Los 60 años de Jorge Burruchaga: el campeón formado en Sarandí que lanzó vinos para ayudar a los héroes de México 86
Surgido de Arsenal, ídolo en Independiente y figura en el segundo Mundial ganado por la Selección, el crack impulsa un emprendimiento como una fuente de ingreso extra para los integrantes del equipo de Bilardo.
Jorge Burruchaga es uno de los nombres grabados a fuego en la historia del fútbol argentino. Sin liderar estadísticas de partidos jugados ni de goleadores con la albiceleste, Burru anotó uno de los goles más gritados: el de la final a Alemania en México 1986.
Alejado del fútbol desde hace unos meses, hoy su partido más importante lo juega desde las vinotecas, con “Héroes” y “La Final”, los dos vinos que presentó junto a Oscar Alfredo Ruggeri y otros compañeros campeones.
Jorge Burruchaga, de la albiceleste a la vinotinto
La idea de hacer algo juntos fue de Ruggeri, que desde hacía tiempo impulsaba un proyecto con su amigo Jorge del Valle, gerente de la bodega Mendoza Vineyards en Latinoamérica. Luego de eso, fueron Jorge Burruchaga y Ricardo Giusti -catalogados por el ex capitán de la Selección como “los más conocedores de vino”- los primeros en sumarse a la iniciativa.
A ellos se les fueron agregando otros compañeros y entre todos, tras probar las muestras enviadas, se decidieron por un 100% Malbec y un Blend de tres varietales: 50% Cabernet Franc, 40% Cabernet Sauvignon y 10% Petit Verdot. El Malbec La Final tiene en su etiqueta a los 11 jugadores que disputaron el partido contra Alemania, en el momento del himno; el Blend Héroes muestra la Copa y, detrás, el 86.
El objetivo principal de esta idea es ayudar a aquellos campeones mundiales del 86 (y a sus familias) con algún tipo de necesidad. “Héroes” lleva el nombre de todos los que participaron de aquella gesta, con Diego Armando Maradona siempre en el recuerdo de todos. Los vinos ya fueron presentados en Mendoza, Buenos Aires y otras provincias, además de Estados Unidos y Alemania.
El Burru de Sarandí
Nacido en Entre Ríos un 9 de octubre de 1962, Jorge Burruchaga comenzó su carrera futbolística en las inferiores de River Plate hasta que lo dejaron libre a los 13 años. Tras un intento fallido en Quilmes, se fue a probar a Arsenal de Sarandí. Allí debutó a los 17 años. Rápidamente llamó la atención de César Luis Menotti, que lo convocó para el seleccionado juvenil. Paralelamente, la dupla Oscar López-Oscar Cavallero solía dejarlo de lado.
El Arse lo disfrutó poco: entre las convocatorias (Burru jugó el Mundial Sub 20 de 1981, en Australia) y las veces que era marginado de la citación o iba al banco, no llegó a la media centena de encuentros antes de ser vendido a Independiente, club donde alcanzó estatura de ídolo.
Goleador de finales
La promesa de Sarandí ya era una realidad: Burru llegó a un Independiente que venía de una pequeña sequía luego de la etapa más gloriosa de su historia. Con Burruchaga en la cancha, al lado de glorias de la institución como Enzo Trossero, Claudio Marangoni y el irrepetible Ricardo Bochini, el Rojo se quedó con el Metropolitano 1983, la Libertadores 1984 (gol suyo a Gremio en la final) y la Intercontinental de ese año, con el 1-0 al Liverpool en Japón.
Su gran momento en Independiente lo ratificó en la Selección. Con la experiencia anterior, Carlos Bilardo lo convocó desde el principio y lo llevó a la Copa América de 1983. En el medio estuvo su venta a Francia, para jugar en el Nantes, pero nunca se puso en duda su participación en México 1986.
Jorge Burruchaga jugó los siete partidos desde el arranque y siempre fue una pieza clave para el equipo. Su momento de gloria llegó en la final. Recibió el pase de Diego y esa corrida, que parecía interminable, terminó con su segundo gol en el Mundial y el 3-2 definitivo en lo que sería el partido de su vida. El entrerriano también jugó los siete partidos de Italia 90, aunque el desenlace fue diferente.
El escándalo de Burruchaga en Francia
Burru hizo carrera en el Nantes: en su primer año fue segundo con el PSG, donde llegó a jugar 140 partidos. En las siguientes temporadas fue perdiendo protagonismo. Su último año en Francia lo jugó en el Valenciennes: su desempeño fue muy bueno aquel 1993, con 10 goles en 32 partidos, pero terminó con una gran mancha.
El Olympique de Marsella estaba cerca de lograr el pentacampeonato y en una de las últimas fechas enfrentaba al casi descendido Valenciennes. Dos jugadores del OM -entre ellos Didier Deschamps, capitán y DT campeón del mundo con Francia- se contactaron con Burru y dos de sus compañeros para pedirles “que fueran para atrás”.
El escándalo no tardó mucho en salir a la luz y terminó con la quita del título para el Olympique, que tampoco pudo defender la Champions League que conquistó en esa misma temporada 1992-93. Para Burru el castigo fue grande: dos años sin jugar, aunque luego se lo redujeron a 18 meses.
Vuelta al Rojo y etapa como DT
Durante el parate se entrenó en Avellaneda y en su retorno al fútbol se quedó con la Supercopa y la Recopa 1995. Jugó unos años más y culminó su carrera de jugador en 1998. No pasó mucho tiempo entre que colgó los botines y se puso a dirigir: arrancó en Defensa y Justicia en la temporada 1999/00, sin grandes resultados.
Burru pasó por varios equipos pero nunca logró destacar como DT. En Primera estuvo en Arsenal (fue el técnico que lo ascendió), Estudiantes, Independiente, Banfield, Atlético de Rafaela y Sarmiento. Fue manager de la Selección durante dos años y luego ocupó el mismo cargo en el Rojo, al que renunció a principios de 2021.
Los pibes deportistas
Los hijos de Jorge Burruchaga siguieron los pasos del padre. Mauro, el más grande, lo imitó y fue por el camino de la redonda número 5: hizo inferiores en River, tuvo un paso por el Calcio italiano y a los 24 años juega en el Albion FC, uno de los decanos del fútbol uruguayo que recién en 2018 dio sus primeros pasos en el profesionalismo.
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Román tiene 20 años y está iniciando su carrera como tenista. En 2021 ganó su primer torneo ITF y se metió entre los mejores 700 tenistas del mundo. Hoy ocupa el puesto 334 del ranking ATP, está 28º entre los argentinos y 31º entre los sub-21. Además aparece 194º en el ranking de dobles, modalidad en la que ya obtuvo un Challenger ATP.