Lomas de Zamora: fue manoseada en un colectivo, el chofer no le creyó y lo escrachó en las redes

La noticia se viralizó en las últimas horas, luego de que contara en su cuenta de Facebook lo que le pasó y que se fueran sumando las voces de repudio. Todo sucedió el viernes pasado a la noche, en Lomas de Zamora, y a bordo de un colectivo de la línea 543 A. Allí la mujer fue manoseada por un pasajero, y su indignación no fue solo por la acción del degenerado sino también porque asegura que el chofer no le creyó. Incluso, como se puede ver en el video que compartió en su red social, en la discusión que mantuvieron la responsabiliza de no haberse defendido, al preguntarle: “¿Y por qué no lo agarraste a las piñas?”.

“Quiero contar algo que me pasó en el día de ayer, 20/8, a las 20.10 aproximadamente, cuando viajaba en la línea 543 A. En el colectivo iba yo sola con el chofer, y a la altura de la plaza Libertad sube una persona que se sienta atrás mío. Sí, el colectivo iba vacío y él se sienta justamente detrás mío. El chofer iba escuchando música bastante fuerte, y yo escucho que esta persona que se encontraba atrás mío empieza a cantar, y cada vez lo escuchaba más cerca”, comienza el relato sobre el episodio de violencia de género que sufrió la víctima.

Y sigue: “No le di importancia,  hasta que prácticamente lo sentí en mi nuca, y ahí es cuando se atreve a pasar su mano por el costado del asiento y así manosear mi pierna. Al sentir su mano automáticamente reaccioné, me di vuelta y empecé a gritarle ‘¿Qué hacés? ¡Sos un degenerado! ¿Cómo me vas a tocar? ¿Qué te pasa?’. A lo que él me empieza a pedir disculpas una y otra vez y saca un carnet de discapacidad”.

Su reacción luego de ser manoseada

Pero para la mujer ese hecho no es algo que justifique la acción del hombre, por eso le dijo “qué me importa ese carnet, qué tiene que ver. No me importa lo que me estás mostrando, vos sos un degenerado”.

Y su relato continúa explicando que en ese momento “me sigue pidiendo disculpas, con la cabeza gacha. Y yo me cambio de asiento y voy a uno de dos personas, alejado de él. A todo esto el chofer no se enteró de lo que había pasado. Sube una chica con un bebé y un nene chiquito, no recuerdo bien en qué parte (del recorrido), y que presencia lo último ya, cuando discuto con el chofer”.

La denunciante aseguró: “Yo ya me encontraba muy mal por la situación, no puedo describir la bronca, impotencia y demás cosas que sentí en ese momento, solo pensaba que no podía creer lo que me estaba pasando”.

Y agregó un dato que después fue avalado por otros testimonios en Facebook: “El colectivo ya iba por la iglesia de La Merced y yo seguía pensando en lo que me había pasado, y que no quería que quede ahí. Yo ya había reconocido a esa persona, sabía que era del barrio, sabía dónde vivía. Entonces cuando sé que se acercaba el momento en que él estaba por bajar, y veo que se para, tomé el valor, me paré yo también y le dije ‘lo que hiciste está mal, vos sos un degenerado, yo sé quién sos y sé dónde vivís’, a lo que me responde ‘ya te pedí disculpas’”.

El hombre del colectivo vive en Lomas de Zamora

Como lo explicó en su historia, y luego lo ratificó en otro posteo que realizó en su misma red social, quien la manoseó en el colectivo es un vecino de ella. Incluso la mujer compartió la foto del hombre y lo denunció con nombre y apellido, y hasta dijo donde vive, que sería en un barrio de Lomas de Zamora. Y entre los comentarios que recibió su publicación hay testimonios de varias mujeres que cuentan que saben de otros casos similares en los que esta persona estuvo involucrada.

Retomando el hecho ocurrido en el interno de la línea 543 A, la mujer dijo que luego de que ella se paró para increpar al hombre, “el chofer escucha y pregunta qué pasa y cierra la puerta de atrás, que es por donde iba a bajar esta persona. Yo le empiezo a explicar la situación al chofer y lo primero que me responde fue ‘yo que sé si vos tenés algo personal contra el pibe y por eso hacés esto. Yo estoy manejando y no vi nada’”.

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“Mi indignación en ese momento fue tan grande que me dirigí hacia el chofer para hablarle más de cerca -continuó-, y ahí le abre la puerta de atrás a esa persona para que se pueda ir. En ese momento fue cuando me quebré y le grité por qué le abría la puerta, y me dijo todo lo que se ve en el video. En ese momento me di cuenta de filmar. Sinceramente antes no lo pensé, estaba bloqueada”.

Para finalizar con lo que le sucedió, dijo: “Estoy muy indignada, con bronca, impotencia. Porque además de pasar ese momento horrible, después tuve que aguantar que otra persona me haga sentir mucho peor. Y esto lamentablemente es lo común. Y después pasan las cosas que pasan”. Y remarcó que “no hay que minimizar éstos actos. Nadie tiene derecho a hacerte sentir así. Yo llegué llorando a mi casa, con un ataque de nervios, y él seguramente anda como si nada”.