Almirante Brown suma al Burrito Martínez: la historia de su padre como goleador del club
El delantero, de 36 años, ya se entrenó en La Fragata tras su paso por Almagro. El recuerdo de la patada de Leonel Vangioni, su relación con Lionel Messi y la vara alta que le dejó Puchi Martínez en los años 70.
Juan Manuel "Burrito" Martínez ya se entrena con Almirante Brown.
Juan Manuel «Burrito» Martínez acordó su llegada a Almirante Brown, donde ya realizó su primer entrenamiento con el plantel. El delantero, con pasado en Vélez Sarsfield y Boca Juniors, llega a Isidro Casanova de cara a una extensa temporada de la Primera Nacional. Seguirá una tradición familiar e intentará aportar su experiencia para pelear el ascenso a la elite: su papá dejó un enorme recuerdo en el club de La Matanza.
Burrito, de 36 años, arriba a la Fragata en condición de libre tras su paso por Almagro. Se espera que en las próximas horas firme el contrato con el club, hasta diciembre de este año.
A lo largo de su carrera, Martínez giró por el mundo: compartió vestuario con Lionel Messi, fue protagonista de la saga de Superclásicos coperos en los años 2014 y 2015 y hasta se consagró por duplicado en Japón, al otro lado del planeta.
La comparación con Brad Pitt
Fue en Colombia donde comenzó a encantar a los hinchas. No lo hizo solo dentro de la cancha, sino que la historia seguía fuera de ella en una ciudad futbolera que lo hacía sentir -según sus propias palabras- como Brad Pitt.
«Cúcuta es un lugar con mucha pasión por el fútbol, tanto entre los hombres como entre las mujeres. Con otros jugadores, teníamos que llamar a nuestras esposas para que nos sacaran del vestuario, porque no podíamos salir. Te agarraban, te tironeaban. Era una situación linda, pero en un momento llegaba a ser incómodo», recordó en una entrevista con Doble Mérito.
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Desde entonces, su carrera fue en ascenso. Se consagró en Vélez, donde conformó ataque con Santiago Silva y Maxi Moralez. También se recuerda su paso por otro club argentino: Boca.
La lesión que marcó su carrera
En la Bombonera recibió una patada que marcó su carrera en Boca. Ocurrió en el primer Superclásico de las semifinales de la Copa Sudamericana 2014. Leonel Vangioni lo golpeó a los 4 minutos del primer tiempo y lo sacó de la cancha.
«Claramente influyó en el presente y el futuro. Yo estaba llegando a la cresta de la ola, futbolísticamente hablando, de mi rendimiento en Boca. Estaba recuperando la confianza y la seguridad», lamentó años después, aunque descarta que haya habido mala intención.
Para Martínez significó un esguince de tobillo, del que tardó más de dos meses en recuperarse. Para Boca y River fue el inicio de una seguidilla de Superclásicos coperos iniciados en 2014, por los que hubo cuatro cruces mano a mano en torneos de la Conmebol hasta 2019.
El «amigo de Messi» que llega a Almirante Brown
Sergio Batista lo convocó para el amistoso entre Argentina y Portugal, en Ginebra en 2011. De un lado, Messi. Del otro, Cristiano Ronaldo. Ambos convirtieron un gol. El del rosarino sirvió para estampar, de penal, el triunfo 2 a 1 sobre la hora. La infracción se la habían cometido al Burrito, que llevaba solo 6 minutos en la cancha.
«Le mandé una camiseta mía de Vélez y él me mandó una de Barcelona. Coincidió su mejor momento con la mejor época mía», dijo sobre la pieza de museo que tiene en su casa.
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En la Selección también sumó convocatorias en el ciclo de Alejandro Sabella. Con la Pulga también participó de partidos a beneficio entre «Amigos de Messi» y «Resto del Mundo».
De Japón a Estados Unidos
El fútbol lo hizo viajar a destinos poco frecuentes o que recién ahora se están incorporando al gran escenario del deporte. Tiene un gran recuerdo de Japón, a pesar de no haber jugado nunca en su liga. A ese país llegó primero con el color blanco de Corinthians: levantó el trofeo del Mundial de Clubes, con un triunfo ante Chelsea. Volvió vestido de rojo y sumó otro premio: la Copa J.League-Sudamericana con Independiente, tras la obtención de la Sudamericana.
Hubo un corto paso por Arabia Saudita, en el Al-Shabab, aunque le costó integrarse a la vida cotidiana. En Estados Unidos tuvo mejor suerte. Con el Real Salt Lake City formó parte de una temporada de la MLS llena de estrellas. Quedó obnubilado con Andrea Pirlo. «Me flasheó cómo jugaba. Una vez, mientras estaba en la cancha, le conté todas las pelotas que tocó: todas fueron a sus compañeros. Me sorprendió que, a pesar de su edad, con la velocidad mental suplía la velocidad física», dijo sobre el italiano.
El círculo familiar del Burrito Martínez
En sus redes sociales comparte postales de sus entrenamientos. En los últimos tiempos intentó abrir un nuevo capítulo en Vélez, pero Mauricio Pellegrino desestimó la posibilidad de sumarlo al plantel.
Al Ascenso lo conoce bien. Recorrió las canchas con Agropecuario y con Almagro. A Almirante Brown, sin embargo, lo une un motivo más profundo: la sangre. A fuerza de goles, su papá dejó una huella: Carlos Martínez jugó en La Fragata entre 1975 y 1980. Apodado Puchi, Su nombre es Carlos Alberto Martínez. Apodado Puchi, fue un centrodelantero goleador que convirtió 49 tantos en 115 partidos. (0,42 de promedio). Y Nicolás, hermano de Juan Manuel, pasó en 2008 por el club.
Ahora le toca al Burrito. El conjunto de Casanova acaba de debutar con una goleada contra Chacarita, pero la historia en el torneo de los 37 equipos será larga.
