Historia, naturaleza y arte unidos en el Museo Pueyrredón, un sitio donde se gestó la Patria
La quinta en la que vivieron Juan Martín y Prilidiano Pueyrredón, su hijo, fue sede de la planificación del Cruce de los Andes y lugar de inspiración para unos de los artistas más representativos de la Argentina de antaño.
Bajo la sombra de un algarrobo que todavía se mantiene en pie en la histórica quinta ubicada en Acassuso, Juan Martín de Pueyrredón y su amigo José de San Martín planearon el cruce de los Andes. Prilidiano, hijo de quien fuera director Supremo de las Provincias Unidas del Río de la Plata entre 1816 y 1819, pintó en ese mismo sitio parte de sus obras.
Dos ejemplos de por qué el Museo Pueyrredón une como ningún otro historia, naturaleza y arte bien representativo de Argentina. Para los primeros indicios sobre su origen hay que irse hasta finales del siglo XVI cuando, en la segunda fundación de Buenos Aires, Juan de Garay repartió tierras en la ribera.
Uno de ellos era el terreno del actual museo, que luego de pertenecer a otros propietarios fue adquirido por Francisco de Tellechea. En 1815, Juan Martín de Pueyrredón se casó con una de las hijas de Tellechea, María Calixta, con quien tuvo a Prilidiano.
Durante su infancia en la tradicional chacra sanisidrense caracterizada por su tradicional patio con un aljibe, el joven que se convertiría en uno de los pintores y arquitectos más destacados del agitado siglo XIX en el país cultivó el amor por el río, la ribera y por el campo, tres de los motivos que prevalecen en su obra.
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La Municipalidad de San Isidro adquirió la propiedad ubicada en Rivera Indarte 48 el 30 de noviembre de 1941. Tanto la casa como el jardín con la barranca que desciende al río habían sido declarados Monumento Histórico Nacional en octubre de 1941.
En el parque del museo dan sombra varios árboles históricos. Están por ejemplo el algarrobo bajo el que se reunieron Pueyrredón padre y San Martín para planear la campaña libertadora al Perú y el aguaribay que plantó Domingo Faustino Sarmiento en 1870 en una visita que realizó a la quinta durante su presidencia.
La recorrida por el Museo Pueyrredón
El paseo por el espacio que está manejado por el área de Cultura de la Comuna de San Isidro comienza en una sala de orientación que despliega, en diferentes niveles de lectura, los cambios que se sucedieron en el territorio, la casa y sus propietarios. Luego, cada sala, funciona como un relato autónomo; un episodio condensador que acepta que toda colección es fragmentaria pero que, al desplegarse, busca dar cuenta de una totalidad.
Así, se presenta la chacra como unidad productiva desde la esclavización hasta la mano de obra asalariada; el cambio del orden colonial al republicano; la devoción privada; las relaciones entre pintura y sociabilidad; el desarrollo del retrato como género pictórico desde la miniatura tardo colonial al cambio del gusto burgués y el mobiliario utilizado por las elites decimonónicas, entre otros.
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En esta historia, adquieren relieve las figuras de los dos habitantes ilustres de la casa: en una sala se recuerda la actuación política de Juan Martín de Pueyrredón y en otras se exhibe la obra de su hijo Prilidiano, además de la reconstrucción museográfica de lo que fuera el taller que el artista construyó como mirador al río.
Ambos resultan figuras claves para abordar el clima político y cultural de un largo periodo del siglo XIX. Una época que va desde que se producen los hechos políticos más significativos para el nacimientos de la República, en los que Juan Martín de Pueyrredón tuvo una gran participación, hasta el periodo posterior a Caseros y previo a la Guerra del Paraguay en la que Buenos Aires se percibe a sí misma como una ciudad con futuro de metrópoli y Prilidiano Pueyrredón tuvo un rol destacado como arquitecto y pintor.
El artista, que escandalizó a la sociedad por ser el primer argentino en pintar mujeres desnudas, se encerraba durante largos períodos a trabajar en su atelier de la quinta de Acassuso. Con el correr de los años, esta tradicional familia se multiplicó hasta alcanzar a más de 2 mil descendientes, entre los que se encuentran el músico César Banana Pueyrredón, la titular del PRO Patricia Bullrich, y su prima, la cantante Fabiana Cantilo.