La Provincia acelera el programa para construir 12.000 plazas carcelarias en el Conurbano
El gobernador Axel Kicillof puso en marcha el Plan de Infraestructura Penitenciaria: en dos años habrá nuevas cárceles y alcaidías en el Gran Buenos Aires. Habrá una inversión de $ 18.000 millones aportados por la Nación.
El gobernador Axel Kicillof puso en marcha el Plan de Infraestructura Penitenciaria en el cual se enmarcan las intenciones del Gobierno provincial de ampliar el sistema carcelario para empezar a resolver los problemas que vienen desde hace años vinculados a la superpoblación de detenidos en comisarías y la precariedad y hacinamiento de los reos en las unidades penales de todo el territorio bonaerense.
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En ese sentido, el mandatario encabezó este miércoles la puesta en marcha de 20 obras que se presentaron en un acto realizado en Merlo, en el oeste del Conurbano. Allí, Kicillof firmó un convenio con el Estado nacional que permitirá impulsar el proyecto.
El acuerdo también fue suscrito por el ministro de Obras Públicas de la Nación, Gabriel Katopodis, y el ministro de Justicia y Derechos Humanos bonaerense, Julio Alak. Además, participaron el ministro del Interior nacional, Eduardo «Wado» de Pedro, el intendente de Merlo en uso de licencia, Gustavo Menéndez; y la jefa comunal interina, Karina Menéndez. También estuvieron la ministra de Gobierno bonaerense, Cristina Álvarez Rodríguez; el jefe de Asesores del Gobernador; Carlos Bianco; legisladores e intendentes de la provincia.
El gobernador remarcó que al asumir en 2019 había encontrado «muchas situaciones de crisis» y que una de las más graves «estaba en su sistema penitenciario, que contaba con la mayor superpoblación de su historia».
En esa línea, Axel Kicillof agregó: «Se habían construido solamente 1.100 plazas en cuatro años y los internos estaban en huelga de hambre porque no se les garantizaban los alimentos y la medicación». Y concluyó en que «los problemas estructurales de la Provincia no se van a solucionar en un día, pero nos propusimos dar la discusión para encontrar en conjunto una salida. Estamos haciendo realidad el programa de infraestructura penitenciaria más grande de la historia de la provincia de Buenos Aires».
Así es el Plan de nuevas cárceles en el Conurbano
El programa tiene previsto, entre 2022 y 2023, completar los 12.200 nuevos cupos para alojar presos en las instalaciones que se habían comenzado a construir hace dos años. Sólo en Merlo se emplazarán las Unidades Penitenciarias N°59 y 60 y una alcaidía departamental (un espacio de alojamiento temporario para detenidos), que demandarán una inversión de $8.650 millones y agregarán 2.296 cupos.
En total, el financiamiento del Gobierno nacional será de $ 18.000 millones e incluirá también la construcción de 3 unidades penitenciarias en Moreno, Mercedes y Florencio Varela; y alcaidías en Moreno, Tres de Febrero, Tigre, La Plata, Hurlingham, Morón, La Matanza, Ezeiza, Lanús, Quilmes, Berazategui, Almirante Brown, Lomas de Zamora y Escobar. Las obras incluirán también espacios educativos y de formación laboral para mejorar la reinserción social y bajar la tasa de reincidencia del delito.
Julio Alak manifestó que «la experiencia nos indica que para bajar la reincidencia es fundamental que los internos puedan sostener el vínculo con sus familias, ya que de esa forma preservan el interés por formarse y continuar estudiando. La Provincia cuenta hoy con 24 mil plazas construidas a lo largo de 200 años y, con este programa, vamos a construir 12 mil solo en cuatro años».
Para Karina Menéndez, «con estas obras podremos brindarles a los detenidos la dignidad que merecen, la salud y el bienestar que les va a permitir también sostener el vínculo con sus familias mientras cumplen sus condena». Y añadió que «este programa también impactará en lo laboral, ya que será una fuente de trabajo genuino para los vecinos de Merlo».
Finalmente, Kicillof cerró: «Estamos llevando adelante una verdadera transformación del sistema penitenciario, para que las cárceles dejen de implicar una tortura y se conviertan en un camino hacia la reinserción social».