Adrogué: un ex funcionario dejó un tendal de estafas piramidales con más de 100 víctimas
Se llama Sebastián Matías Otegui Rufrano. Ofrecía alta rentabilidad por inversiones en su empresa de negocios, «Liebre». Nunca devolvió el dinero y fue acusado penalmente. Había trabajado en el Municipio de Pinamar.
Sebastián Matías Otegui Rufrano está acusado de dejar un tendal de estafas con más de 100 víctimas en Adrogué, mediante un sistema piramidal como el utilizado por la polémica Generación Zoe del ahora detenido Leonardo Cositorto.
Otegui Rufrano había montado una firma llamada «Liebre» y pedía inversiones, ofreciendo una alta rentabilidad a 30 días, muy superior a las de un plazo fijo. Así logró engañar y quedarse con el dinero de muchas personas que depositaron su confianza en su negocio. Hoy son quienes reclaman ante la Justicia la devolución de su dinero.
Una de las víctimas reveló a Ámbito cómo operaba el estafador. «Empezó pidiéndole plata a la gente cómo una inversión con muy buena rentabilidad cada 30 días sin tener un lugar físico, y lo hacía desde su casa en Adrogué. Alquiló una propiedad y montó una oficina a la que se llamaba Liebre, empresa de negocios», comentó.
«Y así empezó a engañar a la gente; prometía una rentabilidad superior a un plazo fijo que la daba 1 ó 2 meses y después ya no te daba más rentabilidad, no estaba o se encontraba reunido, o de viaje. El tema es que ya no lo pudo sostener más y había muchísima gente reclamando su plata. Más de 100 personas, y de un día para el otro cerró esa oficina y se mudó de su casa porque le prendieron fuego parte de ambas viviendas», agregó.
El pasado como funcionario público del estafador de Adrogué
Otegui Rufrano, vecino de Adrogué pero oriundo de Lomas de Zamora, había sido secretario de Gobierno de la Municipalidad de Pinamar, donde tuvo una salida conflictiva en 2015 cuando, según diversos medios locales, debió renunciar ante un reclamo de trabajadores municipales que lo acusaron de amenazarlos con reprimir una protesta por cuestiones salariales.
La víctima de sus estafas detalló: «Es una persona que amenaza de muerte a gente que conozco y no quieren hablar más; le hicieron denuncias y perimetrales en su momento, se compró autos de lujo BMW, Mercedes Benz, RAM, casa en Pinamar y hoy debe tener más de 30 denuncias por estafa, hay gente que nunca firmó un papel pero hay otros que sí, y dejaban su firma, su dirección y su número de DNI».
Otras estafas piramidales en el Conurbano
Luego del escándalo con Generación Zoe, vecinos del Conurbano denunciaron a otras dos empresas que prometían ganar dinero fácil pero no les permitían retirar sus ganancias: eran las firmas Lyfe Marketing y A-HO.
La primera ofrecía ganancias por mirar videos en internet, pero como «seguro» de estadía en la app cobraban un monto de dinero que luego devolverían. Además, para retirar las ganancias era necesario subir de nivel. Eso se conseguía de dos maneras: con inversiones en dólares o con invitaciones a otras personas para que se incorporen a la red.
En tanto, la segunda se presentaba como una empresa de comercio electrónico que prometía unir a vendedores y compradores de todo el mundo. En el medio quedaban los usuarios de la aplicación, encargados de completar pedidos de compra, a quienes prometían altos porcentajes de ganancias en dólares. Para ingresar requerían una inversión y contaba con apoyo de famosos como Marley, Pampita y Wanda Nara, que la promocionaron.
Movimientos llamativos de las empresas despertaron la atención de los usuarios. «Un día nos llegó un comunicado que la plataforma estaba actualizándose para tener niveles 6 y 7, y que teníamos un plazo muy corto para apurarnos a subir de niveles e incorporar más gente en tu equipo», explicó María Cecilia, una damnificada por Lyfe Marketing que se presentó en el Juzgado 8 de Delitos Financieros de Lomas de Zamora.
Y aseguró que tuvieron problemas para cobrar el saldo acumulado. «Pasaron los días y nadie más apareció, directamente queríamos ingresar a la página, y daba error o ‘page not found'», explicó la mujer, vecina de Temperley.
En tanto, sobre A-HO, otra víctima contó que «entrás por alguien que te lo recomienda en tu grupo cercano. Se manejan por Telegram y WhatsApp y tratan de acallar las críticas. Pero los usuarios se preguntan dónde están los papeles, por qué no están inscriptos en la AFIP«. Y cerró revelando que la firma se promocionaba como representante de otra empresa estadounidense pero desde Estados Unidos negaban tener relación con una supuesta sede en Argentina.