Aunque quiso camuflarse, cayó el joven acusado de fusilar a su pareja delante de su hijo en González Catán: cómo lo atraparon
A Brian Alexis Baigorria (30) lo buscaron durante casi dos semanas por el femicidio de Verónica González y la Policía terminó capturándolo este martes en la zona de Virrey del Pino. Había cambiado su aspecto para no ser detectado.
Brian Alexis Baigorria (30) pasó casi dos semanas como prófugo de la Justicia: lo buscaban desde el mediodía del jueves 23 de febrero por el femicidio de Verónica González (27), quien murió de un tiro en la nuca en su casa de González Catán y delante de su hijo de 8 años de edad. Está señalado como el autor del crimen, dado que era su pareja y se pudo comprobar que estaba con ella en el momento de su muerte.
Vecinos habían confirmado que lo habían visto salir de la vivienda que compartían en la calle Coronel Eugenio Garzón al 6800 y por ello, la fiscal Karina Licalzi, titular de la Unidad Funcional de Instrucción Temática de Homicidios de La Matanza, había pedido una orden de captura y el relevamiento de las cámaras de seguridad de la zona para tratar de establecer el recorrido que hizo luego del femicidio y así poder localizarlo.
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Sin embargo, Baigorria se mantuvo oculto 12 días. Para la Justicia, no había ido muy lejos, por lo que policías de la zona habían montado guardias esperando interceptarlo. Fue este martes cuando agentes que se encontraban en la vía pública detectaron a un joven caminando por la esquina de la Ruta 3 y Comercio, en Virrey del Pino, y quisieron identificarlo sospechando que podía tratarse de él. Aunque se había teñido el pelo de rubio (siempre lo había tenido negro), no opuso resistencia y reconoció quién era.
Qué elementos lo incriminan en el femicidio de González Catán
El día en que Verónica González fue hallada muerta en su casa con un tiro en la nuca, fue el propio Baigorria, que tiene antecedentes por robo y resistencia a la autoridad de 2011, quien llamó a los familiares de ella para avisarles que «le había pasado algo», antes de darse a la fuga. Cuando llegaron, el hijo de la joven también lo acusó.
Alejandra, la tía de Verónica, contó que cuando el nene «me ve me dice ‘tía, te tengo que contar algo’ y ahí me dice que su mamá y Brian empezaron a discutir, pero como él estaba mirando los dibujitos no le dio importancia. Y luego que Brian sacó un revolver y le pego un tiro en la nuca a su mamá. Ante el ruido, él se asusta y ve como su mamá cae al piso. Después lo amenazó diciéndole que lo iba a correr con el cinto porque la había lastimado a su mamá».
Incluso llegó a revelar que el nene «fue a buscar papel higiénico porque me dijo que así lo vio en una película que se cura y se lo puso a su mamá para que no sangre». Verónica, además, era madre de una nena de 9 años y se había alejado de su familia por su relación con Baigorria, que al ser capturado se responsabilizó por el femicidio. De todas formas, esa declaración no tiene validez legal y deberá hacerlo en indagatoria ante la fiscal de La Matanza.
Guillermo González, su padre, confesó que sospechaba que ella sufría episodios de violencia de género pero «las veces que le pregunté me lo negó. Ella nunca tuvo marcas, ni moretones, pero yo intuía que algo pasaba y cuando yo le preguntaba ella me negaba todo». Y se refirió a Baigorria como una «lacra», manifestando que «no soy un cobarde como él para sacarle la vida de atrás como a mi hija, pero quiero tenerlo cinco minutos en el calabozo, cara a cara. Yo después pago lo que tenga que pagar».