Covid-19: refuerzan la dotación de oxígeno de hospitales del GBA con generadores portátiles

El Ministerio de Salud bonaerense completó la distribución de la primera tanda de 300 concentradores de oxígeno y continuará con la entrega de otros 600 equipos que serán distribuidos en hospitales, Unidades de Pronta Atención (UPA) y centros extrahospitalarios. Según se informó oficialmente, se trata de un total de 3 mil concentradores adquiridos, de los que ya se recibió la primera tanda de 900 equipos como parte de un plan de contingencia para ampliar la producción de oxígeno desde el sector público en el marco de la segunda ola de la pandemia.

La subsecretaria Técnica, Legal y Administrativa del Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires, Victoria Anadón, y el jefe de Gabinete de la Dirección Provincial de Hospitales, Agustín López, encabezaron la entrega de los equipos que proporcionan oxigenoterapia a pacientes en concentraciones más altas que las del aire ambiente y mantienen estable el nivel de oxígeno en la sangre. «Finalizamos la entrega de 300 y recibimos 600 más que ya se comienzan a repartir en hospitales provinciales, hospitales municipales -con quienes también colaboramos-, UPA y centros extrahospitalarios que estamos abriendo y acondicionando para poder soportar la tensión en el sistema de salud que implica esta segunda ola», dijo Anadón.

Por su parte, López explicó que el reparto de los concentradores se realiza en forma equitativa teniendo en cuenta la densidad poblacional en donde se encuentran emplazados cada uno de los hospitales. «El criterio de distribución permite que todos los efectores puedan recibir esta tecnología para aumentar su capacidad en términos de tratamientos y optimizar el consumo de oxígeno para los pacientes que así lo requieran por su nivel de gravedad», afirmó el funcionario.

En tanto, el director provincial de Hospitales Bonaerenses, Juan Riera, detalló que estos nuevos dispositivos son individuales y tienen un suministro infinito: «Implican una tecnología que permite tomar el aire ambiente y administrarlo a los pacientes a mayores concentraciones de oxígeno para garantizar el acceso a este recurso indispensable en este contexto sanitario».

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El equipamiento entregado en la primera etapa fue recibido por los directores ejecutivas de 26 hospitales provinciales: Mi Pueblo, de Florencio Varela; Fiorito, de Avellaneda; López, de Lanús; Iriarte, de Quilmes; Wilde, de Avellaneda; Eurnekian, de Ezeiza; Perón, de Avellaneda; Evita, de Lanús; Gandulfo, de Lomas de Zamora; Meléndez, de Almirante Brown; López y Planes, de General Rodríguez; Mariano y Luciano de la Vega, de Moreno; Carrillo, de Tres de Febrero; Güemes, de Morón; Bocalandro, de Tres de Febrero; Grierson, de Presidente Perón; Balestrini, de La Matanza; Paroissien, de La Matanza; Evita Pueblo, de Berazategui; y Belgrano de San Martín, entre otros.

Los concentradores son equipos eléctricos que cuentan con una turbina interna y un procesador que toman el aire ambiente (que ya tiene una presión de oxígeno del 21%) y concentran el oxígeno a una fracción cercana al 90%. De esta manera, pueden ser utilizados para administrar el oxígeno a pacientes que requieren, como máximo, un flujo cercano a 5 litros por minuto o con otros concentradores, hasta 7 y 8 litros por minuto. A diferencia de los tanques y de los sistemas de oxígeno líquido, que necesitan de un reemplazo y una recarga, estos equipos purifican y concentran el oxígeno del aire que respiran para brindarles un flujo con hasta un 90% de este elemento.

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El plan de contingencia del Gobierno bonaerense para ampliar la producción de oxígeno desde el sector público incluye la instalación en las próximas semanas de 17 plantas móviles de oxígeno en las UPA y una en Ensenada, que ya está en funcionamiento. Además, ya están produciendo las plantas en el Hospital San Roque de Gonnet, que se sumó a la del Iriarte de Quilmes, que volvió a estar activa el año pasado. A estas acciones, se le incorpora la compra de 2 mil tubos para fortalecer el stock en los hospitales.

Cómo funciona un concentrador de oxígeno

El funcionamiento de estos equipos no es muy complejo, pero es importante operarlos adecuadamente, limpiarlos y darles el mantenimiento preventivo que necesitan, como el cambio y lavado de los filtros. El generador de oxígeno extrae el aire del ambiente que ingresa al concentrador. Consiste en aproximadamente 20% de oxígeno, 78% de nitrógeno y 2% de otros gases.

El aire se introduce en los cartuchos que contienen un material llamado zeolita que captura nitrógeno a través de un proceso llamado absorción por cambio de presión, concentra así el oxígeno para dejar un volumen de aproximadamente 90% en el aire. El flujo de oxígeno pasa a través de filtros de purificación que, a su vez, son los encargados de eliminar los microorganismos y partículas flotantes en el aire para ofrecer un flujo purificado que no afecte la salud.

El oxígeno concentrado se entrega al paciente a través de una cánula nasal. A diferencia de las máscaras de oxígeno, que desperdician más del 50% del flujo, las cánulas aseguran una entrega integral y directa. Por ello, pueden usarse inclusive cuando se duerme. Parte del oxígeno se envía a través de los cartuchos para ayudar a eliminar el nitrógeno y otros gases que luego son expulsados a la atmósfera.