El largo viaje de Alemania a Valentín Alsina del telescopio que pidió traer al país un Presidente
La Biblioteca Barrial Sarmiento cuenta con un equipo Carl Zeiss de 11 pulgadas que llegó especialmente desde Europa en una gestión que involucró a Marcelo T. de Alvear. Allí, desde hace décadas dan un taller gratuito de astronomía.
El telescopio Carl Zeiss de 11 pulgadas que fue hecho en Alemania y llegó a Valentín Alsina (Fotos Diego Arranz).
A veces basta con sólo mirar para arriba y descubrir un nuevo mundo. En Valentín Alsina, partido de Lanús, existe un sitio único en el que esa observación tiene un plus y fue fundado por un puñado de obreros idealistas que allá por 1918 decidió darle forma a lo originalmente fue una sociedad de fomento y luego pasó a llamarse Biblioteca Popular Sarmiento.
Es que el edificio de cinco pisos ubicado en la avenida Juan Domingo Perón 3065, en pleno centro de la localidad y a 12 cuadras del Puente José Félix Uriburu, conocido en el barrio y fuera de él como Puente Alsina; tiene la particularidad de contar en su planta alta con un observatorio cuya pieza más importante es uno de los telescopios más potentes del país.
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Se trata de un equipo Carl Zeiss de 11 pulgadas que fue traído al país especialmente desde Europa y cuya llegada al sur del Conurbano incluye la participación de un Presidente de la Nación, Marcelo T. de Alvear, y un recorrido por tierras argentas que tiene su propia historia.
«Él estaba en París, Francia, cuando lo eligieron para suceder a Hipólito Yrigoyen. Un amigo suyo era astrónomo del observatorio de esa ciudad y Alvear se deslumbró a tal punto con el tema que decidió comprar un telescopio, por lo que se debió encargarlo a Alemania”, contó a Zonales Gabriel Pesaresi, quien actualmente tiene a su cargo las actividades que se realizan en el observatorio, tomando como propias las palabras de Osvaldo Calvo, ideólogo de que la movida llegará a Valentín Alsina.
Instalado en Don Torcuato, fue la estrella de una reunión en la que el jefe de Estado recibió a sus amigos, todos de alto nivel económico. Varios de ellos se entusiasmaron con eso de mirar para arriba con otra precisión y encargaron alrededor de 30 aparatos que de a poco fueron llegando a Argentina.
“El dueño de uno de esos telescopios, quien vivía en las Barrancas de San Isidro, murió al poco tiempo. Como su familia no sabía qué hacer con ese gran aparato, decidió venderlo a un matrimonio que estaba en Moreno y que había visto el aviso en el diario. Pero cuando el fletero llegó con el inmenso telescopio a la casa, que tenía un amplio jardín, el hombre se quería morir, y la mujer lo quería matar”, continuó Persaresi con el relato histórico que tantas veces escuchó de su mentor.
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Es que fue justamente Calvo, quien había llegado a la Biblioteca Popular Sarmiento como lector en los años ’30 y con el paso del tiempo pasó a ser uno de los puntales de distintas iniciativas en la sede de Valentín Alsina, el promotor de que el sitio contará con un observatorio propio. Y qué mejor para ello que conseguir el Carl Zeiss que había deslumbrado hasta a un presidente.
«Fueron a buscarlo con Miguel Sbaglia a mediados de los ’80 con la idea de sumarle un atractivo extra a una entidad popular barrial como la nuestra que se destaca por las amplias propuestas culturales que genera», expresó a este medio Gabriel.
Astronomía en Valentín Alsina
Desde el año 1999, Pesaresi brinda un taller de astronomía gratuito en la Biblioteca Popular Sarmiento que tiene lugar los viernes, de 19 a 20.30, de marzo a diciembre. Allí cuentan con un promedio de 35 alumnos a quienes se les enseña tanto a nivel teórico como práctico.
«Tratamos de enseñar los conceptos básicos de formación de estrellas, galaxias y cosmología. Además, dentro del taller les explicamos cómo utilizar el telescopio para poder conocer mejor nuestro cielo. Y también recibimos visitas programadas de escuelas primarias, secundarias, profesorados, universidades, donde damos una charla sobre algún tema específico», contó el vecino de Valentín Alsina.
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Luego, Gabriel completó: «Junto a Roberto Pandonfeli buscamos impulsar en el observatorio el concepto de hacer ciencia ciudadana. Lo que buscamos es tratar de producir conocimiento científico reduciendo la brecha entre la ciencia y la sociedad. Y para eso apostamos a un modelo democrático de construcción de conocimiento y, desde ese lugar tratamos de abordar y hacer visible la problemática ambiental».
«Tratamos de hacer visible lo que está ocurriendo con la Tierra, por eso aprovechamos las charlas que brindamos para explicar el funcionamiento de las atmosferas de los planetas. Eso, por ejemplo, ayuda a comprender mucho mejor qué ocurre con los gases de efecto invernadero. Es nuestro pequeño aporte a tratar de hacer un mundo habitable no sólo hoy, sino también a largo plazo», cerró Pesareci.
