Atentado contra Cristina Kirchner: encuentran 100 balas entre los elementos que tenía el atacante en su casa de San Martín
La Policía allanó la vivienda de Fernando Sabag Montiel. Entre los elementos secuestrados, había dos cajas de proyectiles de calibre 9 milímetros. Las increíbles apariciones mediáticas del joven que intentó matar a la Vicepresidenta.
Fernando Sabag Montiel, quien gatilló al menos una vez un arma frente a Cristina Kirchner, vive en el partido de San Martín. Mientras el joven de 35 años permanece detenido por haber perpetrado un atentado contra la Vicepresidenta, la Justicia allanó su vivienda en el Conurbano bonaerense, donde encontró 100 balas de calibre 9 milímetros entre sus pertenencias.
Conocido como Tedi, el atacante está domiciliado en la calle Uriburu al 700. Se trata de un pequeño monoambiente que alquilaba Sabag Montiel, que fue requisado por la Unidad de Investigación Antiterrorista de la Policía Federal Argentina (PFA), por orden de la jueza federal María Eugenia Capuchetti, quien tiene a cargo la investigación por el tremendo episodio.
Fueron varios los elementos que se secuestraron en la casa, pero lo más contundente en el marco del atentado fue el hallazgo de los proyectiles, de 9 milímetros, que estaban en dos cajas de 50 balas cada una. A su vez, la Justicia determinó el Sabag Montiel no tenía licencia para portar armas, la credencial de legítimo usuario.
El primer domicilio al que asistieron las autoridades en busca de información sobre el atacante fue en el barrio porteño de Villa del Parque, sobre la calle Terrada, donde había vivido con sus padres años atrás. En la actualidad, esa vivienda está alquilada a inquilinos.
La dirección actual fue determinada por los investigadores a partir del aporte de un vecino suyo de Sabag Montiel, quien se lo informó a la Policía Bonaerense después de haberlo reconocido en las imágenes del hecho en el barrio de Recoleta.
El informante anónimo se presentó en la Comisaría 8° de la Bonaerense en San Martín. Dijo que no haber tenido problemas con Sabag Montiel y que sabía que el acusado de matar a la vicepresidenta era -según su testimonio- propietario de tres taxis radicados en la Ciudad de Buenos Aires. Incluso, el vecino aportó el número de teléfono del acusado.
En la casa también encontraron una computadora de marca HP, una libreta de enrolamiento a nombre de Jacobo Sabag, dos tarjetas SUBE, una tarjeta de UALÁ, tres hojas de calcos con tatuajes y un certificado de nacimiento brasileño a nombre de Viviana Beatriz Sabag.
El historial del atacante de Cristina Kirchner
Fernando André Sabag Montiel tiene 35 años y es de nacionalidad brasileña. En los archivos policiales se registra un antecedente policial de marzo del año pasado, cuando fue detenido en el barrio de Agronomía dentro de un auto sin patente y con una cuchilla de 35 centímetros de largo el 17 de marzo del 2021 por personal de la Comisaría Vecinal 15 A de la Policía de la Ciudad.
En los últimos tiempos, Sabag Montiel tuvo apariciones en medios de comunicación, interviniendo en móviles de televisión, en los que apareció emitiendo fuertes críticas al Gobierno nacional.
Si bien vivía en el país de manera permanente desde 1998, fuentes de la investigación explicaron que el último paso de ingreso al país fue del 2018. De acuerdo a la base de datos de Interpol, Sabag Montiel no tiene antecedentes en su país ni tenía pedido de captura activo.
El tremendo episodio, que fue calificado como un “intento de magnicidio”, ocurrió en la noche del jueves cuando, pasadas las 21, Cristina Kirchner llegó a su departamento de las calles Uruguay y Juncal, en Recoleta, donde desde hace días permanece un grupo de personas que rechaza el pedido de 12 años de prisión del fiscal Diego Luciani en la causa que investiga por corrupción a la vicepresidenta.
En ese marco, y mientras ella saludaba a la gente, un hombre se acercó a centímetros suyo, la apuntó con un arma de fuego y jaló el gatillo, pero la bala no salió. La pistola, una Bersa calibre 380, tenía cinco municiones en su cargador, pero se desconoce aún por qué no se accionó el disparo que podría haber provocado una tragedia.
Fue primero retenido por los militantes que estaban en la puerta del edificio de Recoleta donde vive Cristina Kirchner, en Juncal y Uruguay, y luego los efectivos de la Policía Federal que custodiaban a la Vicepresidenta lo detuvieron. Fue alojado en la Alcaidía de la Superintendencia de la PFA, a la espera de ser indagado por la jueza Capuchetti.
Fanático del death metal -una variante más oscura y acelerada del heavy-, quienes lo conocen contaron que solía esperar a músicos a la salida de los hoteles. Trabajaba vendiendo ropa con su madre en la calle Terrada, en Capital Federal, pero ella murió en 2017 y él se presentó en la Justicia para heredar un viejo automóvil. En ese domicilio continuó con un comercio y se mudó al domicilio que alquilaba en el Gran Buenos Aires.
A fines de agosto tuvo una aparición durante un móvil de Crónica TV, el vecino de San Martín en la que aparecía junto a una joven que decía ser su novia y que vendía copos de algodón de azúcar. Allí manifestó que ella había decidido renunciar a los planes sociales porque no estaba de acuerdo y que él opinaba que “la plata no se hace mágicamente, sino laburando”. Asimismo, criticó las “mafias de coperos peruanos”, con quienes reveló que había tenido peleas a golpes de puño.