Procesaron al Beto Márcico: quién es el ex arquero de Boca que lo denunció por estafas
El ídolo Xeneize podrá seguir en libertad mientras avanza la causa, pero fue embargado junto a su hijo Lucas por 1,8 millón de dólares y dos millones de pesos. La investigación tiene que ver con irregularidades en la venta de departamentos.
El Beto Márcico fue procesado por la Justicia junto a uno de sus hijos.
La Justicia procesó en las últimas horas al Beto Márcico (61), ex futbolista y uno de los máximos ídolos de la historia reciente de Boca, y a su hijo Lucas (33) por vender departamentos de un emprendimiento inmobiliario a terceros que ya tenían dueños. Uno de los presuntos damnificados y quien entabló una de las denuncias es el ex arquero Martín Herrera (51), quien fuera compañero del «10» en el Xeneize.
Los Márcico fueron procesados por «defraudación por desbaratamiento de derechos acordados y por estelionato (vender como propio un bien ajeno)», delitos que contemplan penas de hasta seis años de cárcel. De todas formas, ambos permanecerán en «libertad provisional», aunque con embargos de 1,8 millón de dólares y dos millones de pesos.
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El fallo fue firmado por el juez Fernando Caunedo, tras una larga investigación a cargo del fiscal Andrés Madrea. Según está determinado en la causa, Alberto José y Lucas Alberto Márcico acordaron la venta de 16 departamentos y seis cocheras con Marta Zulema Rondinella y de cinco departamentos y un local comercial con el ex futbolista Martín Herrera, en tres edificios que estaban construyendo en Capital Federal.
El ex arquero fue compañero del Beto Márcico en Boca, entre 1992 y 1994, donde se forjó una relación de amistad que culminó con la denuncia de estafa. Herrera le reclama por los cinco departamentos, dos ubicados en Franklin D. Roosevelt al 3600 y tres en un edificio de la calle Migueletes al 1200, que le compró entre noviembre y diciembre de 2012 y nunca recibió.
El ex futbolista de Ferro, Boca y Gimnasia, además del fútbol francés y la Selección Argentina, argumentó que, en realidad, los reclamantes no tenían intenciones de poseer las propiedades sino que firmaron boletos de compraventa como una suerte de garantía del préstamo que le habían otorgado para financiar las obras. «Se trató de una operación financiera y no inmobiliaria», explicó en su momento el Beto Márcico.
«Si Alberto José Márcico interpreta que firmó esos boletos de compraventa en garantía del préstamo de dinero tampoco debió disponer libremente de los inmuebles afectados a esa garantía. La parte compradora abonó la totalidad del precio de cada uno de los inmuebles adquiridos en construcción, sobre lo que no se ha dado ninguna explicación razonable que justifique la enajenación posterior de esos inmuebles a terceros», resumió la resolución del juez Caunedo, titular del Juzgado Nacional en lo criminal y lo Correccional N°39.
En la investigación se verificó que de los 16 departamentos adquiridos por Rondinella, 10 fueron vendidos posteriormente a distintas personas mediante otros boletos de compraventa, entregando la posesión de los inmuebles a esos otros adquirentes.
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«Quien celebra un boleto de compraventa con todas las formalidades exigidas y cobra la totalidad del precio por un departamento que está construyendo ha concedido un derecho de propiedad en expectativa sobre un bien inmueble, a perfeccionarse con la tradición de la cosa o entrega de la posesión y la formalización de la respectiva escritura traslativa de dominio», resolvió el juez.
«En suma, Alberto José Márcico y Lucas Alberto Márcico habrán de responder como coautores materiales del delito de defraudación por desbaratamiento de derechos acordados cometida en forma reiterada, en un total de 22 ocasiones, siendo que en 15 de ellas se verifica concurso ideal con el delito de defraudación por estelionato también reiterada», sostuvo la resolución.
La vida del Beto Márcico luego de dejar el fútbol
El Beto Márcico abandonó la actividad profesional en 1998, luego de un exitoso paso como jugador por Ferro, Toulouse de Francia, Boca Juniors y Gimnasia y Esgrima de La Plata; además de haber disputado varios partidos en la Selección.
Cuando dejó el fútbol, se convirtió en un empresario dedicado al rubro inmobiliario e integró diversas empresas desde mediados de la década pasada. Según el Boletín Oficial, su nombre y el de su hijo Lucas están asociados a firmas como Los Lofts De Godoy SA o Edificio Migueletes 1286 SRL.
A esta última empresa, de la cual el Beto Márcico es parte desde 2006, se le decretó la quiebra en noviembre de 2018 en una decisión tomada por el Juzgado Comercial N°25, con una intimación para que le entregue su contaduría y sus papeles al síndico responsable. Datos de la AFIP revelan años de aportes impagos a empleados y rescisiones por falta de pago de una ART.
Edificio Migueletes es, además, el eje de una de las principales acusaciones contra el ex ídolo boquense porque tiene que ver con la construcción de uno de los edificios por los que se presentaron denuncias.
La ruptura de la relación entre el Beto Márcico y Herrera
Martín Herrera, quien atajó en Boca, Ferro, Estudiantes de La Plata y Alavés de España, entre otros equipos, conoció al Beto Márcico en el Xeneize. Allí forjaron una amistad que perduró hasta que la supuesta estafa protagonizada por el «10» en perjuicio del «1» terminó con todo.
En la actualidad, el ex arquero se desempeña como subsecretario de Deportes del gobierno de Río Cuarto, donde trabaja junto con otro ex deportista como Agustín Calleri, presidente de la Asociación Argentina de Tenis y secretario de Deporte y Turismo de Río Cuarto.
