Brian Castaño, aquel pibito de Casanova que no iba al boliche porque soñaba con ser campeón
El boxeador, vecino solidario y querido de La Matanza, busca este sábado unificar el cinturón mundial superwelter ante un calificado oponente, el estadounidense Jermell Charlo. Puede ser una pelea histórica para el deporte argentino.
Este sábado, un argentino irá por la gloria: Brian Carlos Castaño combatirá en Estados Unidos para lograr la unificación de los títulos mundiales superwelter ante el estadounidense Jermell De Avante Charlo. Nacido en Isidro Casanova hace 31 años, Castaño está ante una chance histórica para su carrera y para el boxeo nacional. Conocé la historia de un matancero que desde chico se preparó para este momento.
Brian Castaño, de Isidro Casanova al mundo
La historia de Brian arrancó lejos de los flashes que lo van a rodear este sábado en Texas. Criado en un ambiente donde se respiraba boxeo, su papá ya lo subía a upa al ring de la Sociedad de Fomento de Villa Alida, en La Matanza. Con habilidad para el fútbol e hincha de Almirante Brown, Castaño comenzó a destacarse en serio dentro del cuadrilátero y a los 15 años entró a la Selección Nacional: antes de convertirse en profesional en 2012, peleó 189 combates en formato amateur.
Dejó de lado las cosas típicas de un joven de su edad: salir, juntarse con amigos, ni siquiera conoció los boliches. Esa determinación y su esfuerzo le valieron destacarse en los primeros planos del boxeo: la empresa Top Rank, que supo manejar a glorias como Floyd Mayweather o Manny Pacquiao, puso los ojos en él para intentar patrocinarlo, algo que finalmente no se dio.
Su ascenso al profesionalismo tuvo también un lado oscuro, lo que muchas no se ve de los grandes deportistas. En 2014, tras una exigente dieta para bajar de peso antes de una pelea, empezó a sufrir ansiedad y ataques de pánico: «Subía al coche y me dolían las manos, se me torcía la boca. Mi papá llegó a hacerme respiración boca a boca», contó Brian Castaño.
De a poco comenzó a salir con la ayuda de un psicólogo, Marcelo Bivort. Luego de estar parado durante casi un año, volvió a los entrenamientos y reanudó el empinado camino hacia la cima.
Ya acomodado en la élite del boxeo internacional, Brian Castaño nunca se olvidó de sus orígenes: aún hoy, en las puertas de quedar en la historia, el deportista sigue colaborando con su municipio, acompañando a chicos de zonas relegadas de La Matanza, dando clases y clínicas de boxeo, colaborando en acciones benéficas.
Ahora, después de derrotar al brasileño Patrick Teixeira en California y quedarse con el cinturón de la OMB, le llega el turno de soñar en grande…
Brian Castaño y la pelea de su vida
Se trata de una chance única: Brian Castaño, nacido el 12 de septiembre de 1989, puede ser el primer latinoamericano de la historia en conseguir los cuatro cinturones de una misma categoría. Es que este sábado en Las Vegas estará en juego la unificación de los títulos mundiales superwelter de la Organización Mundial de Boxeo (OMB), la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), el Consejo Mundial de Boxeo (CMB) y la Federación Internacional de Boxeo (FIB).
El argentino arriba a este combate con un récord de 17 éxitos y un empate en su carrera profesional: 12 de sus victorias fueron por nocaut, demostrando su poder de fuego. Su rival, también de 31 años y apodado Iron Man, llega con chapa y antecedentes de cuidado: 33 triunfos y apenas una derrota (ante su compatriota Tony Harrison) para el púgil norteamericano, quien noqueó en sus últimos tres combates.
Para ser optimistas, Brian Castaño peleará en una cancha que ya supo de glorias argentinas: será en el AT&T Center de San Antonio, donde brilló tantas veces Emmanuel David Ginóbili con los San Antonio Spurs en la NBA. El combate irá televisado en vivo por TyC Sports y por TyC Sports Play desde las 23 horas de Argentina.
En La Matanza ya se palpita la emoción por el desafío que afrontará uno de sus vecinos más famosos y queridos.