Alfajor de milanesa, tortillas rellenas y cascada XXL de chocolate, las grandes tentaciones del bodegón de Ramos Mejía que es tendencia
Ubicado en Espora 251, el restaurante Sinfín abre todos los días y es necesario reservar para poder sentarse a comer. Todos los platos son para compartir entre dos, tres y cuatro comensales.
El alfajor de milanesa es el plato estrella del Bodegón Sinfín de Ramos Mejía.
Bodegones, bodegones y más bodegones. Hoy la gastronomía en Argentina se rige por el revival de este tipo de lugares para sentarse y disfrutar. Sin embargo, pocos son los que logran salirse del molde de lo tradicional. Pues bien, en Ramos Mejía el bodegón Sinfín se desmarca de todos y a fuerza de creatividad y excelentes producto hoy está en boca de todos.
La oferta de platos está pensada para ser abundante, sabrosa y de calidad, con una clara influencia de la cocina argentina tradicional de mediados del siglo XX y que hoy está más afianzada que nunca en los paladares argentinos.
Ramos Mejía: qué comer en el bodegón Sinfín
¿Qué diferencia a Sinfín de la mayoría de los bodegones? Dos «platos estrella». Uno es el alfajor de milanesa, que la rompe toda. Se prepara con cebollas caramelizadas, cerdo desmenuzado a la cerveza, provolone gratinado y tomates cherry confitados, creando una mezcla de sabores dignos de probar. Viene en para compartir y es el boom de la casa, que ya es tendencia en redes sociales.
Otro es la tortilla rellena. Pero rellena de milanesa. Una monstruosidad pantagruélica y deliciosa ideal para tres comensales de esos que saben cuando arrancan pero no cuando terminan.
La tortilla es protagonista y partenaire a la vez, es acompañante y a su vez se transforma en el centro de la experiencia gastronómica. El balance perfecto entre el crocante de la milanesa abrazada por queso delicioso y jamón del bueno, más la suavidad de la tortilla convierte a este plato en uno que más sale en Sinfín.
El fetuccini con salsa di mare, preparado con una combinación de fileto, ajo, vino blanco y un mix de mariscos, se lleva todas las palmas de los amantes de las pastas y pescados. Y si lo que se busca es disfruyar de buenas carnes, la parrillada es el gancho ideal, con buenos cortes (una delicia el asado banderita) y excelente achuras y embutidos.
Para los postres, Sinfín tiene una bestialidad solo apta para guerreros: la cascada de chocolate XL, un espectáculo cinematográfico que, estéticamente, cubre de chocolate derretido una gran variedad de frutas y delicias. Otro más: la banana split Sinfín, con helado de frutilla, chocolate y dulce de leche, también es uno de los postres elegidos por los comensales.
La historia del bodegón de Berazategui que ofrece platos creados por su fundadora hace 75 años
El restaurante está ubicado en pleno centro de Ramos Mejía, en Espora 251, abre todos los días y se puede reservar al 011 3851-0759. En realidad no es «se puede» sino «se debe». Es tal el furor que desató el local en los últimos tiempos, que hoy para sentarse a cenar en Sinfín hay que sacar turno.
Estas son algunas de las opciones de menú para compartir y pasarla excelente:
- Alfajor Milanesa Gordito: rellena de cebollas caramelizadas, cerdo desmenuzado a la cerveza, provolone gratinado, tomates cherrys confitados. Tamaño M (comen 2 y pican 3) $35 mil y Tamaño XXXL (comen 4 y pican 5) $45 mil
- Fetuccini con salsa di mare (fileto, ajo, vino blanco y mix de mariscos) viene en fuentones, individual o para compartir $9.200/$16.400. Las salsas desde $1.800 a $4.000
- Banana split Sinfin (bananas con helado de frutilla, chocolate y ddl) $12.000
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