Inseguridad: el dramático relato de una víctima de un violento asalto en Ramos Mejía

Las escenas diarias de inseguridad en el Gran Buenos Aires son parte del marco cotidiano de millones de personas. Esta vez sucedió en Ramos Mejía: una mujer de 24 años, que volvía a su casa después de una extensa jornada laboral, fue abordada por dos ladrones que intentaron robarle la mochila a punta de pistola. Lo hicieron con violencia ante la resistencia de la víctima, quien en su relato admitió que en los pocos segundos que sufrió este hecho, esperó “que pase lo que tenga que pasar”.

Su reacción, la de evitar que le sustrajeran la mochila, fue lo que exacerbó la conducta de los dos delincuentes, en un episodio que quedó registrado en una cámara de seguridad de la localidad de La Matanza, un distrito que está entre los que más sufre por el violento de bandas que se mueven por muchos barrios y ya sin tomar en cuenta horarios ni contextos.

Es lo que pasó, por ejemplo, con el caso de Antonela, la protagonista de este intento de robo. La atacaron pasadas las 17 del miércoles 21 de julio. La joven volvía de uno de los dos trabajos que tiene en su jornada laboral, que divide entre atender una panadería y ser niñera.

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Caminaba las nueve cuadras hacia su casa, en Lomas del Mirador, cuando en la esquina de General Rodríguez y Colón, todavía jurisdicción de Ramos Mejía, vivió unos 20 segundos dramáticos en los que fue golpeada, tirada al piso y amenazada hasta que la intervención tanto de vecinos como de transeúntes que pasaban por el lugar abortaron el intento de robo de los dos delincuentes, quienes se dieron a la fuga.

Ramos Mejía: el relato de la inseguridad

Todavía dolorida por los golpes y con miedo, Antonela le puso sus propias palabras a ese tercio de minuto en los que estuvo cara a cara con lo peor. «Salía del trabajo, me sorprendieron de atrás cruzando la calle. Escucho la voz de un pibe que me dice ‘dame todo’. Saca el arma. En ese momento quise correr, me alcanzan, me agarran del cuello, me tiran al piso, me golpean, traté de no darle las cosas, de abrazar mi mochila con toda mi fuerza. Ellos querían la mochila a toda costa”, reconstruyó la mujer.

En su relato, que se ve reflejado en sintonía en el video de la cámara de seguridad, aportó: “Justo ahí apareció un auto, también una chica que se ve en el video y que se enfrentó al pibe. Ahí les dicen: ‘váyanse porque la mato’. La chica le decía ‘déjenla, es una piba, no la golpeen así’. Mientras tanto yo seguía forcejeando con el otro pibe”.

Antonela, en crisis nerviosa, dijo que “los vecinos escucharon” sus “gritos en esos momentos e intervinieron”. Y graficó cómo en ese instante la mente se le puso en blanco, con todo el miedo a cuestas. “Fue el momento en el que uno de ellos dice ‘la cagamos, la cagamos’. El otro dice ‘tirala, tirala’. En ese momento me quedé en shock y pensé ‘que pase lo que tenga que pasar’”.

Lo que pasó, por fortuna, fue que los ladrones decidieron huir incluso sin el botín. “Gracias a los vecinos y las chicas que se involucraron salieron corriendo y escaparon. No sé si estaban en auto o a pie. No llegué a ver bien la situación”, indicó en diálogo con el canal Todo Noticias.

Afirmó, además, estar “con dolores en todo el cuerpo” por la agresión y que se aprestaba a hacer este viernes la denuncia porque el día siguiente del asalto estuvo “todo el día en cama”.

“Se ve en el video que corro para pedir ayuda, los vecinos me ofrecieron su casa, me dieron agua… Lloré toda la tarde. Nadie se merece esto. Salimos a trabajar todos los días, me levanto a las 6.30 de la mañana, trabajo hasta las 5 de la tarde para que me pase esto. No es justo”, reflexionó la víctima.

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No es la primera vez que Antonela sufre un hecho de estas características en el mismo barrio de La Matanza. “Fue un momento horrible. Pero es el segundo robo que sufro en Ramos Mejía. No se puede caminar por la calle. Salgo sola porque tengo familia pero todos trabajan. Tengo que volver a la rutina y tengo miedo. El primero robo fue horrible y el segundo ya te genera más miedo todavía, porque además fue muy violento”, cerró.