Covid-19: en la Ciudad aceptan que habrá más restricciones a la circulación si no bajan los casos

La situación de Covid-19 en el país se torna más compleja cada día. Y aunque el virus ya comenzó a expandirse a otras provincias, el Área Metropolitana de Buenos Aires (AMBA) se mantiene como la región con más contagios, Por eso todo indica que en esta zona del país se tomarían medidas más restrictivas a partir de próximo viernes, cuando vence el Decreto Nacional de Urgencia (DNU) que actualmente está vigente. En ese sentido, Nación y Provincia siempre estuvieron alineados. Pero en las últimas horas también se sumó Ciudad: desde el Gobierno porteño reconocieron que si no bajan los casos, habrá que limitar más la circulación.

Los números muestran que no solo los contagios se estacionaron en un número muy alto, sino que la ocupación de camas de terapia intensiva no para de crecer y el colapso sanitario ya es una realidad en muchos centros de salud. Por eso es que al término de esta semana habrá nuevas definiciones. La novedad es que esta vez la Ciudad apoyaría un posible endurecimiento de las medidas.

La situación en la Ciudad de Buenos Aires

Esta mañana, el ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, remarcó que si los parámetros sanitarios “indican que hay que aumentar las restricciones, se propondrán más medidas”, aunque aclaró que se debe hacer “buscando generar el menor daño posible al ciudadano” y señaló que “hay alguna sospecha y datos preliminares” que muestran que están empezando a bajar los contagios.

Pero remarcó: “No se trata de si tiene sentido o no (adoptar nuevas restricciones), porque se trata de evaluar la información sanitaria y científica y explicarle a la gente cuál es el mejor camino de cuidado. Acá estamos frente a una catástrofe mundial, regional, argentina y porteña. Entre todos tenemos que construir ese cuidado”.

El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, mantuvo varias reuniones durante los últimos días con sus funcionarios y allí empezaron a barajar las posibles alternativas para limitar aún más las actividades que implican un riesgo epidemiológico. Las decisiones, tal como sugirieron los sanitaristas al Gobierno nacional, se tomarán luego de esperar 72 horas, para ver el efecto de las medidas vigentes y cómo evolucionan en estos días las cifras de nuevos infectados.

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El DNU que firmó el presidente de la Nación, Alberto Fernández, se encuentra vigente hasta el viernes, pero desde hoy mismo la Ciudad empezará a mirar con atención el avance de la pandemia para ver qué camino seguir a partir del día siguiente, cuando comienza el mes de mayo, y al menos por dos semanas.

Covid-19: las restricciones que se analizan

En el Gobierno de la Ciudad, como fue dicho, ahora están en la misma línea de pensamiento que la Nación. De esta manera sería más fácil el poder avanzar en las restricciones que se tomarían en el AMBA. Y lo que trascendió es que las nuevas limitaciones estarían en las actividades comerciales no esenciales y en las reuniones sociales. Además, se paralizaría la actividad de la construcción.

El motivo, en este último punto, es que todos coinciden en que ese rubro tiene una gran incidencia en el uso del transporte público, que es lo que utilizan los trabajadores del sector para movilizarse. Y más allá de que es imperioso bajar la circulación comunitaria en general, el foco está puesto sin dudas en los trenes, subtes y colectivos.

En cuanto a las actividades comerciales no esenciales, la idea sería que esos negocios -no solo los gastronómicos, sino los de cualquier rubro que no sea esencial- puedan seguir atendiendo pero a puertas cerradas. Es decir, se podría únicamente retirar la compra o recurrir al envío a domicilio.

Nadie quiere hablar de confinamiento. Por el momento, al menos, no está previsto un regreso a una Fase 1. Pero sí es un hecho que habrá más medidas restrictivas. Y, como es habitual, lo que se establezca tendrá una vigencia de 15 días. A partir de allí, todos esperan que la curva de contagios finalmente baje y le dé un respiro al sistema de salud. Si no, inevitablemente, se deberá avanzar en decisiones más duras.

Respecto de las clases presenciales, la Ciudad mantiene su postura de que sea lo último que se toque. Aunque también modificaron un poco el pensamiento y no descartan volcarse hacia un esquema mixto entre presencialidad y virtualidad para continuar con el ciclo lectivo.

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Ayer, la Ciudad volvió a registrar un elevado número de contagios: 2.854. Mientras que el total en el país fue de 18.793, el número más alto para un lunes en lo que va del año. Además, se registraron 443 muertos. Y el número de ocupación de camas de terapia intensiva en el AMBA es del 76,2%.

Hay que recordar que ya el domingo el ministro de Salud porteño, Fernán Quirós, había señalado que “si con el segundo grupo de medidas no descienden los casos, hay que acompañar nuevas restricciones”. Como él mismo señaló, “así no hay manera de que el sistema de salud pueda seguir competente”. Esa es la preocupación principal y lo que llevó a que, finalmente, Ciudad ceda y vuelva a mostrarse más en sintonía con Nación.