gobierno.
“Sinico (SIC) como este no vi en mi vida. Dice que no conoce a la barra y va juicio oral en mi causa de asociación ilícita. Es mi compañero de causa jajajaja”, escribió su cuenta de Twitter @BeboteAlvarez1; el posteo estaba acompañado por la imagen de Maldonado y una frase que dijo en el raid mediático después de la guerra de Avellaneda: “No conozco a la barra”.
La relación de Bebote Álvarez con Independiente
La batalla con palos y tiros que sufrieron decenas de personas este martes en el centro de Avellaneda comenzó primero en las adyacencias de la sede social del club, de avenida Mitre 470, y se esparció por las calles cercanas. Fue cuando una de las facciones de la barra brava se presentó para intentar regresar al padrón de socios ante la inminente vuelta del público a los partidos de fútbol de la Liga Profesional, y fue cruzada por otra de las bandas que están pugnando por al liderazgo de la tribuna.
El cruce más feroz se dio sobre la avenida Belgrano y a pocos metros del colegio Pío XII, que tiene jardín de infantes, primario y secundario. De hecho, en una de las imágenes que se difundieron se puede ver cómo los hinchas se pelean justo en una de las puertas laterales del complejo educativo. Los alumnos demoraron su salida del colegio ante semejante situación y los que ya estaban afuera, tuvieron que refugiarse en distintos comercios.
El enfrentamiento se produjo justo en la semana previa al regreso del público a las canchas del fútbol argentino luego de la pandemia. En el caso de Independiente, recién se daría en la próxima fecha, cuando el lunes 11 de octubre reciba a Gimnasia y Esgrima de La Plata en el Libertadores de América, ya que este sábado jugará de visitante ante Vélez.
Una de las facciones, la autoproclamada como oficial, tiene como líderes a Juan Ignacio L., alias Juani de Gerli, y Roberto I., alias Rober. Del otro lado, se encuentran César Loquillo Rodríguez, que rearmó su facción, Somos Nosotros, en una alianza con otro histórico de la barra, Matías Olivera, alias Sting, y gente de Lanús y Berazategui.
De hecho, una de las consecuencias de la batalla del martes fue que el Mercedes-Benz C200 de Loquillo, que estaba estacionado en la zona del desastre, fue destruido por barras que lo reconocieron; el auto fue secuestrado en la Comisaría Primera de Avellaneda, donde fueron alojados los 26 detenidos que dejó la batalla, acusados de los delitos de abuso de armas, daños y riña.
En otro tuit, Bebote dijo “cómo me van a extrañar los socios e hinchas de Independiente”. Álvarez estuvo relacionado con la barra brava del club entre 2003 y 2017, año en el que cayó preso por formar parte de una presunta asociación ilícita (el 27 de octubre) y, desde la cárcel, emprendió contra los Moyano usando la figura del arrepentido. El 9 de septiembre de 2019, logró el beneficio de la prisión domiciliaria.
También fue condenado en un juicio por extorsión al técnico Ariel Holan cuando dirigía Independiente (le exigió 50.000 dólares para contribuir al viaje de la barra al Mundial de Rusia) y fue condenado a tres años y medio de prisión, pero la pena se extinguió el 29 de diciembre de ese año, cuando rompió a martillazos la tobillera electrónica con la que lo monitoreaban.
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En febrero de este año inauguró su increíble emprendimiento gastronómico: un restaurante llamado Los Diablos Rojos (nombre que tenía la barra brava y que lo registró como propio), ubicado justo al lado del estadio Libertadores de América de Independiente.
Lo gestiona junto a su pareja Fabiana, el cocinero es su ex mano derecha en la barra, Adrián Bertone, alias el Tano de Gerli (quién también estuvo preso en la causa por asociación ilícita), y alberga en uno de los salones su museo personal de más de 1000 camisetas originales firmadas por los propios jugadores, y hasta tiene un espacio de eventos desde donde se ve el estadio mientras se degusta una “hamburguesa Bochini”, uno de los platos del menú.
