Atrapan al cerebro de una banda que realizaba estafas clonando tarjetas de débito y de crédito

Su modus operandi hace tiempo ya había traspasado los límites de la General Paz. Junto con la banda que él encabezaba, había cometido delitos en Rosario y en la provincia de Córdoba, aunque en el último tiempo operaba en el norte del Gran Buenos Aires. Y, finalmente, el cerebro del grupo que se dedicaba a la clonación de tarjetas de débito y crédito, identificado como Lucas Parussi Camacho Nunes, fue detenido por la Policía de la Ciudad tras una investigación de nueve meses.

La causa fue encabezada por el fiscal de Vicente López, Alejandro Musso, junto a su equipo de colaboradores. El falsificador de tarjetas, un brasileño de 23 años, cayó luego de ser descubierto realizando su actividad delictiva en un banco de Vicente López. Y fue aprehendido en su domicilio de Palermo, en CABA.

“El 23 de septiembre pasado, poco antes de las 18, Parussi Camacho Nunes se hizo presente en una sucursal del Banco BBVA situada en avenida Maipú y Alsina, en Vicente López. Y utilizando una técnica de manipulación informática, y con la clara finalidad de defraudar a otra persona, procedió a instalar un dispositivo para clonar tarjetas en el cajero automático de dicha entidad”, se informa en el expediente judicial. Y su accionar quedó registrado por las cámaras de seguridad del banco.

Y se agrega que “luego, a las 19.27, en ese mismo cajero automático, Ricardo C. (tal como fue identificada la última víctima del delincuente) insertó su tarjeta del Banco de Nación Argentina, sobre la cual el imputado obtuvo los datos de la banda electromagnética y el código PIN”.

La detención de Parussi Camacho Nunes se produjo luego de un operativo realizado en su departamento de Scalabrini Ortiz al 1500, en Palermo, y se secuestraron 12 notebooks, dispositivos utilizados para copiar las bandas magnéticas de las tarjetas, las micro cámaras que filman el momento en que las potenciales víctimas ponen la clave en los cajeros automáticos y plásticos en blanco.

Además, en su domicilio los detectives policiales encontraron las llaves de un Volkwagen Voyage nuevo, una factura de una póliza de seguro de ese vehículo a su nombre y un recibo del pago de una cochera.

El arma del líder de la banda que clonaba tarjetas

El estacionamiento donde el sospechoso estacionaba el auto está ubicado en Armenia al 1900. El auto fue secuestrado y llevado a una Unidad Funcional de Instrucción (UFI) en el oeste del partido de Vicente López. Y cuando abrieron el Voyage encontraron una pistola Glock calibre 40 con la particularidad de que contaba con un dispositivo para disparar de forma continua, como lo hace una ametralladora.

Las fuentes judiciales contaron que la colaboración e información brindada por representantes de Red Link fue clave para avanzar en la investigación. Precisamente desde un cajero automático de esa firma es que el estafador hizo una transferencia de 4.250 dólares desde la cuenta de Ricardo C. hacia otra cuenta abierta en Rosario.

Esa transacción se realizó a las 10.20 del 6 de octubre pasado, en un cajero automático de una sucursal del Banco Credicoop ubicado en la avenida Corrientes al 1800, en el barrio de Balvanera. Y no fue la única estafa que sufrió Ricardo C. ese día: a las 10.55 el sospechoso extrajo $9.000 de un cajero automático de avenida Córdoba al 1500.

Según detallaron los investigadores, el sistema con el que se realiza el clonado de las tarjetas es colocado en una falsa ranura, que copia la banda magnética de las tarjetas utilizadas por los clientes. Y luego, con una cámara de pequeñas dimensiones, filman por encima del teclado el momento en el que los damnificados digitan la clave. Después, ya con todos los datos, hacen una copia de los plásticos.

El modus operandi del delincuente era desde un cajero automático realizar transferencias a otras cuentas que había abierto en diversas entidades por fuera del sistema financiero, como Ualá, Brubank y Mercadopago. Además, usaba 18 terminales posnet de Mercadopago asociadas a diversos negocios ficticios para derivar el dinero a su cuenta.

El fiscal Musso unificó todos los casos radicados en el municipio de Vicente López para avanzar y determinar si se trataba del mismo delincuente, algo que finalmente se comprobó. “Cuando se conoció la denuncia que dio origen a la investigación, Red Link nos alertó de una banda que operaba en la zona norte del conurbano, sobre todo en este distrito”, dijo un detective judicial. Y el cerebro es quien ahora, finalmente, fue detenido.