Una alumna de un colegio de Quilmes llevó gas pimienta al aula y provocó un desastre
Ocurrió en el colegio Normal de Quilmes, en la mañana del miércoles, jornada en la que iban a desarrollarse las evaluaciones de la Prueba Aprender 2022. Hubo veinte estudiantes afectados que debieron ser atendidos por el SAME.
El miércoles por la mañana, una alumna de un colegio Normal de Quilmes, en el sur del Conurbano, provocó un desastre al tirar un gas pimienta en el aula justo en el día de evaluaciones de la Prueba Aprender 2022.
Se trata de una adolescente que concurre a las clases de la Escuela Secundaria N°20, que funciona en el edificio de la calle Mitre al 300, en pleno centro quilmeño. Según las primeras versiones, el incidente se produjo cuando se volcó el fluido irritante del gas pimienta, que afectó a casi la totalidad de sus compañeros.
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Los chicos presentaban picazón en la garganta y ardor en los ojos, lo que generó un momento de desesperación por el cual las autoridades del colegio debieron llamar al SAME, que envió tres ambulancias para atenderlos. En total fueron unos veinte alumnos afectados.
La sospecha de un artilugio en el colegio Normal de Quilmes
Desde el colegio aún no se expresaron sobre lo sucedido y se espera saber si la chica que llevó el gas pimienta al aula recibirá una sanción disciplinaria. También se desconoce el motivo por el que lo hizo, y si el vuelco de la sustancia fue intencional o si se trató de un accidente.
El hecho de que sucediera el mismo día de la Prueba Aprender hace sospechar de si se trató de un artilugio para eludir esta instancia de evaluación, que en los últimos años ha generado rechazo en el alumnado.
En 2016, el edificio llegó a ser tomado por los integrantes del centro de estudiantes del nivel secundario y superior con el argumento de que «creemos que va totalmente en contra de lo que es la educación pública por las formas en las que se toma, por las medidas que se van a tomar y los fines que tiene. Un múltiple choice de nosotros no dice nada, es un tateti. No se ve cómo llegamos al resultado. Adivinando nada más me puede ir bien como me puede ir mal».
A su vez, habían reclamado que «los compañeros de los cursos plantean por qué le pagan a cada maestro aplicador y por qué pagaron tanto a multinacionales para hacer estas pruebas teniendo en las escuelas hongos, goteras, ventanas y puertas rotas, baños sin agua».
El establecimiento educativo, que tiene alrededor de 1500 alumnos, también ha padecido las falsas amenazas de bomba, siendo uno de los años más difíciles el 2017, cuando las autoridades revelaron que en un lapso de 30 días recibieron más de 30 llamados telefónicos que obligaban a interrumpir las clases entre dos y tres veces por día por el operativo de evacuación que debía realizarse por protocolo.
Otra situación llamativa por la que debió ir el SAME
En mayo de este año, ambulancias del SAME debieron acudir al Normal de Quilmes luego de que cuatro alumnas se desmayaran, prácticamente en simultáneo. Lo que trascendió es que una de ellas tendría problemas cardíacos que motivaron su descompensación, y otra habría sufrido una crisis de nervios por una prueba que debía rendir esa mañana.
Sin embargo, el hecho de que hayan sido las cuatro las que se desvanecieron reforzó la sospecha que también circuló y que indicaba que habrían ingerido brownies de marihuana antes de ingresar al aula. Fueron atendidas por los médicos y se encontraron rápidamente fuera de peligro.